Una treintena de “líderes progresistas” provenientes de 10 países se reunieron a mediados de año en Puebla, México, para crear un grupo político que se “adueñe del mañana” y frene el “avance de la derecha conservadora”. Sus miembros estarían detrás de los incidentes ocurridos en Chile y Ecuador.
Se trata del “Grupo de Puebla”, y al movimiento lo llamaron “Progresivamente”, según su propia declaración de intenciones.
La organización fue creada discretamente diez días antes de la XXV Reunión del Foro de Sao Paulo celebrada del 25 al 28 de julio en Caracas, Venezuela, y para numerosos analistas no se trata de una casualidad. Muchos informes plantean que el Grupo de Puebla se formó para reemplazar al Foro de Sao Paulo y eliminar en última instancia a su contraparte, el Grupo de Lima.
De acuerdo a Pedro Urruchurtu, politólogo y profesor universitario, coordinador nacional del grupo político Vente Venezuela, se trata de un plan para que la izquierda regrese a América Latina, lo que retrata en una larga serie de publicaciones en su cuenta de Twitter.
“El objetivo será acabar con el Grupo de Lima y desestabilizar a la región”, señaló Urruchurtu en un tuit.
También asegura que para él “todo está muy claro” y culpa al grupo de “oxigenar las protestas masivas y violentas ocurridas en Ecuador y Chile”, según es citado en un artículo del medio NTN24.
“Tienen todo un sistema de medios propios (InfoNodal) y externos (RT, Telesur, etc.) listos para hacer su trabajo de reimpulso de la izquierda y del reacomodo de la región. En tiempo de repliegue se han reorganizado, por no haberlos derrotado a tiempo, comenzando por Venezuela”, sentencia Urruchurtu.
Entre los miembros del grupo pueden destacarse Lula da Silva y Dilma Rousseff de Brasil, Fernando Lugo de Paraguay, Ernesto Samper de Colombia, Leonel Fernández de República Dominicana y el español José Luis Rodríguez Zapatero como voz iberoamericana, entre otros expresidentes, dirigentes políticos y candidatos a la presidencia, como Daniel Martínez por el Frente Amplio en Uruguay y Alberto Fernández por la agrupación Frente de Todos en Argentina.
Rafael Rincón-Urdaneta, director de Estrategia y Asuntos Globales de la Fundación para el Progreso (FPP) de Chile, recordó al portal web El Libero la situación de algunos de los miembros antes nombrados.
“El expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero es un vocero internacional del chavismo, el candidato presidencial argentino Alberto Fernández es la cara del kirchnerismo”, dijo Rincón-Urdaneta, nombrando también a otros políticos chilenos protectores de la dictadura venezolana como Alejandro Navarro y José Miguel Insulza.
Por su parte, para Eugenio Guerrero, coordinador de Investigación de FPP en Valparaíso, el Grupo de Puebla “es una nueva mascarada del Foro de Sao Paulo debido a que este ha tenido un desprestigio y un colosal fracaso”. Además señala que su aparición es la “nueva cara” que busca la izquierda latinoamericana y el Foro de Sao Paulo luego de la “decadencia” que experimentaron por sus relaciones con la corrupción y la dictadura chavista.
Según un artículo de actualidad publicado por RT, el grupo se opone a la aplicación del TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) y aunque no tiene una presencia explícita del chavismo, se pone del lado de la revolución bolivariana y de Maduro.
El Informe Otávola, realizado por el periodista, político y exdiplomático venezolano Edgar Omar Contreras Otálvora para Diario Las Américas, resalta la “vocación” del grupo por recuperar las “mayorías de gobierno” y su esperanza en un “giro hacia la izquierda” en la política continental a partir de las elecciones presidenciales que tendrán lugar en Argentina el 27 de octubre, para las cuales el candidato kirchnerista Alberto Fernández aparece como preferido en las encuestas.
El informe también vincula los incidentes violentos ocurridos en Quito, Ecuador, con el Grupo de Puebla y las actividades de uno de sus miembros destacados: el expresidente Rafael Correa.
Urruchurtu también culpa de las manifestaciones ocurridas en Chile a los mismos agentes causales, que van en la dirección de generar “olas desestabilizadoras contra los gobiernos que han cambiado su rumbo a políticas de liberalización económica” y forman parte del Grupo de Lima, al cual pretenden disolver.
Tanto el Informe Otávola como el portal web de noticias brasileño Defesanet, señalan el interés que tiene el nuevo movimiento progresista por ganar presencia en los medios de comunicación, denunciando una alineación entre publicaciones de izquierda de Brasil como DCM, Brasil 247 y Carta Capital, entre otras; e internacionales como El País (España), TeleSur (Venezuela) y las agencias rusas RT y Sputnik, con ediciones en varios idiomas.
La próxima reunión del grupo tendrán lugar en Argentina, los días 8, 9 y 10 de noviembre, según pudo confirmar el periódico digital Emol, donde se contará con la presencia de Alberto Fernández y Cristina Kirchner -que podrían llegar al encuentro como mandatarios electos-, junto al expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, el excandidato brasileño Fernando Haddad, y el exmandatario de Colombia Ernesto Samper, entre otros.
Luego el Grupo de Puebla concretará otra reunión en Chile los días 6, 7 y 8 de diciembre en la que “analizarán el futuro del progresismo en Chile, constituyéndose a la vez en un esfuerzo de unidad ante la dispersión opositora local”.
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