Para permitir que las escuelas se liberen de la Teoría Crítica de la Raza (TCR), los padres deben acabar con los sindicatos, dicen activistas de los derechos de los padres.
Este año escolar, las líderes de Moms for Liberty, Tiffany Justice y Tina Descovich, han montado una campaña a nivel nacional para acabar con el control sindical de las escuelas.
«Empecemos bien el nuevo año escolar, acabando con el reinado de los poderosos sindicatos de maestros, que se preocupan más por impulsar la ideología woke y por reescribir los formularios para que digan ‘padre biológico’ en lugar de ‘mamá’ o ‘papá’, que por mejorar los resultados de lectura o por cerrar las crecientes brechas de aprendizaje en nuestro país», dice el comunicado de prensa del grupo.
Los maestros han introducido la teoría crítica de la raza en las aulas en un momento en el que muchos estudiantes no aprenden a leer, dijo Justice.
Según las encuestas a nivel nacional, solo un tercio de los estudiantes de cuarto grado leen de manera competente a un nivel de lectura de cuarto grado en 2019.
Al mismo tiempo, los reportes de los maestros que dan a los niños instrucción política en la teoría crítica de la raza, el transgenerismo y otras ideologías de izquierda han aumentado enormemente.
Este impulso proviene de los sindicatos de maestros, dijo Descovich.
Los sindicatos de maestros como la Asociación Nacional de Educación (NEA) y la Federación Americana de Maestros (AFT) han sido durante mucho tiempo bastiones del poder político demócrata, dijo.
En lugar de garantizar que los maestros reciban un buen salario y den a los niños una buena educación, se han centrado en convertir la educación en algo ideológico, dijo Justice.
«Lo que hemos visto en los últimos 40 años en la educación en Estados Unidos es un cambio real que se aleja de dar a los niños habilidades prácticas para convertirlos en guerreros de la justicia social», dijo.
Moms for Liberty anima a los maestros a abandonar estos sindicatos para poner fin a su promoción de la educación de izquierda, dijo Descovich.
«Es vital que los maestros entiendan que hay opciones, que no tienen que ser miembros del sindicato», dijo.
Para muchos padres, el COVID-19 supuso nuevos descubrimientos sobre las escuelas, dijo Descovich. Durante la pandemia, los padres pudieron ver las lecciones que recibían sus hijos. A menudo, no les gustó lo que vieron.
«Creo que les impactó ver cómo se impulsaba la ideología de género en las aulas, la división entre razas, la Teoría Crítica de la Raza», dijo.
Mientras que la pandemia fue un momento para que los padres aprendieran, ahora es el momento para que actúen, dijeron los líderes de Moms for Liberty.
«El comienzo del año escolar 2022-2023 es un momento perfecto para acabar con el yugo de la muerte de los jefes sindicales woke sobre la innovación, la excelencia y la libertad en la educación pública», dice el comunicado de prensa de Moms for Liberty.
Acabar con los sindicatos
Moms for Liberty tiene una estrategia de dos partes para acabar con el poder de los sindicatos, según su comunicado de prensa.
Animará a los maestros a abandonar los sindicatos en los estados en los que puedan hacerlo, e informará a los padres sobre el rendimiento escolar.
A medida que los sindicatos como la NEA se han ido extendiendo por Estados Unidos, se han aliado con los directivos de los sistemas escolares para proteger una burocracia desmesurada, dijo Justice.
«Vemos cómo se gasta cada vez más dinero en las escuelas públicas», dijo. «Y, sin embargo, no se compensa mejor a los maestros».
Aunque la Corte Suprema ha dictaminado que es ilegal obligar a los maestros a pagar cuotas sindicales si no quieren hacerlo, a veces los sindicatos lo hacen de todos modos.
En muchos estados, incluso los que no están sindicados tienen que pagar a los sindicatos por su papel en la negociación colectiva. En otros estados, la presión social para permanecer en un sindicato juega un papel importante, dijo Descovich.
«Los sindicatos dicen: ‘Si te metes en problemas, si alguien te acusa de algo, la única persona que va a estar ahí para ti somos nosotros'», dijo.
El dinero de las cuotas sindicales da a los sindicatos un inmenso poder político. La Asociación Nacional de Educación y la Federación Americana de Maestros dieron 29 millones de dólares combinados a los demócratas y otros grupos liberales.
Los sindicatos también desempeñan un papel importante en el fomento de un plan de estudios de izquierda, dijo Justice.
«Los sindicatos se han convertido en los soldados de a pie de la izquierda en Estados Unidos, la izquierda más progresista», dijo.
Justice dijo que cree firmemente que los maestros estadounidenses ya se están separando de los sindicatos.
«Creo que el telón de la educación se ha descorrido, y todo Estados Unidos reconoce ahora que el sindicato negocia para la gente en la mesa, no para los maestros sobre el terreno», dijo.
Los padres también pueden presionar a las escuelas para que cambien su plan de estudios, dijo Descovich. Pero, a menudo, las escuelas se han opuesto a los padres.
En los bastiones sindicales, algunos simpatizantes de Moms for Liberty han perdido sus empleos debido al acoso de los miembros del sindicato a sus empleadores, dijo.
Una madre fue denunciada por el FBI. Ha sido una lucha para conseguir que los consejos escolares escuchen a los padres.
«Donde hay bastiones sindicales ha sido tan desagradable como se puede imaginar», dijo Descovich.
Moms for Liberty tiene más de 200 secciones en todo el país, dijo Descovich. A pesar de estos contratiempos, muchas divisiones han tenido éxito en la colocación de defensores de los derechos de los padres en los consejos escolares.
«Los sindicatos tienen que entender que, en las escuelas, el principal deber de los maestros es educar a los niños», dijo Justice.
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