Los delincuentes sexuales no pueden ser obligados a poner carteles en sus residencias sugiriendo a los que participan en el truco o trato no parar allí, de acuerdo con un nuevo fallo.
Una ley de Missouri que obligaba a los delincuentes sexuales a colocar un cartel en sus residencias el 31 de octubre de cada año que dijera «Prohibido pedir caramelos o dulces en esta residencia» viola la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, declaró el 2 de octubre el juez de distrito John A. Ross.
«El requisito de colocar carteles es inconstitucional y, por tanto, inaplicable», escribió el juez Ross en una decisión de 23 páginas.
El delincuente sexual Thomas Sanderson demandó en 2023 la ley, que fue promulgada en 2008, dos años después de que fuera condenado.
Según los documentos judiciales, Sanderson dijo que durante años celebró los eventos de Halloween y le dijeron que la ley no se aplicaba a él porque se promulgó después de su condena. Un año, sin embargo, los agentes de policía fueron a su casa, lo detuvieron y lo acusaron de violar la ley.
Los abogados de Sanderson dijeron que la ley era un ejemplo clásico de discurso obligado y que infringe sus derechos de la Primera Enmienda.
La ley «viola la Primera Enmienda al obligar al demandante Sanderson a “denunciarse” a sí mismo, y al obligar al demandante Sanderson a pronunciar un discurso que es falso, de naturaleza política, y que no desea pronunciar», dijeron.
El fiscal general de Missouri, Andrew Bailey, dijo en los archivos judiciales que la señal requerida no califica como discurso obligado, señalando a las decisiones anteriores de las cortes de circuito que han encontrado leyes tales como requerir que los delincuentes sexuales registren sus direcciones son constitucionales si se requieren «para la preservación de una sociedad ordenada».
El juez Ross no estuvo de acuerdo, destacando las sentencias de dos tribunales de circuito según las cuales las leyes de otros estados que obligan a los delincuentes sexuales a colocar carteles de Halloween son inconstitucionales. Uno de estos fallos citó una decisión anterior que dictaminó que la gente es libre de cubrir el lema del estado de New Hampshire en sus placas de matrícula.
«La corte considera que el requisito de colocación de carteles del Estatuto de Halloween, al igual que el lema del Estado en la matrícula de New Hampshire en Wooley, es expresión obligada», dijo el juez. «El demandante demostró que el requisito de colocación de carteles le obliga a expresar un punto de vista en palabras escritas, dirigidas al público, al que no se adhiere, en violación de la Primera Enmienda».
Los funcionarios del Estado, a través de la ley, «exigen el uso de la propiedad privada para reflejar su propio mensaje “con el propósito expreso de que sea observado y leído por el público”, privando así a los infractores registrados de su libertad de hablar con sus propias palabras o de no hablar en absoluto», añadió.
La sentencia anula la parte de la ley que exige la colocación de carteles y prohíbe a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y a los fiscales que la apliquen.
«Estamos satisfechos con la sentencia y con el hecho de que la corte reconozca que las personas inscritas en el registro tienen efectivamente derechos amparados por la Primera Enmienda», declaró a The Epoch Times Janice Bellucci, abogada que representa a Sanderson.
La oficina de Bailey no respondió a la solicitud de comentarios.
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