FILADELFIA – Mientras el candidato presidencial republicano, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebraba el 27 de octubre un mitin muy publicitado en el Madison Square Garden de Nueva York, su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, se encontraba en un mitin en Filadelfia, Pensilvania, instando a sus partidarios al voto anticipado.
Según las encuestas publicadas por el medio RealClearPolitics, Harris se sitúa actualmente por detrás de Trump en el estado de Pensilvania por 0,6 puntos porcentuales de media, cuyos 19 votos del Colegio Electoral lo convierten en el estado disputado más influyente de las elecciones de 2024. En septiembre, Harris estaba un punto porcentual por delante de Trump en la media de las encuestas.
En su mitin, en el que habló antes de lo previsto y durante apenas 15 minutos, Harris dijo a sus partidarios que «el camino a la victoria pasa por [los votantes de Filadelfia]».
«Ahora es el momento de votar anticipado. Háganlo mañana si pueden», instó Harris.
Un miembro del personal de la campaña de Harris declaró a The Epoch Times que ellos están tratando de hacer todo lo posible para atraer a los votantes antes del día de las elecciones.
Eso incluye «llamar a las puertas, mensajes de texto, llamadas telefónicas, folletos a diario», dijo Cordelia Johnson, residente del barrio Mount Airy de Filadelfia. «Yo trabajo en las urnas, así que sé que hay un buen porcentaje de nuevos votantes esta vez, y espero que eso sea un impulso».
«Nosotros tenemos la oportunidad de dejar atrás la página del miedo y la división que han caracterizado nuestra política durante una década por culpa de Donald Trump», declaró Harris.
«Nosotros tenemos la capacidad de pasar la página de ese mismo viejo y cansado libro de jugadas porque estamos agotados de él».
El tema de la participación en Pensilvania se ha convertido en un punto central tanto para la campaña de Harris como para la de Trump, a medida que la carrera prosigue en su fase final. Trump se refirió a esta participación en su mitin en State College, el 26 de octubre, en el que pidió a sus simpatizantes que voten en modo anticipado en gran número, invocando el lema «demasiado grande para manipular», al igual que hizo el compañero de fórmula de Harris, el gobernador Tim Walz (D-Minn.) en Scranton.
Harris afirmó que «va a ser una carrera reñida hasta el final, así que tenemos mucho trabajo por delante, pero nos gusta el trabajo duro. El trabajo duro es un buen trabajo. El trabajo duro es un trabajo alegre»,
«No se equivoquen: nosotros ganaremos», añadió la vicepresidenta.
«Tenemos nueve días para conseguirlo (…) nadie puede quedarse al margen», afirmó la candidata. «Hay demasiado en juego, y no debemos despertarnos el día después de las elecciones pensando en lo que podríamos haber hecho». Parecía referirse a las elecciones de 2016, en las que la baja participación demócrata en Pensilvania contribuyó a la derrota de Hillary Clinton.
Por su parte, en el Madison Square Garden, Trump declaró a sus partidarios que era optimista sobre la participación de los electores republicanos a través del voto anticipado.
«Vamos a tener la mayor victoria en la historia de nuestro país el 5 de noviembre», dijo Trump.
También indicó que esperaba ganar Nueva York, un estado que no ha votado a un republicano para presidente en los últimos 30 años.
«También queremos ganar Nueva York, y hacerla segura y fuerte y hermosa, y vibrante de nuevo. Y vamos a hacerlo», declaró Trump. «Sería un gran honor ganar Nueva York».
El voto por correo -que se generalizó durante la pandemia del COVID-19 en 2020, cuando se consiguió un total del 43% de votos emitidos por correo- se está utilizando menos este año.
A 24 de octubre, cuando faltan 12 días para las elecciones del 5 de noviembre de 2024, no parece que el voto por correo vaya a igualar esas cifras de 2020 y que el voto anticipado será similar al de los últimos ciclos electorales.
Protesta sobre Gaza
Dos manifestantes pro-Gaza interrumpieron a la vicepresidenta Harris después de que iniciara su discurso y ondearon una bandera palestina, lo que la llevó a abordar la guerra de Israel contra Hamás mientras la multitud coreaba «No vamos a volver atrás», por encima de los cánticos de los manifestantes.
«Voy a hablar de Gaza un minuto. Podemos y debemos aprovechar esta oportunidad para poner fin a esta guerra y traer a los rehenes a casa, y haré todo lo que esté en mi mano para que así sea», dijo Harris, abordando una cuestión que ha perjudicado a su campaña en estados disputados como Michigan, donde muchos votantes musulmanes se oponen a su candidatura en protesta por la ayuda militar de la administración Biden-Harris a Israel.
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