La vicepresidenta Kamala Harris no intentará anular a Elizabeth MacDonough, asesora del Senado, si dictamina que no se puede promulgar un aumento del salario mínimo federal mediante un proceso conocido como reconciliación presupuestaria, según el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain.
“Ciertamente eso no es algo que haríamos. Vamos a respetar las reglas del Senado y a trabajar dentro de ese sistema para que este proyecto de ley sea aprobado”, dijo Klain en MSBNC el 24 de febrero.
Los demócratas están impulsando el paquete de estímulo del presidente Joe Biden, el cual consta de USD 1,9 billones, utilizando el método de reconciliación presupuestaria, que requiere 50 votos para aprobarse, en lugar de los 60 votos necesarios para romper el obstruccionismo legislativo.
El paquete incluye un aumento del salario mínimo federal a USD 15 por hora. El aumento puede resultar en la pérdida de 1.3 millones de empleos, según estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Todavía no está claro si el aumento del salario mínimo puede aprobarse mediante la reconciliación presupuestaria, en virtud de la regla Byrd, que exige que los elementos legislativos tengan un impacto en el presupuesto federal. La decisión final depende de MacDonough.
Incluso si el salario mínimo no se elimina del proyecto de ley, es posible que los demócratas tengan que modificar el proyecto de ley para obtener 50 votos. El senador Joe Manchin (D-W.Va.) se opone al mínimo de USD 15 y ha dicho que respaldará una enmienda para cambiar la cantidad a USD 11 por hora. La senadora Kyrsten Sinema (D-Ariz.) también ha expresado su preocupación por la provisión salarial, específicamente porque no parece ser una partida presupuestaria que pueda incluirse en la iniciativa de conciliación demócrata.
El aumento del salario mínimo no es la única disposición del gigantesco paquete de 1,9 billones de dólares, en el que se han incluido muchos elementos que tienen poco que ver con abordar la pandemia. El proyecto de ley presenta la primera expansión del Obamacare en una década y un crédito tributario reembolsable por hijos, que equivaldría a un pago mensual en efectivo a las familias que no deben impuestos.
Según el Comité para un Presupuesto Federal Responsable, casi la mitad del paquete de estímulo se ha desviado a cuestiones no relacionadas con la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus. Los republicanos de la Cámara, incluido el líder de la minoría, Kevin McCarthy (R-Calif.), han dicho que solo el 9 por ciento del proyecto de ley de estímulo está dirigido a cuestiones relacionadas con la pandemia.
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