Un heredero de la fortuna de Anheuser-Busch dijo que la desastrosa campaña de marketing de la empresa en la que aparecía el TikToker transexual Dylan Mulvaney, una medida que provocó un descenso masivo de las ventas de cerveza Bud Light, haría que sus antepasados «se revolcaran en sus tumbas».
En una entrevista concedida el 4 de agosto a TMZ, Billy Busch, de 63 años, habló de su nuevo libro sobre el legado de la familia Busch. Dijo que la generación fundadora de la empresa, incluido el patriarca de la familia, Adolphus Busch, nunca impondría a los clientes algo tan personal como el sexo y el género.
«Mis antepasados se habrían revolcado en sus tumbas», dijo el Sr. Busch a Harvey Levin, de TMZ. «Eran muy patriotas. Amaban este país y lo que representaba. Creían que la transexualidad, los gays, ese tipo de cosas, era una cuestión muy personal».
Un inmigrante alemán, Adolphus Busch, fabricó la primera partida de Budweiser pale larger en Missouri en 1876. Cuando murió en 1913, la empresa que cofundó se había convertido en un imperio cervecero multimillonario.
«Amaban este país porque es un país libre y la gente puede hacer lo que quiera, pero nunca se pretendió que estuviera en una lata de cerveza ni que se impusiera a la gente. Nunca habrían comercializado sus marcas de ese modo».
Como empresa, Anheuser-Busch solía ser una «gran comercializadora», conocida por poner anuncios creativos evitando al mismo tiempo el tipo de fiasco en que se metió Bud Light, dijo el Sr. Busch. «Lo último que habrían hecho es ponerse tan polémicos como lo ha hecho InBev con Dylan Mulvaney».
«¿Qué opinas de la reacción a ese posteo de Instagram, porque la reacción fue sísmica?», preguntó el Sr. Levin, refiriéndose al video del 1 de abril en el que el Sr. Mulvaney anunciaba el patrocinio de Bud Light mientras se vestía como el personaje de Audrey Hepburn en «Desayuno con diamantes».
«Creo que la gente que bebe cerveza es la gente corriente», respondió el Sr. Busch. «Creo que son los obreros que salen y trabajan duro todos los días, y lo último que quieren que les impongan una lata de cerveza con ese tipo de mensaje. No creo que sea eso lo que buscan. Quieren que su cerveza sea verdaderamente americana, verdaderamente patriótica».
La conversación se intensificó después de ese punto, y el Sr. Levin y el copresentador Brad Appleton expusieron por qué creían que sería «prejuicioso» e «intolerante» que los bebedores no quisieran ver publicidad transgénero en las latas de cerveza.
El Sr. Busch siguió respondiendo desde el punto de vista del marketing y la decencia pública, diciendo que a la mayoría de los que beben Bud Light «les importan las cosas sanas, les importa América y creen que ciertas cosas de la vida deben mantenerse en privado».
«Hay una minoría tan pequeña de transexuales que quieren cambiar su identidad sexual que no tiene sentido poner eso en una cerveza muy popular en la que la mayoría de los bebedores –el 99%– son heterosexuales y no se identifican con algo así», dijo Busch. «No tiene sentido».
La entrevista, que en principio trataba sobre el libro, terminó con el Sr. Levin acusando al Sr. Busch de «abrir la puerta» del debate sobre la política transgénero. El presentador de TMZ afirmó entonces que, aunque fue él quien sacó el tema de Mulvaney, fue culpa del Sr. Busch por dar una respuesta inesperada.
A principios de esta semana, se reportó que Anheuser-Busch iba a vender ocho marcas de cerveza y bebidas a la empresa de cannabis Tilray Brands por una cantidad no revelada.
Tilray Brands ha confirmado el reporte, diciendo que el acuerdo afecta a Shock Top, Blue Point, Breckenridge Brewery, Redhook Brewery, HiBall Energy y otras marcas. La venta, que se espera que concluya este año, incluye cervecerías y brewpubs asociados a las marcas y a sus actuales empleados.
La venta se produce después de que el informe de resultados del tercer trimestre de Anheuser-Busch mostrara un descenso de más del 10 por ciento en los ingresos del último trimestre en EE. UU., en comparación con el mismo periodo del año anterior. La empresa declaró que el descenso se debió «principalmente a la disminución del volumen de Bud Light» en medio del boicot a la marca.
Dicho esto, los ingresos totales de Anheuser-Busch el trimestre pasado aumentaron en realidad más de un 7 por ciento, gracias a las ventas en el extranjero de sus otras cervezas, que compensaron las pérdidas nacionales de Bud Light.
«En el segundo trimestre de 2013, nuestra cartera de cervezas convencionales registró un aumento de los ingresos de un dígito intermedio, ya que el crecimiento de dos dígitos en Sudáfrica y Colombia se vio parcialmente compensado por el descenso de los ingresos de Bud Light en Estados Unidos», explica el informe.
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