JERUSALÉN—El ejército israelí dijo el domingo que mató a otro líder de alto rango de Hezbolá en un ataque aéreo mientras el grupo terrorista libanés se recuperaba de una serie de ataques devastadores y del asesinato de su líder general, Hassan Nasrallah.
El ejército dijo que Nabil Kaouk, el subdirector del Consejo Central de Hezbolá, fue asesinado el sábado. El grupo terrorista Hezbolá confirmó su muerte, lo que lo convierte en el séptimo líder de alto rango de Hezbolá asesinado en ataques israelíes en poco más de una semana. Entre ellos hay miembros fundadores que habían evitado la muerte o la detención durante décadas.
El ejército israelí dijo que llevó a cabo otro ataque selectivo en Beirut posteriormente el domingo, y que se darán más detalles próximamente.
Hezbollah había confirmado anteriormente que Ali Karaki, otro alto mando, murió en el ataque del viernes que mató a Nasralá. El ejército israelí había dicho anteriormente que Karaki murió en el ataque aéreo, que tuvo como objetivo un complejo subterráneo de Beirut donde se reunían Nasralá y otros altos cargos de Hezbolá.
El ejército dijo que al menos otros 20 terroristas de Hezbolá murieron en el ataque, incluidos dos colaboradores cercanos de Nasralá, uno de los cuales estaba a cargo de su equipo de seguridad.
Hezbolá también ha sido blanco de un sofisticado ataque a sus buscapersonas y walkie-talkies, del que se ha culpado ampliamente a Israel. Una oleada de ataques aéreos israelíes en amplias zonas del Líbano ha matado al menos a 1030 personas en menos de dos semanas, según el Ministerio de Salud del Líbano.
Cientos de miles de personas han tenido que abandonar sus hogares en Líbano debido a los últimos ataques. El gobierno calcula que unas 250,000 están en refugios, y entre tres y cuatro veces más están alojadas en casas de amigos o familiares o acampando en las calles, dijo a The Associated Press el ministro de Medio Ambiente, Nasser Yassin.
Hezbolá ha seguido lanzando cohetes y misiles contra el norte de Israel, pero la mayoría de ellos han sido interceptados o han caído en zonas abiertas. Ningún israelí ha muerto desde que comenzó la última oleada de ataques contra los principales dirigentes de Hezbolá el 20 de septiembre.
Kaouk era un miembro veterano de Hezbolá desde la década de 1980 y se desempeñó como comandante militar de Hezbolá en el sur del Líbano durante la guerra de 2006 con Israel. Solía aparecer en los medios locales, donde comentaba sobre política y acontecimientos relacionados con la seguridad, y pronunciaba panegíricos en los funerales de terroristas de alto rango. Estados Unidos había anunciado sanciones contra él en 2020.
Hezbolá comenzó a lanzar cohetes, misiles y drones contra el norte de Israel después de que el ataque de Hamás desde Gaza el 7 de octubre desencadenara la guerra allí. Hezbolá y el grupo terrorista Hamás son aliados que se consideran parte de un «Eje de Resistencia» respaldado por Irán contra Israel.
Israel ha respondido con oleadas de ataques aéreos y el conflicto ha ido aumentando progresivamente hasta el borde de una guerra total, lo que aumenta los temores de una conflagración en toda la región.
Israel dice que está decidido a devolver a unos 60,000 de sus ciudadanos a las comunidades del norte que fueron evacuadas hace casi un año. Hezbolá ha dicho que sólo detendrá el lanzamiento de cohetes si se produce un alto al fuego en Gaza, algo que ha resultado difícil de lograr a pesar de meses de negociaciones indirectas entre Israel y Hamás, lideradas por Estados Unidos, Catar y Egipto.
Por Melanie Lidman y Kareem Chehayeb.
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