Hija de un exfuncionario chino de alto nivel denuncia las extremas medidas de COVID

Por Mary Hong
08 de diciembre de 2022 3:30 PM Actualizado: 08 de diciembre de 2022 3:30 PM

Un vídeo posteado por la hija de un exfuncionario del Partido Comunista se hizo viral en las redes sociales chinas por desafiar la política de Cero COVID de Beijing.

Se trata de Xie Xiaoqin, hija del general Xie Fuzhi (1909-1972), que también fue viceprimer ministro y ministro de Seguridad Pública del Partido Comunista Chino (PCCh) durante la era de Mao Zedong.

En un vídeo difundido el 6 de diciembre, ella advirtió a los encargados de aplicar la política de COVID de que debían acatar la Constitución china.

«A cualquiera que viole la Constitución y la ciencia, e intente matar a mi gato o arrastrarme a un centro de cuarentena, yo se lo diré con firmeza: La Constitución me da mis derechos. Su ustedes quieren irrumpir en mi casa, déjenme decirles que tengo derecho a defenderme», afirmó la mujer.

En el vídeo, Xie coge un cuchillo y advierte a quienes aplican las «medidas contra la humanidad y la conciencia» que serán «recibidos con un cuchillo de cocina» si ellos fuerzan la entrada en su casa.

Luego coge otro cuchillo y dice que quienes violen la ley, irrumpan en las casas o apliquen la ley con violencia serán recibidos con un par de cuchillos de cocina.

«Yo ya tengo 75 años. No temo a la muerte. Villanos, vengan y sean los sacrificados».

Xie es la exredactora en jefe de la revista china Dangdai Bimonthly, que depende de la editorial estatal People’s Literature Publishing House (Casa Editorial de Literatura Popular).

Su vídeo está bloqueado en la plataforma china de redes sociales Weibo.

Un perro Corgi es sacrificado por el personal de COVID en las calles del este de Shanghái, China, el 6 de abril de 2022. (Redes sociales chinas / Captura de pantalla vía The Epoch Times)

Medidas COVID extremas

Durante el cierre de mayo en Shanghai, las autoridades enviaron a los residentes infectados a centros de cuarentena y despacharon personal, también conocidos como los «guardias blancos», para desinfectar los hogares. Numerosos informes y vídeos revelaron que la desinfección se llevó a cabo, por ejemplo, descartando productos en los frigoríficos y golpeando a las mascotas hasta la muerte.

Cai Xia, un disidente y exprofesor de la Escuela del Partido Central del PCCh en Beijing, volvió a publicar el vídeo de Xie en Twitter con un cometario. «Quien irrumpa en una casa privada sin pasar por los procedimientos legales y sin emitir documentos legales formales, sea quien sea, el propietario tiene derecho a defenderse en defensa propia», escribió Cai.

«Una segunda generación roja, una anciana, no teme nada; ¿Es que hay que preocuparse por los jóvenes? Proteger a las familias de los intrusos guardias blancos. Esto es una defensa justificada», respondió un segundo usuario chino.

«Incluso una segunda generación de un dirigente de alto rango [Xie Fuzhi] se vio obligada a defenderse. Esta sociedad se ha derrumbado», dijo otro usuario.

Las duras normas de COVID han dificultado la vida de decenas de millones de personas durante los dos últimos años. A fines del mes pasado, estallaron protestas en todo el país en respuesta al incendio de un rascacielos en Urumqi, la capital de Xinjiang, en el que murieron al menos 10 personas. Los residentes quedaron atrapados en el edificio mientras la ciudad permanecía en confinamiento durante más de 100 días.

A través del movimiento llamado «Papel en Blanco», estudiantes de decenas de universidades de toda China se han visto protestando contra las medidas extremas chinas sosteniendo un trozo de papel en blanco, exigiendo a las autoridades que levanten los cierres y pidiendo la dimisión del PCCh y de su líder, Xi Jinping.


Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí


Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.