El presidente saliente de Honduras dijo el 13 de noviembre que espera que su país continúe su amistad con Taiwán incluso después de su presidencia, en un momento en que el país centroamericano podría cambiar su reconocimiento diplomático a favor de Beijing.
«Aquí está presente Honduras como un amigo verdadero de Taiwán», dijo el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, a la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, en el segundo día de una visita sorpresa de tres días a Taiwán. «Los amigos, los bueno aliados, en las dificultades es donde más se prueban», dijo en la oficina presidencial en Taipei.
«Siempre abogaremos por esta profunda relación durante sea presidente y después», dijo Hernández, que está completando el segundo de sus dos mandatos de cuatro años y debe dejar el cargo en enero.
Hernández visitó Taiwán como presidente en 2015 y 2016, tras una visita anterior como presidente del Parlamento del país centroamericano en 2010, según Central News Agency con sede en Taipei.
Tsai calificó la llegada de Hernández como «significativa», ya que es el primer viaje realizado por cualquiera de los aliados latinoamericanos de Taiwán desde el brote de COVID-19. Tsai dijo que espera que los dos países continúen «ayudándose mutuamente» en la escena internacional.
A pesar de que la reunión celebraba los 80 años de relaciones diplomáticas entre las dos naciones, sus vínculos futuros están ahora en duda, ya que el partido de Hernández se enfrenta a un difícil reto en las próximas elecciones para mantener la presidencia.
Una de las principales candidatas, respaldada por los principales partidos de la oposición en Honduras, prometió establecer una relación oficial con China si resultaba electa, lo que significa que el país dejará de reconocer a Taiwán como país independiente.
La candidata presidencial, Xiomara Castro, también dijo que legalizaría el aborto en algunas situaciones.
Honduras es actualmente uno de los 15 países que mantienen lazos diplomáticos formales con la isla autogobernada, que Beijing reclama como un territorio separatista, que debe ser reunificado por la fuerza si es necesario.
El régimen chino ha utilizado métodos diplomáticos y económicos para ganarse a los restantes aliados. Siete países cambiaron el reconocimiento de Taipéi a Beijing entre 2016 y 2019. Honduras, entre un pequeño número de países latinoamericanos que mantienen lazos diplomáticos con el Taiwán democrático, ha estado bajo presión para cambiar.
Mientras que las naciones vecinas recibieron las vacunas contra el COVID-19 de Beijing, países como Honduras y Guatemala no lo hicieron, aunque Beijing negó que la llamada «diplomacia de las vacunas» sea para ganar peso geopolítico.
En una sesión ordinaria de las Naciones Unidas celebrada en septiembre, Honduras no apoyó de forma vocal la inclusión internacional de Taiwán, marcando el sexto año consecutivo en que el aliado centroamericano se abstiene de hacerlo.
Taiwán había acusado a China de querer utilizar las elecciones hondureñas para «crear controversia» y advirtió a Honduras que no se dejara arrastrar por las promesas «llamativas y falsas» de Beijing.
«Espero que Taiwán y Honduras continúen apoyándose mutuamente y progresando en los futuros desarrollos», dijo Tsai el 13 de noviembre, al mismo tiempo que expresó su deseo de que las elecciones presidenciales se desarrollen sin problemas.
Se ha especulado ampliamente sobre el futuro de Hernández y si el gobierno de Castro permitiría su extradición a Estados Unidos, donde es objeto de una investigación por narcotráfico. El presidente ha negado con vehemencia cualquier vínculo con los cárteles de la droga.
Tres de los hijos de Hernández estudian o trabajan actualmente en Taiwán, según el portavoz de la oficina presidencial de Taiwán, Xavier Chang.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China no ha comentado el viaje de Hernández a Taiwán.
Con información de Reuters.
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