Un sistema hospitalario con sede en Búfalo, Nueva York, anunció que despidió a unos 100 empleados no vacunados a los que previamente se les había concedido una exención religiosa.
Los trabajadores de Kaleida Health tenían hasta el domingo 6 de diciembre para recibir su segunda dosis de la vacuna contra el COVID-19, según Kaleida. La empresa dijo que ahora retrasará las cirugías opcionales de pacientes internos que se consideren no esenciales en el Centro Médico General de Búfalo y en el Hospital Suburbano Millard Fillmore.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, había ordenado previamente que el personal de salud estuviera totalmente vacunado antes del 5 de diciembre.
Kaleida Health dijo que «en combinación con el plazo anterior de la orden de vacunación en noviembre, aproximadamente 200 trabajadores han sido despedidos de la organización». Unos 100 trabajadores fueron despedidos durante la última ronda de despidos de esta semana, dijo la empresa.
Con la decisión, la empresa dijo que «tiene la intención de permanecer abierta y proporcionar acceso a los servicios en toda la organización» y que «añadirá recursos y publicará puestos para poder seguir estando ahí para la comunidad».
La empresa intentará a partir de ahora «gestionar el número de cirugías electivas de pacientes internos que requieren una estancia de una noche», dijo el Dr. Michael Mineo, director médico del Centro Médico General de Búfalo y del Hospital Suburbano Millard Fillmore, en una declaración a los medios de comunicación locales. «Esto garantizará que, como sistema de salud, estemos gestionando adecuadamente la atención a los pacientes y las necesidades de la comunidad en medio de este actual aumento de los casos de COVID-19».
La medida se produjo mientras otro sistema hospitalario del estado de Nueva York, Catholic Health, confirmó a los medios de comunicación locales que comenzará a aplicar la orden.
«El equipo de Recursos Humanos de Catholic Health ha estado recopilando el número de asociados vacunados, junto con los que han presentado exenciones médicas válidas o aplazamientos, para determinar un recuento final del personal que no cumple con la orden», dijo Catholic Health en un comunicado. «Al día de hoy, unos 185 asociados, o menos del 2 por ciento de la plantilla del sistema de salud, siguen sin vacunar».
«Cualquier asociado de Catholic Health que no esté vacunado y que no haya recibido una exención médica o un aplazamiento, está siendo despedido en base a los requisitos de la orden estatal», añadió la firma.
El 15 de noviembre, todos los hospitales del estado de Nueva York recibieron una carta de Hochul en la que se decía que los trabajadores a los que anteriormente se les había concedido la exención religiosa tienen que tener ahora la documentación de una primera dosis de la vacuna, o una exención médica válida.
«Cada persona que entra en un centro sanitario no debería tener nunca el temor de contraer el COVID de la persona encargada de cuidar su salud», dijo Hochul, una demócrata que se presenta a la reelección.
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