Hyundai decidió ponerle un poco de chile picante a la receta de sus autos cuando introdujo la división “N” con el debut del i30 N. Esto sucedió no hace mucho, solo en el 2017. Aun así, la popularidad de algunos de sus modelos con el distintivo N ha sido notable, por lo que la expansión en forma de los “N Line” era de esperar.
Si bien los N Line no son portadores de la “pegada” de los N, se distinguen de los modelos regulares por mejoras en estilo y rendimiento, que (sobre todo en rendimiento) no son tan notables en algunos casos.
Esta semana la pasamos probando el Hyundai Sonata N Line del 2022, que a diferencia de otros productos del fabricante con el distintivo N Line, se acerca bastante a la filosofía inspirada en los modelos N.
Sé que para algunos esta jerigonza de modelos N y N Line puede que resulte enmarañada, por lo que resumamos este lío así: existe un Hyundai Sonata regular y una versión N Line como la que probamos.
¿Tendremos un Sonata N (sin el Line) para completar el trío? Por ahora no, y ni siquiera rumores se escuchan.
Desde afuera y por dentro
Uno de los cambios notables de estilo para el 2022 es la versión “Night Edition” o edición nocturna del Sonata N Line. No lo probamos, pero la diferencia con el Sonata de nuestra prueba es solo cosmética.
El diseño exterior del Hyundai Sonata puede polarizar. Algunos lo encontrarán innovador y moderno, pero otros opinan que es demasiado atrevido. Es cierto que el estilo exterior es audaz y arriesga con pliegues largos y un frente amplio y abierto, pero entre un rebaño donde prima lo convencional, un poco de aventura no viene mal. En nuestra opinión, el actual diseño es un ganador.
El Sonata N Line tiene un kit de carrocería único, con cuatro salidas de escape en lugar de las dos del Sonata estándar. Viene con rines exclusivos de 19 pulgadas, spoiler trasero, techo corredizo panorámico, espejos laterales negros brillantes y todas las insignias distintivas N Line. Esto se suma a las nuevas y exclusivas luces de circulación diurna que suben como una cinta sobre el capó.
El interior del Hyundai Sonata N Line 2022 está a la altura de los estándares de sedanes incluso más suntuosos. Aunque es un modelo orientado al rendimiento, no sacrifica el confort ni el lujo por la deportividad. La cabina tiene iluminación ambiental interior, costuras en los asientos y un volante que recuerda su carácter deportivo.
Una adición que agradecemos este año son los asientos deportivos N, con refuerzos de cuero napa e inserciones de gamuza. A pesar de los refuerzos, siguen siendo muy cómodos.
El espacio interior es abundante, y aunque el maletero no llega a estar entre los más amplios de la clase, 16 pies cúbicos deben ser suficientes para llevar las valijas con los encargos que la abuela y los primos nos hicieron antes de viajar.
Algo que me disgusta es la ausencia de una agarradera interior para cerrar el maletero. Es algo que también he visto en algunos Toyota Camry, y aunque pudiera parecer una trivialidad, tirar de esta puerta desde afuera en invierno cuando el auto está considerablemente sucio, no es nada agradable.
Equipamiento y seguridad
Una de las razones por las que frecuentemente recomiendo autos de Hyundai a quienes a mí acuden en busca de consejo, es la amplia gama de tecnología y prestaciones de seguridad que el fabricante provee en sus vehículos de forma estándar, y por las que otros cargan sumas adicionales.
Nuestro Sonata N Line de prueba no contenía paquete alguno de mejoras, y por menos de $35,000 dólares incluía crucero adaptativo, parlantes Bose Premium, frenado de emergencia con detección de peatones, alerta de tráfico cruzando en la parte posterior, techo panorámico, arranque remoto, asistencia para evitar colisiones laterales, alerta de salida del carril y asistente de mantenimiento en el carril entre otras.
Integración con Android Auto y Apple CarPlay y carga inalámbrica de teléfonos tampoco son exclusivos del nivel de equipamiento más alto.
Hyundai ofrece por costo adicional tecnología de punta como la llave digital, que permite usar el teléfono como la llave del auto, o el asistente de estacionamiento remoto, con el que puede mover el auto fuera o dentro de un estacionamiento angosto.
El sedán viene con una pantalla táctil a color de 8 pulgadas. Sin embargo, si opta por un nivel de equipamiento más alto como el N Line, obtendrá características adicionales como una pantalla táctil a color de 10.25 pulgadas con navegación.
El sistema de información y entretenimiento de Hyundai domina lo básico sin drama, aunque la nueva versión viene más cargada de opciones que pueden llegar a ser algo abrumadoras. El sistema Hyundai Blue Link tiene un diseño de menús prácticos, procesa las órdenes con rapidez y hay controles analógicos fáciles de utilizar como respaldo.
En la carretera
El motor que utilizan en el 2022 Sonata N Line es exclusivo del modelo, y joya de la corona. Hablamos aquí de un turbo alimentado de cuatro cilindros y 2.5 litros, capaz de producir 290 caballos de potencia y 311 libras pie de torque. La transmisión es automática de 8 velocidades con doble embrague y fue desarrollada por la división de rendimiento de Hyundai, con un enfoque de ajuste en la diversión en lugar de la eficiencia.
Esta combinación funciona increíblemente bien. El motor acelera con entusiasmo y parece proporcionar potencia en cualquier situación que se le demande. La transmisión cuando colocamos el auto en modo de conducción Sport+ más agresivo cambia de marcha con una velocidad impresionante.
Alcanzar las 60 millas o 97 kilómetros toma 5.2 segundos, menos que a un Kia K5 GT.
Hay un trabajo notable en la arquitectura del N Line, que marca una diferencia notable con el Sonata regular. Hay bastante rigidez que logran con barras de torsión más gruesas, amortiguadores especialmente ajustados y mejor soporte para el motor y transmisión, dando como resultado un rodamiento del cuerpo bien controlado cuando tomamos curvas cerradas.
Los frenos también son mejorados, permitiendo al Sonata N Line detenerse en solo 110 pies (33.5 metros) a una velocidad de 60 millas por hora (97 kilómetros por hora) algo mejor que otros competidores como el Toyota Camry TRD.
El consumo de combustible promedia 38 millas por galón, unos 8.4 litros cada 100 kilómetros.
No sería una exageración si afirmamos que el 2022 Sonata N Line marcha, gira, se detiene y conduce de una manera que va mucho más allá de lo que esperaríamos de un automóvil de este tipo.
Para escoger
El Hyundai sonata del 2022 viene en cinco modelos, SE, SEL, SEL Plus, N Line, y Limited.
El modelo probado por nosotros, N Line, comienza en los $33,450, y se puede mejorar su apariencia con el paquete de edición nocturna o por $1,300 adicionales. Solo se producirán 1,000 unidades del N Line Night Edition.
El más económico es el Sonata SE que se comercia por $24,150. Nuestra elección sería un SEL por $25,950, que viene bien equipado y se le puede agregar un paquete de conveniencia por algo más de $2,000 dólares. En el otro extremo un Sonata Limited del 2022 comienza en los $34,100.
La competencia del Sonata N Line no es abundante, menos ahora que los sedanes padecen de cierto infortunio, pero podemos mencionar al Honda Accord Sport, Toyota Camry TRD, Mazda 6 o el Kia K5 GT.
Concluyendo
El 2022 Hyundai Sonata N Line es parte del limitado oasis que adorna el desierto de los sedanes. Cuando fabricantes (sobre todo estadounidenses) han enterrado sus modelos, influenciados por la aparente (¿inducida quizá?) y desmedida popularidad de los utilitarios o SUV, Hyundai sigue apostando por los sedanes, y los enardece con una creación como el Sonata N Line.
Es una opción versátil que marca suficientes casillas como para agradar a compradores que busquen un auto cómodo, seguro, con buena tecnología y, sobre todo, divertido para conducir. ¡Fuera el aburrimiento en la carretera!
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