La industria de las aerolíneas recibió otro golpe más durante el ajetreado fin de semana del Día de Año Nuevo, con más de 4000 vuelos cancelados solo el 2 de enero, más de la mitad del total, que sumaron 2377 solo en los Estados Unidos.
Más de 11,200 vuelos se retrasaron el domingo en todo el mundo según FlightAware.com, un sitio que recopila datos de tráfico aéreo comercial.
Los retrasos se produjeron durante uno de los períodos de viaje más importantes de la temporada, y el número de viajes se acercó a los niveles previos a la pandemia.
El fin de semana puso fin a una desastrosa temporada de viajes por festividades en la que se cancelaron más de 13,000 vuelos en Estados Unidos desde la víspera de Navidad hasta el día de Año Nuevo.
La escasez de personal, las condiciones climáticas adversas del invierno, y el aumento de los casos de coronavirus causados por la variante ómicron continúan perturbando los viajes.
Mientras tanto, la difusión de la nueva variante ómicron ha frenado las festividades de Año Nuevo en todo el mundo, ya que los gobiernos establecieron restricciones a las reuniones públicas y los viajes.
Southwest fue la más afectada con 419 cancelaciones y más de 950 retrasos en los vuelos, la mayor cantidad de cualquier aerolínea.
La pequeña aerolínea SkyWest sufrió 510 cancelaciones de vuelos.
Los inversores han ignorado en gran medida las interrupciones de las festividades, incluso cuando la crisis continúa en la nueva semana.
Las acciones de las aerolíneas cotizaron al alza en las operaciones previas a la apertura, una señal de que los inversores están mirando hacia el resto del año, cuando se espera que aumente la demanda de viajes.
Las acciones de American, United y Alaska subieron cerca del 1 por ciento en las operaciones previas a la apertura, mientras que las acciones de Southwest Airlines subieron un 0.5 por ciento.
«La ómicron podría tener un impacto modesto y a corto plazo en el espacio debido a que los empleados de la aerolínea se ven obligados a pasar por una cuarentena de 5 días cuando se infectan, y algún impacto en la demanda», dijo Stephen Trent, analista de aerolíneas de Citigroup, en una entrevista con CNBC.
«Sin embargo, las tasas de vacunación más altas y los tratamientos antivirales emergentes son solo algunos de los factores que podrían hacer que las reacciones negativas e impulsivas del precio de las acciones ante la aparición de variantes futuras parezcan cada vez más irracionales», dijo Trent.
La temporada de viajes festivos en EE. UU., que incluye Navidad y Año Nuevo, suele ser una época pico para los viajes aéreos y la más rentable para la industria, pero la rápida propagación de la ómicron ha obligado a las aerolíneas a cancelar vuelos a medida que aumenta el número de pilotos, tripulaciones de cabina, y personal de apoyo en cuarentena.
Las aerolíneas estadounidenses han estado luchando para que sus empleados trabajen horas extra durante las festividades, a pesar de las ofertas de importantes incentivos económicos luego de dar de baja o despedir a miles en los últimos 18 meses debido a los mandatos de vacunas y la pandemia.
Las agencias de transporte en los Estados Unidos también están suspendiendo o reduciendo los servicios debido a la escasez de personal relacionada con la ómicron.
La TSA examinó a 1,616,316 pasajeros el día de Año Nuevo, frente a los 1,192,881 de 2021, pero menos que los 2,178,656 pasajeros examinados en 2020 antes de la pandemia.
Sin embargo, 1,650,795 pasajeros fueron examinados en la víspera de Año Nuevo, más del doble de los 805,990 pasajeros examinados el año anterior.
El aumento de casos de virus del PCCh (Partido Comunista Chino) en Estados Unidos está llevando a algunas empresas a reducir el número de empleados que trabajan desde sus oficinas en enero.
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