Un ingeniero eléctrico de Los Ángeles que conspiró para robar tecnología de misiles para venderla a una empresa china ha sido condenado a más de cinco años de prisión.
El juez de distrito John A. Kronstadt sentenció a Yi-Chi Shih, de 66 años, de Hollywood Hills, a 63 meses —más de cinco años— de prisión por su papel en la trama. También se le ordenó pagar 362,698 dólares en restitución al Servicio de Impuestos Internos (IRS) y el juez le impuso una multa de 300,000 dólares.
Shih fue detenido en enero de 2019 después de que se descubriera que había participado en una trama ilegal para obtener circuitos integrados de microondas monolíticos (MMIC) de una empresa estadounidense para pasarlos de contrabando a la empresa china Chengdu GaStone Technology (CGTC), que fue incluida en la lista de entidades del Departamento de Comercio en 2014.
Fue condenado por un cargo de conspiración por violar la Ley de Poderes Económicos Internacionales de Emergencia (IEEPA) y el Reglamento de Administración de Exportaciones (EAR).
Shih también fue condenado por cuatro cargos de fraude postal, dos cargos de fraude electrónico, un cargo de conspiración para obtener acceso no autorizado a una computadora protegida para obtener información, un cargo de hacer declaraciones falsas a un agente del FBI, tres cargos de suscribir una declaración de impuestos falsa y cuatro cargos de hacer declaraciones falsas al IRS sobre sus activos extranjeros.
Los documentos judiciales afirman que Shih defraudó a una empresa estadounidense que fabricaba chips semiconductores de banda ancha y alta potencia que tienen varias aplicaciones comerciales y militares.
Los chips semiconductores, también conocidos como MMIC, se utilizan en misiles, sistemas de guía de misiles, aviones de combate, guerra electrónica, contramedidas de guerra electrónica y aplicaciones de radar. Los exportados por Shih a China estaban destinados a AVIC 607, una entidad de propiedad estatal.
Según los documentos judiciales, Shih era presidente de CGTC, que estaba construyendo una planta de fabricación de MMIC en la ciudad. La empresa fue incluida en la lista «debido a su participación en actividades contrarias a la seguridad nacional y a los intereses de la política exterior de Estados Unidos, es decir, que había participado en la adquisición ilícita de productos y artículos para uso final militar no autorizado en China».
El caso es solo uno de los muchos ejemplos de procesamientos federales centrados en el robo de propiedad intelectual estadounidense en beneficio de China.
En abril, el exempleado de Coca-Cola You Xiaorong fue condenado por robar secretos comerciales relacionados con el recubrimiento de envases de bebidas de empresas estadounidenses. You planeó entonces utilizar la tecnología para fabricar el recubrimiento para el mercado mundial.
En junio de 2020, el profesor chino Zhang Hao fue declarado culpable de espionaje económico y de robar tecnología inalámbrica de empresas estadounidenses en beneficio del régimen chino. La tecnología en cuestión filtra las señales no deseadas en los dispositivos inalámbricos, como los teléfonos móviles y las tabletas, y tiene aplicaciones tanto de consumo como militares.
Varios legisladores del Senado y de la Cámara de Representantes de Estados Unidos volvieron a presentar en mayo un proyecto de ley, denominado Ley de Protección de Estados Unidos frente a los Espías, que denegaría los visados a los extranjeros que hayan robado propiedad intelectual estadounidense o que hayan cometido espionaje, y especialmente a los que tengan vínculos con el Partido Comunista Chino (PCCh).
«Sabemos que el Partido Comunista Chino no escatimará esfuerzos para robar y aprovecharse de las empresas y universidades estadounidenses», dijo el senador Marco Rubio (R-Fla.) en una declaración el 20 de mayo.
«Si un ciudadano chino nos ha espiado antes, debemos asumir absolutamente que lo hará de nuevo. Esta legislación impide que los reincidentes accedan a nuestro país», dijo.
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