Un investigador criminal y expreso político venezolano está alertando a las autoridades estadounidenses sobre la presencia de agentes del régimen de Nicolás Maduro en suelo americano, presuntamente realizando operaciones de espionaje.
Iván Simonovis, excomisionado especial de Seguridad e Inteligencia del gobierno interino de Venezuela, posteó este domingo en X, antes llamado Twitter: “Hemos investigado, identificado y ubicado un importante número de agentes del SEBIN y DGCIM que participaron en violaciones a los Derechos Humanos” en Venezuela, que se encuentran actualmente en Estados Unidos.
“La lista la compartimos con las agencias correspondientes, la persecución será permanente e implacable”, agregó.
En entrevista con The Epoch Times, Simonovis dijo que la lista incluye agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) del régimen de Maduro, que habrían ingresado a Estados Unidos con información falsa, haciéndose pasar por víctimas perseguidas por la dictadura.
Sin embargo, por motivos de seguridad, no reveló el número de agentes identificados ni tampoco a qué agencias entregó la información. Dice que ahora le corresponde a las autoridades estadounidenses determinar qué están haciendo estos ciudadanos venezolanos en territorio americano.
“Ellos son parte de la estructura del régimen, y ya con eso, es obvio entender que el trabajo que están haciendo es un trabajo encubierto”, dijo el investigador.
Simonovis aseguró que cuenta con una importante red de inteligencia en Venezuela que le informa sobre las decisiones del régimen, incluyendo el envío de funcionarios a otros países. Además, durante su periodo como funcionario del gobierno interino pudo crear vínculos con funcionarios estadounidenses para compartir información sobre esta y otras actividades criminales.
Qué estarían haciendo los agentes chavistas en Estados Unidos
Al preguntarle sobre los motivos del régimen para enviar agentes a territorio estadounidense, Simonovis sugirió que probablemente estarían llevando a cabo actividades de espionaje.
“Hay un programa que tiene el régimen que es para movilizar efectivos militares y civiles a varias partes de Latinoamérica para crear desestabilización social, para ir a sitios de importancia estratégica y fotografiar, ubicar embajadas, personalidades”, aseguró. Además, dijo que este programa es “dirigido desde el más alto nivel de las Fuerzas Armadas y obviamente por dirección de Nicolás Maduro”.
Explicó que una de las tareas más comunes es fotografiar sitios sensibles. Pero van más allá de eso: “Inclusive hay un programa especial que tiene el régimen, que es para identificar gente de oposición fuera de Venezuela. Los persiguen y les toman fotografía y pasan información a Caracas de quiénes son, dónde están, cuándo están sus familiares, a qué se dedican, etcétera”.
El experto aseguró que todas las dictaduras llevan a cabo actividades similares en países extranjeros para localizar a sus opositores y, si es necesario, «tomar medidas contra ellos».
En su posteo, Simonovis señaló particularmente a Maikel Nieto, un joven funcionario del DGCIM, que según la investigación, estaba en Filadelfia y se mueve a lo largo y ancho del territorio americano.
Nieto fue identificado como partícipe de la masacre de El Junquito, bajo el mando de Alexander Granko.
La masacre ocurrió en 2018 cuando Óscar Pérez, un joven policía que se había rebelado contra el régimen, se ocultó con un grupo de jóvenes aliados en un sector de Caracas, conocido como El Junquito, según Simonovis. Las comisiones del régimen —es decir, grupos de policías con más de 200 efectivos— llegaron al lugar bajo la dirección del mayor Granko, asecendido después a teniente coronel.
“Aún cuando se habían rebelado y no estaban de acuerdo con las políticas del régimen, estas personas habían empezado a sostener unas conversaciones con un fiscal del Ministerio Público”, dijo Simonovis. Los jóvenes estaban totalmente listos para entregarse, “a sabiendas que lo que le venía no era nada bueno, porque en el régimen en Venezuela no hay justicia y que ellos iban a terminar muy mal”, agregó.
Sin embargo, los agentes del régimen utilizaron “cualquier cantidad de armas contra ellos”, incluyendo un lanzacohetes. Fue así como destruyeron totalmente la casa en la que se encontraban Pérez y su equipo, junto con civiles inocentes. Luego, dispararon a quemarropa a las personas que ya habían fallecido. “Les dieron a todos tiros de gracia”, relató.
Alexander Granko es considerado como uno de los principales violadores de Derechos Humanos del régimen de Maduro y fue sancionado por Estados Unidos en 2019.
Simonovis advirtió que Granko «forma parte de una estructura de la Dirección de Inteligencia de Contrainteligencia Militar, que está encargada de perseguir, detener y torturar a personas que tienen sus diferencias con el régimen, de cualquier tipo de profesión: comerciante, periodista, policía, político, etc. Cualquiera que sea apresado por este individuo, muy posiblemente será torturado”, dijo .
Pero la dictadura venezolana no es la única que le preocupa a Estados Unidos. Simonovis dice que el país es consciente de la amenaza que representan los regímenes de China, Rusia e Irán. Todos ellos han llegado a realizar operaciones de espionaje y persecución en territorios extranjeros.
Como producto de sus investigaciones, Simonovis ha proporcionado información sobre grupos o individuos identificados como violadores de Derechos Humanos del régimen chavista a países como Colombia, Perú, Ecuador y España.
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