Las autoridades danesas afirmaron el martes que «poderosas explosiones» causaron daños en los gasoductos Nord Stream bajo el Mar Báltico.
El sistema Nord Stream, construido por Rusia, había transportado miles de millones de pies cúbicos de gas natural desde Rusia a Alemania antes de sufrir daños a finales del mes pasado. Ningún país o grupo ha reivindicado la responsabilidad del incidente, y Estados Unidos no ha emitido ninguna declaración pública sobre quién puede haber estado detrás.
En una declaración traducida, los Servicios de Inteligencia de la Policía danesa confirmaron que los «grandes daños» en los gasoductos fueron causados por «potentes explosiones». Sin embargo, la agencia policial no señaló al culpable de las explosiones.
«No es posible decir cuándo» se puede esperar que se complete una «investigación más amplia», continuaba el comunicado. «Entendemos que hay un gran interés en el caso, pero en este momento no se divulgará más información de la investigación sobre las fugas de gas».
Las autoridades suecas y danesas han investigado cuatro agujeros en los gasoductos Nord Stream 1 y 2. Las conclusiones de Dinamarca parecen ser similares a las de los fiscales suecos, que habían dicho anteriormente que dos agujeros parecían haber sido causados por explosiones.
Un video grabado por una empresa noruega de robótica y publicado por un medio de comunicación sueco mostraba una gran brecha en el gasoducto Nord Stream 1. El medio reportó que faltaban unos 50 metros, o unos 150 pies, debido a la explosión.
La culpa
Algunos funcionarios europeos han sugerido que Rusia podría haber sido la causante de las explosiones, pero esas acusaciones fueron negadas categóricamente por el Kremlin, incluido su principal portavoz, Dmitry Peskov. Días después de conocerse las explosiones, Peskov dijo a los periodistas que esas afirmaciones eran «previsiblemente estúpidas» y cuestionó por qué Rusia destruiría un sistema que había ayudado a construir y en el que había invertido considerables fondos.
También un alto funcionario estadounidense ha negado que Washington estuviera implicado en el incidente. Algunos, entre ellos un profesor de economía de la Universidad de Columbia, han especulado con que Estados Unidos tiene mucho que ganar con la interrupción de los gasoductos Nord Stream porque las naciones europeas aumentarían su dependencia del gas natural estadounidense.
Ese profesor, Jeffrey Sachs, dijo en una entrevista a principios de octubre que el presidente Joe Biden también declaró públicamente que se opondría al gasoducto Nord Stream 2 en los días previos al inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero.
«Si Rusia invade, es decir, si los tanques o las tropas vuelven a cruzar la frontera de Ucrania, ya no habrá Nord Stream 2. Le pondremos fin», dijo Biden en un evento en febrero. También dijo a un periodista que «le prometo que podremos hacerlo».
No obstante, la reducción de los flujos de gas procedentes de Rusia, que en su día abastecían el 40 por ciento de las necesidades de Europa, ha dejado a la Unión Europea con problemas por unirse sobre cómo responder al aumento de los precios que ha profundizado una crisis del coste de la vida para las familias y las empresas.
La Comisión Europea propuso el martes un paquete de medidas de emergencia para hacer frente a los elevados precios de la energía, entre ellas que los Estados de la UE empiecen a comprar gas conjuntamente. Sin embargo, evitó proponer un límite inmediato al precio del gas en medio de las divisiones que suscita la idea.
El suministro a través de Nord Stream 1 ya se había interrumpido incluso antes de que se descubrieran las fugas, debido a la disputa sobre las sanciones occidentales impuestas por la invasión rusa de Ucrania. El Nord Stream 2 no había iniciado las entregas comerciales.
Con información de Reuters.
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