El Ejército israelí aseguró este martes haber «aprobado» y «validado» los planes operativos para una ofensiva militar en el Líbano, el mismo día que aterrizó en Beirut el principal mediador de la Casa Blanca en el conflicto entre Israel y la milicia chií Hizbulá, Amos Hochstein.
«Como parte de la evaluación de la situación, se aprobaron y validaron los planes operativos para una ofensiva en el Líbano y se tomaron decisiones sobre la continuación del aumento de la preparación de las tropas en el campo», dijo hoy un comunicado castrense.
Los planes, de los que no transcendieron más detalles, fueron aprobados por el comandante en jefe del Comando Norte, Ori Gordin, y el jefe de la dirección de operaciones, Oded Basiuk, quienes según el comunicado llevaron a cabo una evaluación conjunta de la frontera norte.
El asesor estadounidense Amos Hochstein, viajó hoy a Beirut después de reunirse ayer con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, su ministro de Defensa, Yoav Gallant, y los líderes de la oposición.
Hochstein aseguró, en conferencia de prensa, que la situación «es seria», pero que el gobierno del presidente Joe Biden quiere «evitar una escalada mayor» hacia una guerra.
Desde el inicio de la guerra en Gaza, tanto Israel como Hizbulá mantienen hostilidades a diario en la frontera, que se han ido incrementando con el lanzamiento de cientos de cohetes y el asesinato selectivo, a manos de Israel, de algún alto cargo.
En estas escaramuzas diarias, Hizbulá ha perdido a al menos 315 milicianos, algunos en ataques en Siria, y también han muerto en el lado libanés 63 integrantes de otras milicias, un soldado libanés y más de 92 civiles, incluidos diez menores y tres periodistas.
En Israel han muerto 25 personas en el norte, en concreto 15 militares y 10 civiles.
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