El jefe de la policía de Ottawa dice que sus esfuerzos y los de la ciudad están detrás de la cancelación de la campaña de GoFundMe en apoyo del Convoy de la Libertad.
El jefe Peter Sloly describió en una conferencia de prensa celebrada el 7 de febrero las medidas adoptadas hasta la fecha contra los manifestantes y dijo que estas acciones eran responsables de la reducción del número de camiones y personas que participaban. Dijo que centrarse en la financiación de los manifestantes ha sido la clave.
«Lo que particularmente ha ocurrido de manera significativa, es que fuimos tras la financiación. Nuestros esfuerzos combinados con los de la ciudad eliminaron el GoFundMe», dijo Sloly. «Los manifestantes ya no pueden acceder a 10 millones».
En una conferencia de prensa el día anterior, los organizadores de la protesta dijeron que la cancelación de la recaudación de fondos fue el resultado de la interferencia política.
«Fue una clara injerencia directa del gobierno para cancelar esta campaña», dijo el organizador de la protesta, Benjamin Dichter, el 6 de febrero.
Además de la Policía de Ottawa, después de que GoFundMe retirara los fondos, el alcalde de Ottawa, Jim Watson, agradeció a la empresa «haber escuchado la petición de la ciudad y de la Policía de Ottawa de no seguir proporcionando fondos a los organizadores del convoy».
El Comité de Seguridad Pública de la Cámara de Representantes había pedido a GoFundMe que testificara sobre el origen de los fondos y que asegurara que no iba a «promover el extremismo».
Los organizadores habían declarado que los fondos se utilizarían para pagar los gastos de los camioneros, como el combustible, la comida y el alojamiento.
GoFundMe canceló la recaudación de fondos del Convoy de la Libertad el 4 de febrero, alegando que había recibido información de las fuerzas policiales de que la protesta se había convertido en una «ocupación» y violaba sus condiciones de servicio. La plataforma de recaudación de fondos dijo inicialmente que los fondos recaudados se destinarían a otras organizaciones benéficas, pero más tarde dio marcha atrás bajo presión y dijo que reembolsaría automáticamente a los donantes.
La empresa, con sede en California, ha sido acusada en el pasado de adoptar posturas políticas y tener un doble estándar al permitir campañas alineadas con su ideología mientras cancela las que se oponen.
Si bien eliminó la campaña del Convoy de la Libertad, anteriormente promovió en Twitter una campaña de una persona involucrada en la Protesta Ocupada de Capitol Hill (CHOP) en Seattle en el verano de 2020, una ocupación en la que se prohibió la entrada a la policía y que estuvo plagada de anarquía.
GoFundMe también suspendió el pasado mes de octubre la campaña de una enfermera de Texas que fue despedida por negarse a recibir la vacuna COVID-19 y que estaba recaudando fondos para iniciar una demanda, alegando «información errónea» que violaba los términos de servicio de la compañía.
Tras la cancelación por parte de GoFundMe, los organizadores del Convoy de la Libertad comenzaron a utilizar el sitio de recaudación de fondos cristiano GiveSendGo para aceptar donaciones.
Desde la puesta en marcha de la recaudación de fondos, la plataforma se ha visto desbordada por el tráfico y los ciberataques, pero en muy poco tiempo ha recaudado más de 6 millones de dólares hasta el 8 de febrero por la mañana. GiveSendGo dijo en un comunicado de prensa del 7 de febrero que esta campaña es la mayor de su historia.
«Junto con la tremenda muestra de apoyo, también ha habido muchas reacciones», dijo Jacob Wells, cofundador de GiveSendGo.
«Hemos visto casi 10 millones de bots tratando de saturar nuestros servidores en solo las últimas dos horas. Aunque esto ha causado problemas a la plataforma, no dejaremos que se interponga en el camino de proporcionar un medio seguro y eficaz de recaudación de fondos para los propietarios de nuestras campañas en todo el mundo».
Es probable que la policía de Ottawa también vaya tras esta fuente de fondos, según las declaraciones de su jefe en la rueda de prensa, pero podría resultar más difícil dada la posición de GiveSendGo de que las «libertades que tenemos son dadas por Dios, no autorizadas por los gobiernos».
«Hay otras vías de financiación que seguimos siguiendo agresivamente, a través de la inteligencia, la información, la coordinación con las instituciones financieras y los tres niveles de gobierno. Seremos implacables en la búsqueda de la financiación que ha permitido que esta manifestación continúe hasta este punto», dijo el jefe Sloly.
Mientras tanto, las acciones de GoFundMe han sido percibidas y criticadas en Estados Unidos, donde políticos y gobiernos republicanos han prometido investigar.
El senador de Texas, Ted Cruz, dijo que envió una carta al Comisionado Federal de Comercio pidiendo «abrir una investigación sobre GoFundMe para ver si han cometido prácticas comerciales engañosas», dijo a Fox News.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo en las redes sociales que trabajaría con su fiscal general, Ashley Moody, para investigar estas «prácticas engañosas», en referencia al anuncio inicial de GoFundMe de que daría las donaciones para los camioneros a organizaciones benéficas que ha validado.
GoFundMe no ha respondido a las solicitudes de comentarios.
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