WASHINGTON—A solo un día de que comience el 119.° Congreso, algunos legisladores sienten como un déjà vu la inminente lucha por la presidencia de la Cámara de Representantes.
El 3 de enero, el Congreso recién elegido se reunirá en Washington, y su primera orden del día será elegir al presidente de la Cámara.
El presidente de la Cámara, Mike Johnson (republicano), es actualmente el favorito para conservar el puesto, pero las críticas del Partido Republicano aumentan y el resultado final sigue siendo incierto. La situación recuerda a la de hace dos años, cuando se necesitaron 15 votaciones y cinco días para que el representante Kevin McCarthy (R-Calif.) fuera nombrado presidente, debido en parte a la estrecha mayoría republicana de entonces.
Después de las elecciones de 2024, los republicanos mantendrán su estrecha mayoría en la cámara baja del Congreso con 219 escaños, solo uno por encima del umbral de mayoría de 218 votos de una Cámara en pleno.
Por lo tanto, Johnson sólo puede permitirse perder a un republicano, ya que no se espera que ningún demócrata apoye su candidatura para mantener el poder.
El líder de la minoría en la Cámara, el demócrata Hakeem Jeffries, le dijo a MSNBC que «no habrá demócratas disponibles para salvarlo».
Un republicano ya se ha comprometido a oponerse a la candidatura de Johnson: El representante Thomas Massie (R-Ky.).
«Mike Johnson es el próximo Paul Ryan», escribió Massie en X el 30 de diciembre.
Ryan fue el portavoz durante los dos primeros años del presidente Donald Trump en el cargo.
Massie criticó a Ryan por lo que llamó una «falsa derogación del Obamacare», ya que el esfuerzo del Partido Republicano en 2017 para deshacer el histórico proyecto de ley de salud fracasó. También criticó el aumento del gasto y el fracaso en la financiación de un muro a lo largo de la frontera sur bajo el mandato de Ryan.
«El 3 de enero de 2025, no votaré por Mike Johnson», dijo Massie en el post de X.
«Espero que mi colega se una a mí porque la historia no le dará a Estados Unidos otra oportunidad».
Otros republicanos están indecisos.
«Sigo indeciso, al igual que varios de mis colegas, porque vimos muchos de los fracasos del año pasado que nos preocupan y que podrían limitar o inhibir nuestra capacidad para avanzar en la agenda del presidente», dijo el representante Chip Roy (R-Texas) a Fox Business el 31 de diciembre.
«Todavía no me he comprometido ni pública ni privadamente», dijo el representante Andy Biggs (R-Ariz.) a Fox News el 30 de diciembre. «Quiero hablar con el portavoz para ver cuáles son sus planes, porque hay algunas cuestiones que creo que hay que resolver, en concreto las cuestiones presupuestarias».
El representante Andy Harris (R-Md.), presidente del influyente y conservador Freedom Caucus de la Cámara de Representantes, está indeciso, dijo su portavoz, Anna Adamian, a The Epoch Times el 31 de diciembre.
El Freedom Caucus de la Cámara de Representantes se reunirá el 2 de enero para determinar cómo procederá en la carrera por la presidencia, según dijo Ralph Norman (R-S.C.) a The Epoch Times.
La postura de Harris ha cambiado. Anteriormente había dicho que pensaba apoyar a Johnson como portavoz.
«Está cumpliendo lo que dijo que iba a cumplir», declaró Harris a The Epoch Times en noviembre. «Y creo que si sigue cumpliendo, no será un problema».
Los comentarios de Harris se produjeron antes de que Johnson presentara el mes pasado un proyecto de ley, o una resolución continua (RC), para financiar el gobierno en los niveles actuales hasta el 14 de marzo.
Harris se opuso al proyecto de ley. Las críticas de los republicanos iban desde la existencia de una RC hasta la inclusión en el proyecto de legislación no relevante para la financiación del Gobierno.
Los demócratas denunciaron que Johnson renegaba de un acuerdo inicial que fue torpedeado por Trump y el empresario Elon Musk.
Trump dio su «completo y total respaldo» a Johnson como portavoz.
«El pueblo estadounidense necesita un alivio INMEDIATO de todas las políticas destructivas de la última administración. El portavoz Mike Johnson es un hombre bueno, trabajador y religioso», dijo Trump en un post en Truth Social.
Si se produjera una batalla por la presidencia, la certificación por parte del Congreso de la victoria electoral de Trump en 2024 —que tendrá lugar el 6 de enero— podría retrasarse, ya que la Cámara no puede tratar ningún asunto hasta que se elija a un presidente.
El predecesor de Johnson, McCarthy, no ganó el mazo hasta el 7 de enero de 2023, cinco días de votación después del comienzo del 118º Congreso. Esto ocurrió después de 15 rondas de votaciones y múltiples concesiones hechas por McCarthy a los conservadores de línea dura.
McCarthy fue destituido nueve meses después, convirtiéndose en el primer presidente de la Cámara despojado del mazo.
La destitución dio lugar a una batalla de tres semanas para elegir al sustituto de McCarthy, en la que Johnson, que entonces era vicepresidente del Partido Republicano en la Cámara de Representantes, fue ascendido al cargo de segundo en la línea de sucesión a la presidencia.
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