El candidato republicano a la presidencia de la Cámara de Representantes, el representante Jim Jordan (R-Ohio), intentó relanzar su tambaleante campaña con una rueda de prensa destinada a unificar el fracturado congreso del Partido Republicano.
En un tono optimista y enérgico, Jordan hizo un llamado a sus colegas republicanos para que actúen con rapidez en la elección de un presidente, lo que permitiría a la Cámara reabrir sus puertas y ocuparse de los problemas críticos a los que se enfrenta el país.
«Nosotros tenemos que ponernos a trabajar para el pueblo estadounidense», dijo el Sr. Jordan a los periodistas a las 8 de la mañana del 20 de octubre. «Tenemos que hacer lo que les dijimos que íbamos a hacer cuando nos eligieron y nos pusieron en el cargo, y, francamente, no podemos hacerlo si la Cámara de Representantes no está abierta, y no podemos abrirla hasta que tengamos un presidente».
Entre los asuntos pendientes en el Congreso figuran determinar el apoyo a Israel y Ucrania, completar el proceso de asignaciones y reanudar la labor de supervisión del Congreso, dijo el Sr. Jordan.
Contienda en polémica
El Sr. Jordan ha tenido dificultades para conseguir el respaldo de 22 republicanos que se han negado a respaldar su candidatura.
Algunos parecen resistirse a la elección del Sr. Jordan, a quien perciben como una figura polarizadora. Otros están enfadados por el trato recibido por el líder de la mayoría Steve Scalise (R-La.), el anterior candidato republicano, cuya candidatura fue bloqueada por un puñado de partidarios de Jordan.
Tras fracasar en su intento de hacerse con el mazo en dos votaciones en varios días, el Sr. Jordan y otros representantes intentaron convencer a sus compañeros republicanos de que autorizaran temporalmente al presidente Pro Tempore Patrick McHenry (R-N.C.) a dirigir los asuntos de la Cámara.
El representante Jordan declaró que era una oportunidad para «bajar la temperatura» en torno a la contienda por la presidencia y permitir la reapertura de la Cámara.
Aunque muchos miembros apoyaron la medida, otros se opusieron rotundamente durante una tensa reunión del congreso republicano el 19 de octubre. No se adoptó ninguna medida, lo que acabó con la propuesta.
Posteriormente, el representante Jordan afirmó que seguía en la contienda y que seguía teniendo la intención de ganar. También señaló que seguiría intentando dialogar con los miembros resistentes.
Los aliados de del representante siguen prometiéndole su apoyo.
«Estoy con Jim Jordan hasta que Jim Jordan diga que no quiere seguir adelante», declaró a la prensa el representante Byron Donalds (R-Fla.) el 19 de octubre.
A la pregunta de cómo procedería tras una tercera votación, Jordan respondió: «El plan de este fin de semana es elegir a un presidente de la Cámara de Representantes lo antes posible para que podamos ayudar al pueblo estadounidense”.
Tensiones, resistencias
Las tensiones dentro del congreso republicano son altas después de dos semanas tumultuosas, durante las cuales algunos miembros derrocaron a su presidente electo, el representante Kevin McCarthy (R-Calif.), y otro pequeño grupo bloqueó la nominación del líder de la mayoría Steve Scalise (R-La .) al anunciar que no votarían por él en la Cámara.
Si bien 200 de 221 republicanos votaron para elegir al representante Jordan en la primera votación, ese apoyo se erosionó ligeramente en la segunda votación, en parte debido al enojo por las tácticas de presión empleadas por algunos partidarios de Jordan. Los miembros de la resistencia informaron haber recibido un gran volumen de “llamadas de odio” e incluso “amenazas de muerte creíbles”.
Ningún miembro dijo que Jordan estuvo personalmente involucrado en ese esfuerzo, y él denunció tales tácticas en las redes sociales. Aun así, los esfuerzos fueron percibidos como intimidación, lo que endureció la oposición entre algunos miembros.
La elección del Sr. McCarthy como presidente de la Cámara en enero, requirió 15 votaciones en cuatro días. El representante Jordan se negó a especular sobre el tiempo que permitiría que se desarrollaran las elecciones y restó importancia a las pérdidas sufridas en la segunda vuelta.
“Entre la primera y la segunda votación, todos ustedes dijeron que íbamos a perder entre 10 y 15 votos. Esto se mantuvo igual. Nosotros recogimos algunos y perdimos algunos”, dijo el Sr. Jordan.
En la segunda votación, algunos votos se dirigieron a favor del Sr. Jordan y otros en su contra, lo que resultó en una pérdida neta de un voto. El representante recibió 199 votos en la segunda votación. Él necesita 217 para las elecciones.
“Yo creo que los que perdimos pueden volver”, añadió el candidato. «Ha habido múltiples rondas de votación para elegir al presidente antes (…) Solo sé que necesitamos conseguir al presidente lo antes posible para que podamos ponernos a trabajar para los estadounidenses».
Problema del GOP, Solución del GOP
El líder de la minoría, Hakeem Jeffries (D-N.Y.), dijo que está dispuesto a formar una coalición con los republicanos que podría resultar en la elección de un republicano moderado como presidente con cierto poder ampliado para los demócratas. Eso podría incluir puestos adicionales en el poderoso Comité de Reglas.
Hasta el momento, los republicanos no han estado dispuestos a considerar eso. Enojados porque solo ocho de ellos pudieron derrocar a McCarthy, contando con 208 votos demócratas, los miembros del Partido Republicano parecen tener la intención de resolver la cuestión de la presidencia por sí solos.
Varios miembros han manifestado su voluntad de continuar trabajando durante el fin de semana (o más allá) si es necesario para completar la elección de un presidente.
“Creo que tenemos que quedarnos. Si es necesario quedarse el fin de semana o hasta el Día de Acción de Gracias, vamos. Luchemos”, dijo el representante Tim Burchett (R-Tenn).
Se espera una tercera votación horas más tarde, el 20 de octubre.
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