Un juez federal dictaminó que la ley de Carolina del Norte que prohíbe los abortos después de las 20 semanas de gestación está nuevamente vigente, salvo en caso de emergencia médica.
La decisión del 17 de agosto del juez de distrito, William Osteen, elimina una orden judicial que él mismo había emitido en 2019 en contra de la prohibición del aborto a partir de las 20 semanas. Según el juez, la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos emitida el 24 de junio en el caso Dobbs vs. Jackson Women’s Health, en que se anuló el precedente de Roe vs. Wade, eliminó la base legal para su decisión de 2019.
«Ni este tribunal, ni el público, ni los abogados, ni los proveedores tienen derecho a ignorar el estado de derecho determinado por la Corte Suprema», escribió el juez Osteen, una persona designada por el presidente republicano George W. Bush.
Osteen, del Distrito Medio de Carolina del Norte, había declarado en 2019 que la prohibición del aborto a partir de las 20 semanas en Carolina del Norte era inconstitucional y no podía ser aplicada ya que violaría la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos dada en el caso Roe vs. Wade de 1973.
Prohibición del aborto de 20 semanas
La prohibición del aborto de 20 semanas en Carolina del Norte estuvo en vigor desde 1973 hasta la orden judicial de Osteen de 2019, que se dictó por una demanda federal presentada en 2016 en nombre de los proveedores de aborto del estado, en el caso denominado Bryant vs. Woodall. En el año 2021, la Corte de Apelaciones del Cuarto Circuito confirmó la decisión de Osteen.
El caso Roe vs. Wade había prohibido a los estados vetar los abortos antes de que el feto se considere «viable» —o potencialmente capaz de vivir fuera del vientre de su madre—, lo que se considera alrededor del segundo trimestre de embarazo, a las 24 semanas.
El 8 de julio, Osteen emitió una orden en el caso Bryant vs. Woodall en la que pedía a todas las partes de la demanda que presentaran informes en un plazo de 30 días con sus posiciones sobre si debía levantar la medida cautelar. En la orden escribió que, dada la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos del 24 de junio, «parece que la medida cautelar concedida en este caso puede ser ahora contraria a la ley».
Los líderes de la Asamblea General Republicana de Carolina del Norte pidieron a Ostee a través de un escrito amicus curiae que retire su medida cautelar de 2019. «Los estatutos de aborto de Carolina del Norte son innegablemente legales bajo Dobbs y ya no hay ninguna base para una medida cautelar que impida al estado perseguir sus intereses legítimos», escribieron el líder del Senado de Carolina del Norte, Phil Berger, y el presidente de la Cámara, Tim Moore, en el escrito presentado el 27 de julio.
Su escrito se presentó después de que el fiscal general de Carolina del Norte, el demócrata Josh Stein, cuya oficina representa a los demandados en el caso Bryant vs. Woodall, rechazara el 1 de julio, y más tarde el 21 de julio, la petición de Berger y Moore de la ejecución de la prohibición del aborto de 20 semanas, incluyendo que él mismo llevara la prohibición ante el juez.
Moore dijo previamente que cualquier legislación que restrinja el aborto sería muy probablemente vetada por el gobernador Roy Cooper, un demócrata que cree que el aborto es un derecho. Los republicanos necesitan ganar al menos cinco escaños más en noviembre para obtener una supermayoría a prueba de algún veto en la legislatura de Carolina del Norte.
Confusión pública
La oficina de Stein argumentó en un escrito presentado a última hora del 8 de agosto que el restablecimiento de la prohibición del aborto en Carolina del Norte crearía un «riesgo significativo de confusión pública» sobre la disponibilidad y legalidad de los servicios de aborto en el estado. Los abogados de la oficina de Stein presentaron el informe sin su participación. El 10 de agosto, Stein dijo que «haría todo» lo que estuviera en su mano como fiscal general para proteger lo que caracterizó como «el derecho de las mujeres a la atención reproductiva».
«Me alienta que, aunque nuestro fiscal general no haya cumplido con su deber, hoy tengamos un fallo que defiende la ley», dijo Moore en una declaración tras la decisión del juez Osteen de restablecer la prohibición del aborto.
«Aunque no estoy de acuerdo con este fallo, la gran mayoría de los pacientes seguirán pudiendo acceder a la atención de la salud reproductiva en Carolina del Norte y sigo comprometido a protegerla», dijo el gobernador Cooper en una declaración en respuesta a la decisión.
Los republicanos dijeron que poco cambiará con el restablecimiento de la prohibición del aborto de 20 semanas. En 2019, menos del uno por ciento de los abortos en el país se realizaron después de las 20 semanas de gestación, lo que estaría en consonancia con los datos de años anteriores, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El gobernador Cooper firmó previamente una orden ejecutiva el 6 de julio para proteger a las personas acusadas penalmente de realizar un aborto de ser extraditadas a otros estados y para prohibir que las agencias estatales de Carolina del Norte ayuden en los juicios de otros estados contra las personas que viajan para el procedimiento.
Los estados vecinos de Carolina del Norte, como Carolina del Sur, Georgia y Tennessee, tienen leyes que restringen los abortos después de unas seis semanas de gestación, los que entraron en vigor tras la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos del 24 de junio que anuló Roe. Las leyes se están encontrando con varios desafíos legales. El 17 de agosto, la Corte Suprema de Carolina del Sur bloqueó temporalmente su prohibición del aborto a las 6 semanas mientras continúa el litigio.
Con información de The Associated Press.
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