Un funcionario de la Junta Electoral de Chicago dijo el domingo que había omitido «por error» más de 9000 boletas de voto por correo de una de las contiendas de las elecciones primarias estatales de Illinois de la semana pasada, lo que desató un renovado escrutinio en torno al voto por correo de cara a las elecciones presidenciales de noviembre.
«Al sumar el número total de boletas de voto por correo que la Junta había recibido hasta el momento, omití por error boletas adicionales» que llegaron por correo la noche del 18 de marzo, un día antes de la jornada electoral, según una declaración de 23 de marzo de Max Bever, Director de Información Pública de la Junta Electoral de Chicago.
La contienda en la que se produjo el aparente error de tabulación es entre dos candidatos demócratas a fiscal del estado en el condado de Cook de Chicago, Eileen O’Neill Burke y Clayton Harris III.
La Sra. O’Neill Burke, exjuez de apelación que va a la zaga por unos 14,000 votos, es ampliamente vista como la candidata más dura contra el crimen de los dos.
«Deberíamos estar en auge y no lo estamos por culpa de la delincuencia», declaró O’Neill Burke a The Associated Press. «Esto es algo que podemos arreglar».
Harris, un profesor y exfiscal que es el candidato más progresista de los dos, ha dicho que los castigos deberían tener en cuenta las disparidades raciales.
La carrera de Chicago está abierta porque el actual Fiscal del Estado Kim Foxx, que se enfrentó a las críticas por ser suave en la delincuencia, se negó a postularse por tercera vez.
Cambié velocidad por precisión
Uno de los temas de campaña en la carrera por la fiscalía del condado de Cook ha sido el futuro de la controvertida política de Foxx de no perseguir como delito grave el hurto en comercios si el valor de los bienes robados es inferior a USD 1000.
O’Neill Burke ha criticado esta política.
«No disuade de la delincuencia, sino que la fomenta», afirmó.
Por el contrario, Harris se ha comprometido a mantenerla en su lugar, si es elegido.
«Si alguien viniera y se llevara mi móvil, ¿merecería ese móvil un delito grave en tu expediente? No lo creo», declaró a AP. «Nos fijamos en la reincidencia. Acusamos a todo el mundo como corresponde».
La fiscalía del condado de Cook es la segunda más grande del país, después de la de Los Ángeles.
Bever dijo en una actualización del 24 de marzo que los abogados de ambos candidatos se reunieron ese mismo día y acordaron que el recuento de votos y la verificación de las firmas de las papeletas continuarían hasta el domingo, con la presencia de observadores electorales.
Dijo que los jueces electorales procesarían y contarían aproximadamente 13,086 boletas de voto por correo que ya habían sido revisadas en cuanto a puntualidad, verificación de firmas e historial de votantes, y que la gran mayoría de éstas se habían recibido en el buzón el día de las elecciones (19 de marzo).
Alrededor de 9000 de estas boletas no se habían contabilizado en el recuento inicial, y Bever proporcionó información actualizada sobre el destino de las boletas que faltaban inicialmente.
«Cometí un error al informar del número de papeletas de voto por correo recibidas el lunes 18 de marzo antes del día de las elecciones que deberían haber sido incluidas en las cifras de ‘recibidas el día de las elecciones'», dijo Bever en la actualización del 24 de marzo.
Aproximadamente 9,143 boletas adicionales de Voto por Correo recibidas el lunes deberían haber sido incluidas en este número de ‘recibidas para el día de las elecciones’ que serían procesadas y contadas después del día de las elecciones, el 19 de marzo», continuó.
El funcionario electoral dijo que las papeletas que faltaban se habían guardado en una urna de recepción hasta que pudieran ser procesadas por máquinas de escaneado para verificar las firmas y descartar un posible doble voto.
Añadió que las papeletas que faltaban fueron inspeccionadas, procesadas y contadas por los jueces electorales entre el 22 y el 23 de marzo, y ya se reflejan en los resultados no oficiales.
Los resultados preliminares, a las 18.00 horas del 24 de marzo, muestran a Harris en cabeza con 164,371 votos (52.14 por ciento) y a O’Neill Burke por detrás con 150,900 votos (47.86 por ciento).
El recuento final podría variar, ya que el periodo de recuento se prolonga hasta el 2 de abril y los resultados oficiales se anunciarán el 9 de abril.
Suena sospechoso
El incidente suscitó escrutinio y críticas en las redes sociales, donde la cuenta End Wokeness compartió un informe al respecto en el que se señalaba que muchas de las boletas procedían de dropboxes, donde no es obligatorio el matasellos.
«Suena sospechoso», respondió el CEO de Tesla, Elon Musk, al post.
Las elecciones por correo en dropbox son una broma», publicó la cuenta KanekoaTheGreat, que tiene más de 750,000 seguidores.
«Chicago sigue teniendo más problemas. No hay forma de confiar en los resultados de las elecciones cuando las boletas son ‘encontradas’ más tarde», dijo Paul Szypula, personalidad de Internet y excandidato al Senado de EE.UU., en un posteo en X.
«Los buzones también son poco fiables e invitan a cometer trampas y errores. Las elecciones dirigidas por demócratas están plagadas de fraudes y cada vez vemos más», añadió.
El voto por correo ha sido objeto de un mayor escrutinio y críticas tras las elecciones presidenciales de 2020, que según el expresidente Donald Trump se vieron empañadas por irregularidades y fraudes que, según él, le costaron la victoria.
Un estudio reciente que explora el probable impacto que los votos por correo fraudulentos tuvieron en las elecciones de 2020 encontró que el resultado «casi con seguridad» habría sido diferente sin la expansión masiva de los votos por correo.
El estudio se basó en datos obtenidos de una encuesta de Heartland/Rasmussen realizada en diciembre de 2023, que reveló que aproximadamente uno de cada cinco votantes por correo, o el 20 por ciento, admitió haber realizado acciones que podrían ser potencialmente fraudulentas en las elecciones presidenciales.
Después de que los investigadores realizaran análisis adicionales de los datos brutos, llegaron a la conclusión de que había un porcentaje mayor de votos por correo fraudulentos. Ahora creen que el 28.2 por ciento de las personas que votaron por correo en 2020 cometieron al menos un tipo de comportamiento que es, «en la mayoría de las circunstancias, ilegal», por lo que potencialmente equivale a fraude electoral.
Un editor de investigación y becario de investigación del Instituto Heartland que participó en el estudio explicó a The Epoch Times que hay estrechas excepciones en las que un comportamiento encuestado puede ser legal, como llenar una boleta por correo en nombre de otro elector si esa persona es ciega, analfabeta o discapacitada, y necesita ayuda.
Sin embargo, el investigador Jack McPherrin dijo que esos casos estaban dentro del margen de error y no eran estadísticamente significativos.
El nuevo estudio concluyó que, de no haber sido por la enorme expansión del voto por correo durante la pandemia, lo más probable es que el expresidente Trump hubiera ganado.
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