El jefe de gabinete del secretario de defensa interino presentó recientemente una demanda de 50 millones de dólares contra CNN, argumentando que la empresa de medios lo difamó.
Kash Patel, exasistente del presidente Donald Trump, se convirtió en jefe de gabinete del secretario de Defensa interino, Christopher Miller, cuando Miller asumió el cargo tras la renuncia del secretario de Defensa, Mark Esper.
Redactores de CNN afirmaron en sus artículos que Patel «está vinculado con las teorías de conspiración sobre Biden» y que «también ha trabajado para desacreditar la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la interferencia rusa en las elecciones presidenciales 2016».
Patel en algún momento trabajó para el representante Devin Nunes (R-Calif.), ayudando a descubrir evidencia de que la investigación de los funcionarios de inteligencia de la campaña de Trump estuvo infestada de errores y malversación y que el expediente lascivo en el centro de la investigación compilada por un exespía británico fue pagado por la campaña de Hillary Clinton y el Comité Nacional Demócrata.
«La publicación de las Declaraciones Difamatorias es parte de un patrón general de represalias y discriminación contra Kash y una conspiración más grande emprendida entre 2018 y el presente para desacreditar a Kash mediante la publicación de declaraciones falsas y la promoción de narrativas políticas de izquierda infundadas», afirmó la demanda, que fue presentada en una corte de circuito de Virginia y obtenida por The Epoch Times.
La demanda acusa a los demandados de fabricar declaraciones difamatorias y que, por supuesto, sabían que eran falsas.
«Sabían que Kash no era la fuente de una sola teoría de conspiración y no tenía conexión con ninguna teoría de conspiración sobre Biden», afirma. «De hecho, los acusados no proporcionan evidencia o ejemplo de ningúna narrativa difundida por Kash sobre Biden porque no hay ninguna».
CNN no respondió a una solicitud de comentarios.
Patel demandó previamente a Politico, acusándolo de publicar intencionalmente declaraciones falsas sobre él para socavar su credibilidad y capacidad para servir a su país en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
Brad Dayspring, vicepresidente de comunicaciones y marketing de Politico, dijo en una declaración en ese momento: “Esta demanda tiene mucha retórica y poco mérito. No es serio y es una táctica de relaciones públicas diseñada para intimidar a los periodistas y a las organizaciones de medios para que no hagan su trabajo”.
Con información de Matthew Vadum.
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