Las Grandes Ligas llevan 154 años de existencia, y durante aproximadamente 140 de esos años, el bateador inicial se definía como alguien con gran habilidad de contacto para llegar a base y con la velocidad para robar bases. Sin embargo, en los últimos años, surgió un nuevo tipo de bateador inicial. Tener buenas habilidades para llegar a base siguen siendo primordiales para los nuevos jugadores en la posición de bateador inicial, pero el elemento de potencia es algo que se agregó recientemente a la posición y Kyle Schwarber es un ejemplo perfecto del bateador inicial moderno.
El bateador acumuló solo 27 bases robadas a lo largo de su década en las Grandes Ligas, pero también contó con la paciencia para recibir bases por bolas y llegar a base, así como con la capacidad de batear jonrones. Hizo justamente eso en la victoria de los Philadelphia Phillies por 4-2 sobre los Toronto Blue Jays el miércoles, cuando Schwarber abrió el juego con un jonrón de 416 pies. Fue su jonrón número 32 de la temporada, el que lidera al equipo, pero, más notablemente, fue su decimotercer jonrón de primer bate en la temporada. Esto hizo historia, ya que iguala el récord de Alfonso Soriano (2003) por la mayor cantidad de jonrones de primer bate en una sola temporada.
También fue el jonrón número 44 de su carrera como primer bate, lo que lo coloca empatado en el noveno lugar en la historia de la MLB. Necesita tres más para superar al exjugador de los Phillies, Jimmy Rollins, quien ocupa el octavo lugar con 46 jonrones desde la posición de bateador inicial durante sus 15 años en Philadelphia. El récord de jonrones de bateador inicial en la carrera es de 81, establecido por Rickey Henderson, quien fue el bateador inicial prototipo durante la mayor parte de la historia de la MLB. George Springer (60) tiene la mayor cantidad entre los jugadores activos y ocupa el segundo lugar histórico detrás de Henderson.
El ascenso de Schwarber en el ranking de jonrones de bateador inicial es notable considerando que no fue un bateador inicial de tiempo completo hasta hace poco. A lo largo de la mayor parte de su carrera, incursionó en la posición de bateador inicial durante partes de las temporadas, pero fue principalmente un bateador mediocampista. No fue hasta que se unió a los Phillies como agente libre en 2022 que se convirtió en un bateador inicial de tiempo completo y no volvió a mirar hacia atrás. Sus dos temporadas con más jonrones fueron durante los últimos dos años, con 46 en 2022 y 47 en 2023.
Sus estadísticas esta temporada también indican que prospera en este rol de ser el primer jugador de los Phillies en entrar al cajón de bateo en cada juego. Tiene un promedio de .287/.394/.657, con un OPS de 1.051 cuando abre un juego, en comparación con un promedio de .237/.365/.433 con un OPS de .798 en otras situaciones. Para referencia, un OPS de 1.051 en la temporada lo colocaría en el segundo lugar en toda la MLB, solo detrás de Aaron Judge (1.163). Mientras tanto, un OPS de .798 en toda la temporada ocuparía el puesto 37 en la MLB.
El jonrón del miércoles fue una de las tres veces que Schwarber llegó a base durante la jornada, ya que también conectó un sencillo por el infield y recibió una base por bolas.
El bate encendido fue una continuación del martes, cuando el bateador conectó tres jonrones como parte de un juego de cinco hits. El primero de esos tres jonrones fue otro bombazo para abrir el juego, que fue su 12º de la temporada, y esta reciente racha positiva ahora lo tiene tercero en la Liga Nacional en materia de jonrones esta temporada después de terminar segundo en 2023 y liderar el Circuito Senior en jonrones el año anterior.
Ahora, con jonrones en dos juegos consecutivos, Schwarber tiene otro récord a la vista, pero solo está a medio camino de igualarlo. El récord de la MLB de más juegos consecutivos con un jonrón en la apertura es de cuatro, establecido por Brady Anderson de los Orioles de Baltimore en 1996. Casualmente, es Anderson a quien Schwarber empató con su 44º jonrón en la apertura de su carrera, ya que los dos comparten la mejor novena marca de todos los tiempos.
Con la victoria, Filadelfia ganó cuatro juegos seguidos y ocho de sus últimos 10 partidos. Eso creó una ventaja de 7.5 juegos entre ellos y los Bravos de Atlanta en la División Este de la Liga Nacional, y las 83 victorias de los Filis en la temporada son la segunda mayor cantidad en todo el béisbol, detrás de las 84 de los Dodgers de Los Ángeles.
Sin embargo, no todas fueron buenas noticias para Filadelfia, a pesar de la victoria del miércoles, ya que la estrella Bryce Harper salió del juego después de ser golpeado por una bola rápida a 92 mph en la primera entrada. Harper logró permanecer en el juego durante un par de entradas después de recibir un golpe en el codo izquierdo, pero luego fue reemplazado en la tercera entrada (tercer inning) por Edmundo Sosa.
Fue una cirugía en el codo derecho después de la temporada 2022 lo que llevó a Harper a ocupar la posición de bateador designado que ocupa actualmente Schwarber. Una vez que se recuperó, Harper renunció a su guante de jardinero (atrapar los golpes elevados para hacer outs) por un guante de primera base (con mayor alcance en la recepción) y no miró atrás. Eso también abrió la posición de bateador designado para Schwarber, quien ocupará la posición a tiempo completo este año por primera vez en su carrera, y lo llevará a una de sus mejores temporadas. Por lo tanto, si Harper tiene que volver a ser bateador designado por un tiempo, podría crear un efecto dominó también con Schwarber, posiblemente obligándolo a jugar en los jardines, pero es poco probable que lo mueva del puesto de bateador inicial.
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