El 19 de julio, los legisladores de la Cámara de Representantes votaron a favor de aprobar un proyecto de ley que prohíbe utilizar las instalaciones de las escuelas públicas K-12 para proporcionar refugio a los inmigrantes que entraron ilegalmente en Estados Unidos.
La H.R. 3941, también conocida como «Ley de Escuelas No Refugios», fue presentada a principios de este mes por el representante Marc Molinaro (R-N.Y.) en un intento de impedir que la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, alojara a inmigrantes en residencias universitarias de SUNY o en escuelas K-12 del norte del estado de Nueva York.
El proyecto de ley fue aprobado el miércoles en la cámara baja por 222 votos a favor y 201 en contra, y cuatro demócratas se unieron a todos los republicanos para votar a favor de la legislación.
Según la legislación, está estrictamente prohibido utilizar las instalaciones de una escuela primaria pública, una escuela secundaria pública o una institución de enseñanza superior para dar refugio a extranjeros que no hayan sido admitidos en Estados Unidos, y para otros fines.
Las escuelas o instituciones de enseñanza superior que incumplan el proyecto de ley y proporcionen refugio a inmigrantes ilegales no admitidos en Estados Unidos corren el riesgo de perder la financiación federal.
Sin embargo, el proyecto de ley incluye una exención para el alojamiento a corto plazo que sea necesario debido a una «catástrofe específica», como incendios forestales, inundaciones, huracanes, tornados y otras catástrofes naturales, como sequías, para las que el gobierno federal o un estado emitan una declaración de catástrofe.
La ley se aplica también a las escuelas del Distrito de Columbia, Puerto Rico, las Islas Vírgenes, Guam, Samoa Americana y la Mancomunidad de las Islas Marianas del Norte.
En una declaración posterior a la aprobación de la ley, el Sr. Molinaro, autor de la misma, dijo que los padres de todo Nueva York han planteado repetidamente su preocupación por el uso de los gimnasios de las escuelas públicas como refugios en medio de la afluencia de inmigrantes ilegales.
Los residentes de NY y los inmigrantes «merecen algo mucho mejor»
Más de 90,000 inmigrantes ilegales han llegado a la ciudad de Nueva York desde la primavera de 2022 —la mayoría procedentes de la frontera sur de Estados Unidos— desbordando el sistema de albergues para personas sin hogar de la ciudad.
El año pasado, las autoridades municipales dijeron que habían empezado a utilizar hoteles de emergencia para atender lo que consideraban «niveles sin precedentes» de extranjeros ilegales que entraban en la ciudad.
En medio de la crisis actual, algunos estados, como el condado de Broome, que tiene una cantidad extremadamente limitada de viviendas, han declarado el estado de emergencia por el posible traslado de los inmigrantes de la ciudad de Nueva York al condado.
«Como padre de cuatro hijos, estoy de acuerdo y comparto las preocupaciones de madres y padres que se han manifestado en contra de alojar a los inmigrantes en las escuelas», declaró el representante Molinaro tras la votación. «Mi proyecto de ley bipartidista afirma dos cosas: En primer lugar, las escuelas son lugares académicos, deportivos, de servicios comunitarios y donde los niños como los míos reciben una terapia vital. No son refugios para inmigrantes. En segundo lugar, deberíamos abordar la crisis migratoria de forma compasiva».
«No hay nada de compasivo en trasladar a los inmigrantes en autobús desde la frontera sur, a la ciudad de Nueva York y luego al norte del estado de Nueva York. Todo para que vivan en una zona con la que no están familiarizados y en escuelas que están mal equipadas para servir de refugio a los migrantes», continuó el legislador. «Nuestros hijos, los residentes del norte del estado de Nueva York y los inmigrantes que buscan una vida mejor merecen algo mucho mejor».
Biden condena el proyecto de ley
Otros legisladores republicanos neoyorquinos, entre ellos la representante Nicole Malliotakis, coautora del proyecto de ley, dijeron que la legislación era necesaria en parte debido a las políticas fronterizas del presidente Joe Biden y a la interpretación incorrecta de la ley sobre el «Derecho a Refugio» del alcalde de Nueva York, Eric Adams.
«El problema es que, si echas un vistazo a la ciudad de Nueva York en este momento, verás que hay más inmigrantes ilegales alojados en nuestros centros de acogida que ciudadanos estadounidenses», dijo en la Cámara de Representantes la Sra. Malliotakis, ella misma hija de inmigrantes.
«Camina por la calle y verás a neoyorquinos sin hogar, personas con problemas de drogadicción, personas con problemas de salud mental, tirados en las calles de nuestra ciudad, mientras el alcalde se ha puesto manos a la obra y ha hecho todo lo posible para alojar a ciudadanos de otros países que han optado por no seguir las normas, que han optado por no seguir el proceso adecuado», dijo la legisladora.
Sin embargo, la Casa Blanca dijo en otra declaración que se opone firmemente al proyecto de ley y sugirió que el Sr. Biden lo vetará, añadiendo que la legislación «suplantaría el control local, interfiriendo en la capacidad de los Estados y municipios para gobernar eficazmente y tomar decisiones sobre sus edificios escolares».
«El proyecto de ley lo haría prohibiendo a ciertas instituciones educativas que reciben financiación federal —incluidos los fondos que refuerzan la igualdad de acceso a la educación, ayudan a los estudiantes de familias con bajos ingresos, mejoran las oportunidades educativas de los discapacitados y facilitan el acceso a la universidad— utilizar sus instalaciones para albergar a no ciudadanos que buscan asilo en Estados Unidos, como les permite la ley», afirma la Casa Blanca.
Tampoco está claro si la ley se aprobará en el Senado, donde los demócratas tienen una escasa mayoría.
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