La Corte Penal Internacional (CPI) “no tiene jurisdicción” sobre la guerra entre Israel y Hamás, dijo un portavoz de la Casa Blanca el 29 de abril. El pronunciamiento se dio después que altos funcionarios israelíes dijeran que les preocupaba la posibilidad de ser arrestados en el extranjero por cargos relacionados con la actual acción militar de Israel en Gaza en respuesta a una masacre de Hamás.
La organización creada para investigar, acusar y juzgar a individuos, en lugar de Estados, acusados de crímenes de guerra, genocidio y crímenes contra la humanidad tiene investigaciones en curso tanto sobre el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre de 2023, como sobre la respuesta militar de Israel al grupo terrorista en Gaza, una zona gobernada por Hamás.
A los funcionarios israelíes les preocupa que se puedan emitir órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y otros altos funcionarios gubernamentales y militares por violaciones al derecho internacional humanitario en Gaza, según los medios israelíes. También se están considerando órdenes de arresto para líderes de Hamás.
Netanyahu dijo el 26 de abril que las acciones de Israel no se verían afectadas por una decisión de la CPI en La Haya, pero cualquier decisión sentaría un precedente peligroso.
El ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, advirtió a las embajadas israelíes el 28 de abril que aumentaran la seguridad debido al riesgo de una “ola de antisemitismo severo” como resultado de las posibles órdenes judiciales.
«Esperamos que la Corte (CPI) se abstenga de emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios políticos y de seguridad israelíes», dijo Katz. «No agacharemos la cabeza ni nos dejaremos disuadir y seguiremos luchando».
La Casa Blanca, al día siguiente, respaldó a su aliado, como afirmó un portavoz: “La CPI no tiene jurisdicción en esta situación y no apoyamos su investigación”.
Las amenazas de órdenes de arresto de la CPI se producen unos meses después de que el Estado de Israel enfrentara cargos de genocidio procedentes de Sudáfrica en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de las Naciones Unidas, una corte que supervisa las disputas entre Estados.
“Si hubo actos de genocidio, fueron perpetrados contra Israel”, le dijo al tribunal el asesor jurídico del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, Tal Becker, el 12 de enero. “Hamás busca ejecutar un genocidio en Israel”.
La CPI fue creada hace más de 20 años. Si bien Estados Unidos e Israel firmaron el documento fundacional de la corte, el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, en 2000, ninguna nación participa activamente en él.
Sin embargo, los territorios palestinos obtuvieron el estatus de miembros de la CPI en 2015, y en octubre pasado, el fiscal jefe de la CPI, Karim Khan, declaró que su tribunal sí tenía jurisdicción sobre posibles crímenes de guerra cometidos tanto por Hamás en Israel como por Israel en Gaza.
«La CPI es una organización independiente y sus esfuerzos se llevan a cabo sin ningún contacto o interferencia por parte de Estados Unidos», le dijo el lunes a la prensa la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
La CPI también emitió recientemente órdenes de arresto contra funcionarios rusos por acciones en su guerra contra Ucrania, incluido el presidente ruso Vladimir Putin. Sin embargo, Rusia no reconoce la CPI y el Kremlin ha negado todas las acusaciones formuladas.
Katabella Roberts contribuyó a este artículo.
Con información de Reuters.
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