La Casa Blanca declinó el 30 de noviembre responder si el presidente Joe Biden visitaría la frontera tras el aumento de la inmigración ilegal.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, no quiso decir si el presidente aceptó ir cuando se le preguntó sobre la invitación del líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), para que Biden vaya a la frontera entre Estados Unidos y México.
«Mire, él ha estado allí. Él ha estado en la frontera», dijo Jean-Pierre.
Los críticos tacharon la declaración como falsa ya que Biden nunca ha viajado a la frontera.
«El presidente Biden no ha estado en la frontera», escribió en Twitter el representante Dan Crenshaw (R-Texas).
«Categóricamente falso. Él nunca se ha detenido en la frontera sur en toda su carrera», añadió el representante Andy Biggs (R-Ariz.).
Jean-Pierre no dijo a qué se refería, pero la entonces secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, afirmó en 2021 que contaba el hecho de que Biden condujera cerca de allí en 2008.
«Él condujo a través de la frontera cuando estaba en campaña en 2008 y ciertamente está familiarizado con el hecho, y se le quedó grabado el hecho de que en El Paso la frontera pasa justo por el centro de la ciudad», dijo Psaki en ese momento.
El viaje de 2008 llevó a Biden a la frontera durante solo unos minutos, según David Wade, quien trabajaba para Biden en ese momento.
Psaki respondió después de que Biden hablara en un foro ciudadano de CNN, cuando le preguntaron por qué no iba a la frontera si «ya había estado allí antes».
«Yo quiero decir, la conozco bien», dijo Biden entonces. «Supongo que debería ir, pero la cuestión es que no he tenido mucho tiempo para bajar [allí]. He estado pasando el tiempo viendo los USD 900,000 millones de daños causados por huracanes e inundaciones y el clima, y viajando por todo el mundo».
Confrontada sobre si las cosas habían cambiado entre 2008 y 2021, Psaki dijo que «no».
Aumento de la inmigración ilegal
Biden rápidamente alteró o puso fin a las políticas de inmigración clave de la era de Trump, incluida la construcción del muro fronterizo y los poderes del Título 42 ante la pandemia. Los funcionarios también redujeron drásticamente las deportaciones.
Desde que Biden asumió el cargo, la inmigración ilegal se ha disparado a niveles récord. El número de aprehensiones en la frontera sur estableció nuevos récords en 2021 tanto en el año fiscal como en el calendario, contando cifras más bajas al final de la presidencia del expresidente Donald Trump. Los récords de 2021 ya fueron superados en 2022.
Los inmigrantes ilegales que han hablado con varios medios de comunicación han dicho que las políticas de Biden les han animado a hacer la travesía.
Funcionarios del gobierno de Biden han afirmado repetidamente que la frontera no está «abierta».
«No lo está», dijo a los senadores el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, nombrado por Biden, durante una audiencia celebrada el 4 de mayo en Washington.
Aunque está a punto de terminar la normativa del Título 42 que permite la rápida expulsión de muchos extranjeros ilegales, «eso no significa que la frontera esté abierta», añadió Mayorkas en una sesión informativa posterior.
Reforma
El miércoles, Jean-Pierre dijo que el gobierno de Biden ha estado trabajando para asegurar la frontera.
«Desde que asumió el cargo, el presidente Biden ha estado tomando medidas para arreglar nuestro sistema de inmigración y asegurar nuestra frontera», dijo Jean-Pierre, pero no quedó claro a qué se refería.
La secretaria de prensa también intentó culpar a los republicanos, diciendo que no estaban dispuestos a negociar una legislación que tuviera como objetivo «arreglar una situación que existe desde hace décadas».
McCarthy, que compite por convertirse en el próximo presidente de la Cámara de Representantes cuando en enero de 2023 los republicanos tomen el control de la cámara baja, instó a Mayorkas a dimitir en parte por la creencia de que la frontera es segura.
«Hemos perdido el control operativo de nuestra frontera sur, dando poder a los cárteles de la droga y a los traficantes de personas», dijo McCarthy durante una reciente rueda de prensa.
Invitación
McCarthy invitó a Biden a visitar la frontera durante una reunión el 29 de noviembre en la que también participaron la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), y el líder republicano del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.).
«Él me preguntó por la frontera. Así que le hablé de mi viaje», dijo McCarthy.
El republicano acaba de viajar a la frontera para revisar las operaciones y reunirse con funcionarios del lugar.
McCarthy relató cómo decenas de miles de inmigrantes ilegales han atravesado por una sola autopista en los últimos meses, y que los agentes fronterizos le dijeron que no deportar a la gente estaba teniendo un efecto negativo en la seguridad fronteriza.
«Los propios agentes fronterizos se ven reducidos ya que aquí no hay suficientes porque ellos están sentados y están trabajando en el trabajo de procesamiento donde se podría tener a otra persona haciendo su trabajo para que puedan estar al frente. Yo le expliqué al presidente lo que vi, lo que se puede ver en los videos, donde estos cárteles literalmente disparan trazadores a nuestra guardia nacional: una mujer colgada porque ella no le pagó al cártel, sus pies cortados, puestos en llamas, los cárteles controlando mientras usted los ve cruzar», dijo McCarthy.
«El control de nuestra frontera se está perdiendo ahora mismo. Por eso le pedí al secretario de Seguridad Nacional que renuncie, y en enero, tendremos una investigación de por qué la frontera se ha convertido en la situación que es y no permitiremos que sigan por el mismo camino».
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