La Casa Blanca pidió a los medios de comunicación que sometan a los representantes republicanos de la Cámara a un mayor escrutinio después de que ellos lanzaron una investigación de impeachment contra el presidente Joe Biden, centrándose en acusaciones de corrupción.
En un memorando dirigido a los medios de comunicación obtenido por The Epoch Times, el portavoz de la Casa Blanca, Ian Sams, dijo que «es hora de que los medios intensifiquen su escrutinio de los representantes republicanos de la Cámara por abrir una investigación de impeachment basada en mentiras».
El Sr. Sams indicó en el memorando que los republicanos del Congreso han tratado durante años de «enturbiar las aguas» haciendo acusaciones supuestamente espurias contra el presidente Biden y atrayendo una cobertura mediática que solo sirve para «generar confusión, poner premisas falsas en las noticias de la gente y oscurecer la verdad».
La cobertura de los medios no ha logrado «desvelar la ilegitimidad de las afirmaciones» en las que los representantes republicanos de la Cámara han basado su investigación de impeachment, alegó el portavoz, quien a la vez proporcionó un apéndice de 14 páginas (pdf) que, según él, aborda de manera integral «las [siete] mentiras clave que los representantes republicanos de la Cámara están sugiriendo que ellos están basando el impeachment».
Estas supuestas mentiras incluyen la afirmación de que el presidente Biden «participó en un plan de soborno con un ciudadano extranjero», que está «comprometido por acuerdos con adversarios extranjeros» y que consiguió que despidieran al fiscal general ucraniano para ayudar a la empresa energética Burisma, que empleó su hijo Hunter Biden en su junta directiva y le pagaba alrededor de un millón de dólares al año.
Sin embargo, las supuestas «mentiras» tienen una base fáctica.
Por ejemplo, el director del FBI, Christopher Wray, confirmó la existencia de un documento que alega que el presidente Biden participó en un plan de soborno criminal con un ciudadano extranjero. Además, está bien documentado que, en 2015, el entonces vicepresidente Biden viajó a Ucrania y amenazó con retener mil millones de dólares en ayuda estadounidense, a menos que los funcionarios ucranianos aceptaran despedir al entonces fiscal general Viktor Shokin, acusado de corrupción.
Más tarde, Shokin dijo ante un tribunal europeo en una declaración jurada que fue obligado a dimitir porque estaba liderando una investigación de corrupción en Burisma, la compañía que le dio un trabajo a Hunter Biden mientras su padre era responsable de la política exterior de Estados Unidos en Ucrania.
El memorando de Sams alimenta una narrativa más amplia que acusa a los republicanos de no tener pruebas para la investigación de impeachment.
Los representantes republicanos del Comité de Supervisión de la Cámara respondieron a esa narrativa el 13 de septiembre, publicando una lista de pruebas de la supuesta participación del presidente Biden en los «planes de tráfico de influencias» de su familia, incluidas las transcripciones del testimonio ante el Congreso del exsocio comercial de Hunter Biden, Devon Archer, quien «describió cómo Joe Biden era ‘La Marca’ y se utilizaba para enviar ‘señales’ de poder, acceso e influencia para enriquecer a la familia Biden a partir de fuentes extranjeras».
«Cultura de la corrupción»
Al anunciar la investigación de impeachment contra el presidente Biden, el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), dijo que el Partido Republicano ha descubierto «acusaciones serias y creíbles sobre la conducta del presidente Biden —una cultura de corrupción».
El Sr. McCarthy detalló algunas de estas pruebas en una carta a sus colegas republicanos, incluidos registros bancarios y testimonios, a la vez que anunció que el 14 de septiembre se celebraría una reunión especial con los presidentes de los comités.
El presidente del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer (R-Ky.), encabezará la iniciativa del impeachment, con la asistencia del presidente del Comité Judicial de la Cámara, Jim Jordan (R-Ohio), y del presidente del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara, Jason Smith (R-Mo.).
Los tres presidentes del comité emitieron una declaración conjunta el 12 de septiembre, diciendo que los representantes republicanos de la Cámara han descubierto una «cantidad abrumadora de evidencia que muestra que el presidente Joe Biden mintió al pueblo estadounidense sobre su conocimiento y participación en los planes de tráfico de influencias de su familia».
«Los registros bancarios, los informes de actividades sospechosas, los correos electrónicos, los mensajes de texto y los testimonios de testigos revelan que Joe Biden permitió que su familia lo vendiera como ‘la marca’ en todo el mundo para enriquecer a los Biden», dijeron los tres legisladores.
“Y, gracias a dos valientes denunciantes del IRS, sabemos que el Departamento de Justicia, que ha estado reteniendo gran parte de esta evidencia, ha impedido que los investigadores de carrera busquen información que podría haber conducido a Joe Biden”, agregaron.
Ambos denunciantes proporcionaron documentos que indican que las investigaciones sobre la familia Biden se habían frenado de alguna manera, y así lo dijeron en el testimonio ante el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes.
Los denunciantes declararon que el Departamento de Justicia y el IRS utilizaron varias tácticas para retrasar las investigaciones sobre el fraude fiscal de Hunter Biden, incluida la denegación de solicitudes del fiscal federal para presentar cargos y dejar que se agotara el tiempo para alcanzar el plazo de prescripción.
La transcripción del primer denunciante, Gary Shapley, se puede ver aquí (pdf). El testimonio del segundo denunciante se puede consultar aquí (pdf).
Todos los demócratas del comité votaron en contra de la publicación del testimonio del denunciante, de manera muy similar a como los demócratas del Congreso apoyaron al presidente Biden después de que McCarthy anunciara la investigación de impeachment.
El líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), calificó de «absurda» la decisión del impeachment y dijo que «el pueblo estadounidense quiere que hagamos algo que mejore sus vidas, no lanzarse a estas persecuciones, cacerías de brujas», durante una Conferencia de prensa tras el anuncio.
Por otra parte, el exvicepresidente, Mike Pence, dijo el miércoles que hubiera preferido una votación sobre una investigación de impeachment, pero que se lo dejaría a los representantes republicanos de la Cámara después de que McCarthy ordenara a los comités que abrieran la investigación de juicio político sin una votación.
“Quiero respetar la autoridad y la decisión del presidente McCarthy de poder iniciar una investigación de impeachment”, dijo el Sr. Pence a un periodista en Iowa, según The Hill.
“El pueblo estadounidense tiene derecho a saber si el presidente Biden o su familia se beneficiaron personalmente durante su mandato como vicepresidente”.
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