La Casa Blanca rechazó este martes la oferta del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de inicio de diálogo en Caracas o en Washington con su homólogo estadounidense, Donald Trump; y reiteró que solo se reunirá con el líder venezolano cuando se «restaure la democracia» en el país caribeño.
Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca respondió el tuit que Maduro dirigió este lunes a Trump, en el que iniciaba la apertura del «diálogo en Caracas o Washington DC», según la agencia EFE.
“Como dijimos el pasado agosto, el presidente Trump hablará gustosamente con el líder de Venezuela tan pronto como se tomen ciertos pasos y el régimen de Maduro restaure la democracia a ese gran país”, afirmó el citado portavoz, que pidió el anonimato.
Estados Unidos considera como pasos claves antes de cualquier diálogo con Maduro: «que se respete la Constitución de Venezuela; la celebración de elecciones libres, justas y creíbles; la liberación de presos políticos” y el fin de “todas las violaciones de derechos humanos”, según la fuente.
Además, Washington exige que “se deje de oprimir al gran pueblo de Venezuela y se permita inmediatamente la entrada de ayuda humanitaria internacional en Venezuela”, agregó.
En agosto pasado sucedió algo similar cuando Maduro le propuso a Trump hablar por teléfono y este le respondió en un comunicado, diciendo: que se comunicaría “con el líder de Venezuela tan pronto como se restablezca la democracia en el país”.
La invitación de Maduro a Trump llega en un momento tenso para el diálogo continental, mención el portavoz de la Casa Blanca, porque Perú ha declarado que el líder venezolano no será bienvenido en la Cumbre de las Américas que reunirá en abril, en Lima, a los presidentes de todo el continente.
El tuit de Maduro «llega poco después de que el pueblo de las Américas se pusiera en pie y declarara que el comportamiento dictatorial del régimen de Maduro no es bienvenido en un foro positivo y democrático como la Cumbre de las Américas de abril», subrayó.
Para Estados Unidos, la exclusión de Maduro muestra el “alto estándar democrático” que requiere la participación en la VIII Cumbre de las Américas, dijo EE. UU. en un comunicado.
Pese a la decisión del Gobierno peruano, que obtuvo el respaldo de Estados Unidos y de los 11 países que componen el llamado Grupo de Lima, la Cancillería venezolana reiteró este fin de semana que Maduro pretende asistir a la Cumbre de las Américas.
Tanto la decisión del Grupo de Lima como del gobierno peruano, se dieron por la convocatoria de Maduro a elecciones presidenciales para abril de este año:
“Esta decisión imposibilita la realización de elecciones presidenciales democráticas, transparentes y creíbles”, dijo el llamado Grupo de Lima que integran Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.
La Casa Blanca aún no anunció si Trump acudirá a la cita continental que se celebra cada tres años, pero si lo hace, será su primer viaje a Latinoamérica en más de un año de mandato.
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