Análisis
Afganistán es conocido como la encrucijada de Asia Central. Su estabilidad afecta a países vecinos como Irán, Pakistán y China. Con el regreso de los talibanes al poder, ¿cómo se desarrollarán sus relaciones con los países fronterizos?, y ¿cómo afectarán al equilibrio de poder regional?
La edición en chino de The Epoch Times entrevistó a Yuping Su, antiguo diplomático de Taiwán en Israel, que dio su opinión sobre la situación actual de Afganistán en el orden regional.
«En la actualidad, los talibanes acaban de tomar el poder. Lo más importante es tomar pacíficamente los archivos, el personal, las instalaciones, los fondos, etc.», dijo Su.
Los talibanes gobernaron Afganistán entre 1996 y 2001, y tuvieron malas relaciones con sus estados vecinos durante ese tiempo.
Sin embargo, antes de entrar en el palacio presidencial de Afganistán, los líderes talibanes mantuvieron una reunión con 15 diplomáticos y con una delegación de líderes afganos en Doha, e incluso enviaron enviados especiales a Irán, China y Rusia para expresar su buena voluntad. Su dijo que tales acciones eran inauditas durante el último periodo de gobierno de los talibanes. Lo vio como un signo de mayor flexibilidad en sus relaciones exteriores.
Los talibanes pueden convertirse en una palanca regional
Pakistán siempre ha apoyado a los talibanes, por lo que es natural que sea el primero en reconocer que los talibanes han recuperado el poder.
Sin embargo, las relaciones de los talibanes con Irán son más sutiles.
Su explicó que la división del Islam chiíta y sunita ha durado más de 1000 años. La hostilidad entre Irán (los chiíes) y los talibanes (los suníes) se ha mantenido en el plano religioso.
«Estados Unidos era su enemigo común antes de que los talibanes recuperaran su poder», dijo Su. Espera que la situación cambie muy rápidamente después de que los talibanes recuperen el dominio del régimen.
Irán se mostrará cauteloso ante la alianza de los talibanes con Arabia Saudí y otros Estados miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG). La alianza flanqueará a Irán tanto por el lado este como por el oeste. En consecuencia, Irán podría sentirse amenazado y posiblemente podría ceder en las conversaciones sobre el acuerdo nuclear en Viena. Su cree que es bueno para Estados Unidos desde este punto de vista: «Los talibanes servirán de peón para el campo árabe».
¿Podrían los talibanes entrar en antagonismo o incluso en confrontación con China y Rusia? Basándose en la naturaleza de los talibanes, en la historia de la persecución del PCCh a los musulmanes en Xinjiang y en la persecución de Rusia a Chechenia y a los tártaros, a los talibanes o a sus líderes militantes probablemente «no les importaría castigar a los infieles o a los ateos» en nombre de los musulmanes, dijo Su.
De este modo, Afganistán puede convertirse en una palanca que obtenga una ventaja para el «eje del mal» y en un importante aliado de los suníes del Golfo Pérsico en los países del Golfo, los países árabes, Europa y Estados Unidos, tanto contra Irán como contra la frágil alianza PCCh-Rusia.
El intercambio del PCCh con Irán y los talibanes
El PCCh e Irán firmaron formalmente un acuerdo de cooperación de 25 años el 27 de marzo de este año. El ministro de Asuntos Exteriores del PCCh, Wang Yi, se reunió con los líderes políticos talibanes en Tianjin el 28 de julio, justo antes de que los talibanes tomaran el control de Afganistán. ¿Significa esto que el PCCh está en paz con sus vecinos?
Su dijo que Irán y Afganistán presentan diferentes intereses para el PCCh.
Para el PCCh, Irán es el importante proveedor de combustibles fósiles del PCCh y un socio estratégico para contener a Estados Unidos. Estas alianzas, basadas en la confrontación con un enemigo común, suelen ser las más vulnerables.
Para Irán, el PCCh ateo no es tan digno de confianza. Su cree que la relación es más de negocios que de honestidad, y «los iraníes medios admiran la cultura occidental y tienen poca comprensión de China».
En cuanto a la relación entre el PCCh y los talibanes, Su analizó que los talibanes complacerán al PCCh a toda costa en un corto período de tiempo. Los talibanes necesitan el apoyo monetario del PCCh para restaurar la economía, desarrollar sus recursos mineros y suministrar tecnología y materiales.
Sin embargo, el PCCh ha considerado durante mucho tiempo a las fuerzas del Turquestán Oriental dentro y fuera de China como «terroristas«. Toda la región de Xinjiang se ha convertido en un campo de concentración para los uigures y otros grupos islámicos. El genocidio de uigures en Xinjiang es un hecho bien conocido. El PCCh también sabe que hay fuerzas del Turquestán Oriental entre los líderes talibanes.
Entre el PCCh y los talibanes, la luna de miel no durará mucho «sobre la cuestión de los musulmanes chinos», dijo Su.
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