En un hito fiscal histórico para el gobierno federal de Estados Unidos, la deuda nacional ascendió por primera vez a 35 billones de dólares, según los últimos registros del Departamento del Tesoro.
Los niveles actuales de deuda equivalen a USD 105,000 por persona y a USD 266,000 por hogar.
Washington acumuló otro billón de dólares de deuda en menos de siete meses, y en los últimos 12 meses, la deuda nacional se disparó en casi USD 2.35 billones, un equivalente a 6400 millones al día.
El presidente del Comité Presupuestario de la Cámara de Representantes, Jodey Arrington (R-Texas), calificó el anuncio como «otro hito dudoso en el declive fiscal de la nación más poderosa y próspera de su historia».
Desde enero de 2021, la deuda nacional ha aumentado en aproximadamente USD 7.3 billones.
El enorme aumento de las cifras en tinta roja, del capital de la nación, ha captado la atención de los responsables de las políticas públicas.
En una entrevista en febrero en «60 Minutes», el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, admitió que el gobierno federal está «en una senda fiscal insostenible».
«Eso simplemente significa que la deuda crece más rápido que la economía. Por los tanto, es insostenible. Yo no creo que eso sea del todo controvertido», dijo l Sr. Powell.
Dos de las tres grandes agencias de crédito —Moody’s Investors Service y Fitch Ratings— rebajaron sus perspectivas sobre la deuda estadounidense, citando el deterioro fiscal, las persistentes negociaciones sobre el techo de la deuda y el abultado pago de intereses.
Cuando se publicaron estas actualizaciones el año pasado, la Casa Blanca se mostró en desacuerdo con las perspectivas de las empresas.
«Aunque la declaración de Moody’s mantiene la calificación AAA de Estados Unidos, no estamos de acuerdo con el cambio a una perspectiva negativa. La economía estadounidense sigue siendo fuerte, y los valores del Tesoro son el principal activo seguro y líquido del mundo», dijo el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, en una declaración.
En los últimos meses, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha ofrecido valoraciones dispares sobre la situación fiscal del país.
A principios de este año, la secretaria Yellen dijo a los legisladores: «Tenemos que reducir el déficit y mantenernos en una senda fiscalmente sostenible».
Sin embargo, en una entrevista el 13 de junio en CNBC, señaló que «estamos en un lugar razonable», siempre y cuando «la deuda se estabilice en relación con el tamaño de la economía». También se refirió al costo real de los intereses de la deuda.
PIB y pago de intereses
La deuda nacional se mide en dólares corrientes, lo que significa que no está ajustada a la inflación. Por lo tanto, para comparar adecuadamente la deuda con la economía, los funcionarios también miden la economía en dólares corrientes.
Según la estimación avanzada de la Oficina de Análisis Económico (BEA), el PIB en dólares corrientes creció a un ritmo anualizado del 5.2%, hasta los 28.6 billones de dólares, en el segundo trimestre.
El PIB en dólares corrientes aumentó más de un 30% desde el inicio de la pandemia de coronavirus. En comparación, la deuda nacional se disparó cerca de un 50% en el mismo periodo.
Además, la deuda como porcentaje del PIB (sin ajustar a la inflación) es ligeramente superior al 122%.
Los pagos de intereses han aumentado significativamente desde que la Reserva Federal puso en marcha su ciclo de ajuste cuantitativo en marzo de 2022 (una mezcla de tasas de interés más altas y reducción del balance).
El servicio de la deuda es ahora la segunda mayor partida presupuestaria, por encima de los gastos de defensa nacional.
Los pagos netos de intereses ascendieron a USD 682,000 millones en los nueve primeros meses del año fiscal, mientras que los pagos de defensa fueron de USD 644,000 millones.
El meteórico ascenso de los gastos por intereses se ha ido comiendo una parte sustancial de los ingresos federales.
En junio, los pagos de intereses (USD 140,000 millones) consumieron tres cuartas partes de los ingresos del impuesto sobre la renta de las personas físicas del mes (USD 184,000 millones).
El Tesoro estima que en todo el año los pagos de intereses y la recaudación del impuesto sobre la renta superarán los USD 1.1 billones y los USD 2.5 billones, respectivamente. Como resultado, los costos por intereses supondrán el 44% de la recaudación del impuesto sobre la renta.
Déficit presupuestario
En junio, la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO), un organismo de control presupuestario no partidista, actualizó sus perspectivas para el resto del año fiscal y para la próxima década.
Los funcionarios ajustaron su previsión para el déficit presupuestario de este año en USD 400,000 millones, o un 27%, de USD 1.5 billones a USD 1.9 billones.
Las proyecciones de referencia a diez años también destacaron que la deuda pública superará los USD 50 billones en 2034, engullendo toda la producción de la economía estadounidense.
«En relación con el tamaño de la economía, la deuda se engruesa de 2024 a 2034 a medida que los incrementos de los costos por intereses y el gasto obligatorio superan los descensos del gasto discrecional y el crecimiento de los ingresos», declaró la CBO. «La deuda pública aumentará del 99% del PIB este año al 122% en 2034, superando su máximo anterior del 106% del PIB».
Acumulativamente, desde el 2025 al 2034, el déficit federal anual ascenderá a USD 22 billones, y el pago de intereses se acercará a los USD 13 billones.
Esto incluye USD 85 billones en gasto federal, alimentado por USD 51.4 billones en desembolsos obligatorios, USD 20.5 billones en discrecionales y el resto en intereses netos.
The Epoch Times se puso en contacto con miembros de la Comisión de Presupuestos de la Cámara de Representantes para recibir sus comentarios.
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