La falta de diálogo social y las brechas en la productividad son obstáculos en la construcción de un mejor futuro para el trabajo, afirmó en una entrevista con Efe el director para América Latina y el Caribe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), José Manuel Salazar-Xirinachs.
Es fundamental construir «la gobernanza democrática, porque si la política no se alinea y no hay una visión común para trabajar juntos, es muy difícil avanzar», apuntó Salazar-Xirinachs, en el marco de la inauguración este martes en la capital panameña de la 19 sesión cuatrianual en América de la OIT.
Dentro de la gama de asuntos y problemas que afectan al trabajo, «preocupa muchísimo el de productividad. Hay unas brechas grandes en América Latina y el Caribe, «que se señalan en el informe del director general» de la OIT, Guy Ryder, «respecto a los países líderes».
«El Banco Interamericano de Desarrollo llama a esto la tragedia de América Latina, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) lo llama el talón de Aquiles del desarrollo regional, brechas de productividad», especificó.
Hay brechas también en «la educación, en la formación profesional… esos son temas centrales en los que hay que redoblar esfuerzo», insistió el director regional. «Hay que reinventar», sentenció.
La OIT apuesta por impulsar el tripartismo y la cooperación entre países para retomar en la región el camino del desarrollo con garantías sociales.
Construir un mejor futuro del trabajo en América Latina y el Caribe también tiene respuestas «muy amplias» en lo económico. Hay que revisar el modelo de crecimiento, las tasas, la relación con la creación de empleo, la situación de los mercados laborales que «desafortunadamente» sufren la desaceleración, sostuvo.
«Hay un componente económico importante y lo que hay que hacer es promover un crecimiento más alto, más sostenido, más inclusivo, más sostenible, eso es un bloque de temas», especificó.
Otro asunto es «el respeto a los derechos laborales, esto es fundamental. Estamos hablando de las convenciones de la OIT, de las ratificaciones por parte de los países de todo el acervo normativo, y allí hay temas de libertad de asociación colectiva; el problema es que no se ha avanzado suficiente en esto», acotó, e incluso advirtió que no solo se da a nivel sindical sino empresarial.
«No es nueva esa preocupación, está desde hace tiempo en materia de libertad de asociación colectiva. Hay países con problemas, lo cual ha originado quejas ante la OIT», reiteró.
La erradicación del trabajo infantil, del trabajo forzoso, cumplir la convención 169 sobre pueblos indígenas… se trata «del respeto a los derechos fundamentales», apostilló Salazar-Xirinachs, exministro de Comercio de Costa Rica y «cerebro» en la organización de la reunión continental de la OIT, que abordará estos asuntos.
Por otro lado, en la cita de Panamá, el futuro de la seguridad social se abordará en el contexto de un panel que promoverá la formalización en el trabajo, «la cobertura para todos los grupos desprotegidos, el financiamiento», lo que impacta de lleno a las fórmulas de suministrar la seguridad social, explicó.
Discutirán, dijo, «sobre la economía digital, su relación con las competencias y habilidades laborales»; reunirá a los expertos que analizarán el avance de la automatización, la robótica, la pedagogía, inteligencia artificial, y qué implica esto para el empleo, para la empleabilidad y para los sistemas de formación».
Además, los más de 500 participantes analizarán hasta el viernes las políticas de desarrollo productivo, que son «donde está la caja de herramientas para poder influir sobre los patrones de crecimiento» y suscribirán una declaración de compromisos a cumplir, según la OIT.
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