Danielle Woodard, hermana biológica de Nikolas Cruz, autor confeso de la matanza de 17 personas en un instituto de Parkland (Florida) el 14 de febrero de 2018, quiere testificar en defensa de su hermano en el juicio que se le sigue en un tribunal de Fort Lauderdale, a unos 40 kilómetros de Miami.
La hermana de Cruz, hija como él de Brenda Woodward, ya fallecida, permanece actualmente en prisión y debe responder ante un tribunal este mes de agosto por el robo de un automóvil, según recoge este martes el diario Miami Herald.
El medio señala que los abogados de Woodard, de 35 años, han pedido, a pesar de los deseos de su defendida, que esta no declare en el juicio de su hermano por carecer de interés el testimonio y perjudicar su propio caso.
«No creemos que sea útil en el caso», dijo el defensor de Woodard, el abogado Fred Moldovan, quien la representa legalmente junto a Richard Mirsky por el robo de un automóvil en Miami.
El caso contra Woodard está programado para dar comienzo el próximo día 22.
Según el Miami Herald, Cruz, que fue adoptado cuando era un bebé, creció sin contacto con su madre y hermana biológica, la cual estaba en prisión cuando ocurrió la masacre de Parkland.
Aunque no creció con el autor confeso de la matanza, Woodard podía dar detalles al jurado sobre el supuesto abuso de drogas y alcohol por parte de su madre, lo que, hipotéticamente, según la defensa del acusado, le habría provocado a Cruz daño cerebral durante la gestación.
Los abogados defensores de Cruz subrayaron durante el juicio la larga historia de problemas criminales de la madre para reforzar el argumento de que el abuso de drogas y alcohol habría condicionado y marcado la posterior conducta delictiva de sus hijos.
Al igual que su madre, Woodard pasó años entrando y saliendo de las cárceles .
En febrero de 2018 estaba cumpliendo una sentencia de ocho años por una serie de delitos graves, incluidos intento de asesinato, fraude con tarjetas de crédito y resistencia al arresto con violencia, entre otros.
Anteriormente había cumplido una condena de cinco años por otra serie de delitos, según el diario.
Woodard salió de una prisión de Florida en agosto de 2019, pero solo unos meses después, en enero de 2020, fue arrestada nuevamente en el condado de Miami-Dade, esta vez por el robo de un automóvil a una anciana.
Cruz, tal y como señaló la Fiscalía durante el juicio, realizó en torno a 150 disparos con un rifle semiautomático AR-15 en el edificio donde ocurrió la masacre, incidente que supuso hasta este año el mayor tiroteo registrado en una escuela de EE.UU.
La masacre de mayo de 2022 en una escuela en Uvalde, donde murieron 19 niños y dos adultos, se convirtió en la peor en un centro educativo, aunque debajo de las 61 muertes (contando al tirador) que dejó en 2017 un tiroteo en Las Vegas, el más mortal desde 1991 según el FBI.
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