La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que asumirá el marco de pasaporte de vacunación digital contra COVID-19 de la Unión Europea como parte de una nueva red global de certificados de salud digitales.
La OMS dijo en una declaración del 5 de junio que había entrado en una «asociación histórica de salud digital» con la Comisión Europea (CE), el órgano ejecutivo de la Unión Europea.
Como parte de esta nueva iniciativa conjunta, el marco existente en Europa de pasaportes digitales para vacunas servirá como primer pilar de una red mundial de productos sanitarios digitales.
Denominado como Red Global de Certificación de Salud Digital, el nuevo marco de pasaporte de vacunas ya ha suscitado críticas, y el senador australiano Alex Antic dijo en una declaración que la medida es «solo otra teoría de la conspiración que se hace realidad».
Los pasaportes de vacunas—y otras formas de planes de identidad digital—han sido criticadas como una invasión a la privacidad y por su potencial para permitir que gobiernos y empresas coaccionen el comportamiento humano, por ejemplo, denegando el acceso a infraestructuras o servicios.
La OMS dijo en un comunicado que, como parte de la nueva iniciativa, “tomará el sistema de certificación digital COVID-19 de la Unión Europea (UE) para establecer un sistema global que ayudará a facilitar la movilidad global y proteger a los ciudadanos en todo el mundo de las amenazas a la salud actuales y futuras”.
El certificado de vacuna digital contra COVID-19 de la UE entró en vigor en julio de 2021, con más de 2300 millones de certificados emitidos.
A medida que la pandemia ha ido disminuyendo, el uso de pasaportes de vacunas ha tenido un uso limitado últimamente, y ha disminuido aún más desde que la OMS declaró recientemente el fin de COVID-19 como una emergencia de salud pública mundial.
Aunque el Reglamento sobre el certificado contra COVID digital de la UE expirará a finales de junio de 2023, la OMS ve potencial en el marco del pasaporte de vacunas digital del bloque para casos de uso adicional más allá de COVID-19, como la digitalización del Certificado Internacional de Vacunación o Profilaxis.
Los críticos han denunciado los pasaportes de vacunas como discriminatorios por facilitar la negación del acceso a los servicios públicos a los no vacunados o allanar el camino para una vigilancia sanitaria más intrusiva.
¿»Desarrollo preocupante»?
La nueva iniciativa mundial de pasaporte de vacunas es la continuación de un acuerdo firmado en diciembre de 2022 por el Director General de la OMS, Dr. Tedros Ghebreyesus, y la Comisaria Europea de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, destinado a reforzar la colaboración entre la UE y la OMS en una amplia gama de productos sanitarios digitales.
«Hoy se abre un nuevo capítulo en la cooperación mundial en materia de salud digital», dijo Kyriakides en una declaración en las redes sociales.
«Ayudará a situar a la OMS en el centro de nuestra arquitectura sanitaria mundial», añadió.
Ghebreyesus dijo en un comunicado que, «basándose en la red de certificación digital de gran éxito de la UE, la OMS tiene como objetivo ofrecer a todos los Estados miembros de la OMS el acceso a una herramienta de salud digital de código abierto».
“Los nuevos productos de salud digital en desarrollo tienen como objetivo ayudar a las personas en todas partes a recibir servicios de salud de calidad de manera rápida y más efectiva”, agregó.
El anuncio de la iniciativa del pasaporte de vacunas mundial provocó una respuesta crítica del político holandés Rob Roos, miembro del Parlamento Europeo, quien lo calificó como un “desarrollo preocupante”.
“El #Coronapas es un instrumento discriminatorio que solo ha creado una falsa sensación de seguridad”, dijo Roos en un posteo en Twitter.
Roos también expresó su preocupación por el hecho de que la nueva iniciativa fuera impulsada por la OMS, que no es una organización gubernamental responsable ante los votantes.
“No podemos entregar el poder nacional a un instituto financiado con fondos privados sin ninguna legitimidad democrática”, dijo en un posteo anterior en el que no veía con buenos ojos el llamado tratado mundial contra las pandemias, una propuesta distinta pero relacionada que se está negociando en el seno del Órgano Intergubernamental de Negociación de la OMS.
Aunque el tratado global contra la pandemia se encuentra en sus primeras etapas y aún está lejos de ser ratificado, se ha expresado la preocupación de que el tratado «jurídicamente vinculante» le daría a la OMS demasiada influencia sobre las políticas de salud en los países soberanos.
El impulso a favor de un sistema mundial de certificados sanitarios digitales estandarizados existe desde hace tiempo.
El G-20 impulsa un pasaporte mundial de vacunas
En noviembre de 2022, los líderes de las naciones del Grupo de los 20 (G-20) emitieron una declaración conjunta que promueve un estándar global sobre la prueba de vacunación para viajes internacionales y pedían el establecimiento de «redes mundiales de salud digital» que se basaran en los sistemas de pasaportes de vacunas contra COVID-19 existentes.
La declaración conjunta se realizó al término de la cumbre del G-20 celebrada en Indonesia, que siguió las recomendaciones del ministro de Salud de Indonesia, Budi Gunadi Sadikin, antes de la cumbre.
«Tengamos un certificado sanitario digital reconocido por la OMS—si uno se ha vacunado o sometido a las pruebas adecuadas, puede desplazarse», dijo Sadikin durante un panel el 14 de noviembre.
En la cumbre, los líderes del G-20 debatieron sobre la coordinación de políticas en respuesta a amenazas globales, incluidas futuras pandemias.
“Reconocemos la importancia de los estándares técnicos y métodos de verificación compartidos, en el marco del RSI (2005), para facilitar los viajes internacionales sin contratiempos, la interoperabilidad y el reconocimiento de soluciones digitales y no digitales, incluida la prueba de vacunación», dice la declaración conjunta del G-20.
El Reglamento Sanitario Internacional (2005) es un instrumento de derecho internacional desarrollado bajo los auspicios de la OMS que establece un marco global para responder a la propagación internacional de enfermedades.
El estándar respaldado por la OMS, que entró en vigor en 2007, requería que los países fortalecieran las capacidades de vigilancia en los cruces fronterizos e introdujo una serie de documentos sanitarios, incluidos los certificados internacionales de vacunación.
¿»Gulag digital»?
El periodista Nick Corbishley, que escribe sobre tendencias económicas y políticas en Europa y América Latina, advirtió que los pasaportes de vacunas pueden conducir a la implementación de un esquema de identidad digital global que amenazará la privacidad y la libertad en todo el mundo.
“Es como esta sociedad de control. A donde quieras ir, tienes que mostrar tu teléfono móvil, tu identidad… aunque sea solo para entrar a un supermercado o entrar a una tienda”, dijo en el programa “Crossroads” de EpochTV.
Corbishley describió los aspectos negativos de un plan global de identificación digital como una especie de «gulag digital» en el que las personas podrían ser «efectivamente desterradas de la sociedad».
“Esa es una visión aterradora”, afirmó.
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