La Organización Trump negó el 4 de enero que el expresidente Donald Trump se beneficiara indebidamente de su presidencia, y calificó de «descabelladas» las afirmaciones contrarias de los demócratas de la Cámara de Representantes.
Un nuevo informe publicado por los demócratas del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes afirma que las empresas del 45º presidente obtuvieron al menos unos 7.8 millones de dólares de 20 gobiernos extranjeros —incluidos los de China, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y otros— durante su mandato, violando la Constitución.
Los pagos señalados incluían sobre todo gastos de alquiler en la Trump Tower y la Trump World Tower —ambas en Nueva York— y estancias en los hoteles Trump International de Washington y Las Vegas.
El informe también alega que el presidente Trump permitió que esos pagos influyeran en sus movimientos de política exterior, citando como ejemplo su decisión de no sancionar al Banco Industrial y Comercial de China (ICBC), que alquila espacio de oficinas en la Torre Trump.
Pero Kimberly Benza, portavoz de la Organización Trump, dijo a The Epoch Times por correo electrónico que tales afirmaciones eran ridículas.
«Esa narrativa es una locura, sobre todo teniendo en cuenta que no hay ningún presidente en la historia de Estados Unidos que haya sido más duro con China que Donald Trump… un presidente que introdujo aranceles por valor de miles de millones de dólares sobre sus bienes y servicios», dijo.
La Sra. Benza subrayó que ICBC —que representó aproximadamente 5.4 millones de dólares de los pagos detallados en el informe— había sido un inquilino preexistente a largo plazo en la Torre Trump desde 2008, «casi una década antes de que el presidente Trump entrara en el cargo».
En cuanto a los fondos restantes, la Sra. Benza señaló que la Organización Trump no tiene la «capacidad o viabilidad» para evitar que las personas hagan reservaciones a través de sitios web de reservaciones de terceros.
Sin embargo, dijo que la compañía implementó voluntariamente un programa para rastrear los pagos de gobiernos extranjeros, que la compañía donó anualmente al Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Los registros del Departamento confirman que la compañía donó 151,470 dólares en 2018, 191,538 dólares en 2019, 105,465 dólares en 2020 y 10,577 dólares en 2021, lo que hace un total de 459,050 dólares.
Eric Trump, hijo del expresidente y vicepresidente ejecutivo de su compañía, señaló que esa información ha estado disponible públicamente durante años.
«Yo tuiteaba una foto de los cheques que enviaba cada año», dijo a The Epoch Times. Pero algunos medios de comunicación —y el informe de los demócratas— no lo mencionaron.
También señaló que, mientras su padre se desvinculó de los negocios de la familia cuando llegó a la presidencia, ocurrió lo contrario con Hunter Biden. El joven Biden, dijo Trump, se metió en negocios extranjeros cuando su padre se convirtió en vicepresidente.
«Llevamos más de 40 años en el sector hotelero».
Duelo de investigaciones
El informe de los demócratas sigue a su investigación de varios años sobre si el presidente Trump violó la cláusula de honorarios de la Constitución.
La cláusula, que se encuentra bajo el Artículo I, Sección 9, prohíbe a cualquier persona que ocupe «cualquier cargo de beneficio o confianza» de Estados Unidos aceptar cualquier «regalo, honorario, cargo o título, de cualquier tipo que sea» de un líder o estado extranjero sin el consentimiento del Congreso.
La investigación desencadenó una batalla judicial sobre los registros financieros del presidente Trump, que los legisladores citaron en 2019. El acuerdo de 2022 que puso fin a la disputa exigía a Mazars USA, la firma de contabilidad de la Organización Trump desde hace mucho tiempo, que entregara ciertos documentos al Comité de Supervisión de la Cámara, que entonces estaba bajo el liderazgo demócrata.
Pero cuando los republicanos tomaron el control de la Cámara el año pasado, dejaron de buscar esos registros, centrando sus esfuerzos de investigación en los negocios en el extranjero de la familia Biden.
El informe de los demócratas señala ese movimiento como la razón de su falta de un «recuento más exhaustivo» de todos los honorarios extranjeros que creen que el presidente Trump ha aceptado.
«Todavía no sabemos el alcance de los pagos extranjeros que recibió Donald Trump —o incluso el número total de países que le pagaron a él y a sus empresas mientras era presidente— porque el presidente del Comité, James Comer, y los republicanos de la Cámara de Representantes enterraron cualquier otra prueba de la asombrosa corrupción de la familia Trump», denunció el representante Jamie Raskin (D-Md.), el principal demócrata de Supervisión, en un comunicado del 4 de enero.
«A pesar de estos esfuerzos, el informe de hoy deja claro que el expresidente Trump puso llenarse los bolsillos con dinero en efectivo de gobiernos extranjeros que buscan favores políticos por encima de los intereses del pueblo estadounidense».
«Desesperados por salvar la cara»
El personal y los asesores del expresidente ven el informe de manera diferente.
Para la Sra. Benza, es la confirmación de que los demócratas de la Cámara de Representantes están «desesperados por salvar la cara» en medio de las investigaciones en curso de los republicanos sobre el presidente Joe Biden y los miembros de su familia.
«Hay una gran diferencia entre alguien que alquila un espacio de oficinas comerciales a una empresa extranjera hace una década… frente al hijo y los miembros de la familia del vicepresidente que extraen dinero de China, Ucrania y Rumanía, entre otros, mientras no proporcionan bienes y servicios aparentes o tangibles», dijo. «Sería deshonesto no distinguir claramente entre ambas cosas».
Jason Meister, miembro del panel asesor de la campaña del presidente Trump en Nueva York, coincidió con esa opinión cuando dijo a The Epoch Times que no hay comparación válida entre las finanzas familiares del presidente Biden y los negocios de la familia Trump.
«Los demócratas quieren hacerles creer desesperadamente que el hecho de que diplomáticos en Washington reservaran habitaciones de hotel o compraran tocino confitado en el Hotel Trump durante cuatro años es lo mismo que el hecho de que Joe Biden convirtiera a su hijo en un hombre de la bolsa, para recoger y luego repartir con él los millones en sobornos que recibió de todo el mundo», dijo Meister.
Y añadió, en tono humorístico: «Por cierto, ¡ese tocino está buenísimo! No culpo a los diplomáticos».
El Sr. Meister afirmó que, en su opinión, «Joe Biden es sin duda el ser humano más corrupto que jamás haya ocupado el Despacho Oval. La familia Biden traficó con influencias a cambio de sobornos».
El presidente Biden, por su parte, ha mantenido que no tenía conocimiento ni participación en los asuntos empresariales de los miembros de su familia.
Los republicanos de la Cámara de Representantes están llevando a cabo una investigación sobre el asunto.
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