Los investigadores del sheriff buscan a un ladrón que entró en una armería del norte de California y robó 50 pistolas.
Alrededor de la 1:20 de la madrugada del 22 de julio, el sospechoso hizo un agujero en la pared exterior revestida de madera de la tienda familiar Foothill Firearms, en la localidad de Newcastle, en el condado de Placer. A continuación, empujó a través de los paneles de yeso en el interior de la tienda para entrar, según la portavoz del departamento del sheriff Elise Soviar.
Una vez dentro, el ladrón llenó bolsas de lona con las pistolas y se marchó en un coche, según las autoridades.
Las imágenes de vigilancia de la tienda sólo muestran a un sospechoso, cuyo rostro estaba cubierto. Los detectives no dieron ninguna descripción del vehículo y siguen investigando.
«No está claro si había alguien más conduciendo el vehículo», dijo Soviar a The Epoch Times.
La tienda de armas familiar de Newcastle, con una población de unos 1500 habitantes, era el objetivo específico, añadió.
«Es muy raro que ocurra algo así», afirma Soviar. «Newcastle es una comunidad muy pequeña y unida».
La tienda permaneció cerrada esta semana mientras los propietarios se ocupaban del papeleo tras el robo. El propietario espera reabrir el jueves.
Un día después, otra tienda de armas de fuego fue robada a unas 18 millas al sur de Newcastle, en Orangevale, situada en el condado de Sacramento.
Los agentes del sheriff del condado de Sacramento acudieron sobre las 3:45 de la madrugada del martes a la tienda de Greenback Lane. El propietario estaba en casa viendo un video en directo de la tienda cuando informó que había visto a alguien dentro.
El sospechoso rompió la ventana delantera y robó al menos 25 armas de fuego, según un comunicado publicado por el departamento del sheriff en Facebook. El sospechoso huyó y dejó un vehículo deportivo Kia gris en el estacionamiento, según el departamento del sheriff.
Los investigadores dicen que el sospechoso parece haber utilizado el Kia para retroceder contra la ventana de la tienda, rompiéndola para entrar en la tienda. El vehículo había sido robado esa misma noche en Fair Oaks, a unas cinco millas al sur de Orangevale, dijo el departamento del sheriff.
Los investigadores dicen que no logran aún hacer una conexión entre los dos robos de armas de fuego.
«Los investigadores hablan de esto, pero por el momento, no los logramos conectar», dijo la Sra. Soviar.
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