Las declaraciones de quiebra en Estados Unidos aumentaron el año pasado tanto entre particulares como entre las empresas, informó la Oficina Administrativa de las Cortes de Estados Unidos.
«Las solicitudes anuales de quiebra ascendieron a 486,613 en el año que finalizó en junio de 2024, en comparación con los 418,724 casos del año anterior», se lee en un comunicado de prensa del 25 de julio.
Esto supone un aumento del 16.2% respecto al año anterior. Mientras que las declaraciones de quiebra personales aumentaron en más de un 15%, las empresariales lo hicieron en más de un 40%. Las solicitudes han estado aumentando cada trimestre desde junio de 2022, según el comunicado.
Mientras que algunos minoristas prominentes como Rue21 han citado «la inflación y los vientos en contra macroeconómicos» como razones para declararse en bancarrota, otros como Stop & Shop han apuntado a las «tiendas de bajo rendimiento». Bob’s Stores, con sede en Connecticut, dijo que se enfrentaba a dificultades para «asegurar las finanzas necesarias para mantener las operaciones».
Las tasas de interés se han mantenido elevadas, encareciendo los costos de financiación para las empresas. A su vez, las empresas se enfrentan a elevados costos de producción mientras intentan fijar precios competitivos para sus productos en el mercado.
El continuo aumento de las declaraciones de quiebra sugiere que las empresas y los hogares están sometidos a una «creciente presión económica», declaró a principios de este mes Amy Quackenboss, directora ejecutiva del American Bankruptcy Institute (ABI).
Michael Hunter, vicepresidente del proveedor de datos de quiebra Epiq AACER, dijo que espera «una fuerte demanda en las declaraciones individuales más adelante, especialmente teniendo en cuenta el gran aumento de las declaraciones comerciales, los niveles de endeudamiento de los consumidores, las altas tasas de interés, y el aumento general de los costos con ingresos familiares relativamente planos».
Optimismo empresarial frente a despidos de trabajadores
Aunque las quiebras comerciales están aumentando, muchas empresas siguen siendo cada vez más optimistas sobre el futuro, según el Índice de la Pequeña Empresa de la Cámara de Comercio de EE. UU. para el segundo trimestre de 2024.
«Tanto los planes para aumentar el personal como la inversión han aumentado este trimestre, y las expectativas de ingresos para el próximo año han alcanzado los niveles más altos registrados en esta encuesta», señala el informe.
Más de siete de cada diez encuestados esperan que sus ingresos aumenten el año que viene, una opinión que se mantiene en todos los tamaños y sectores de la actividad.
Las empresas más jóvenes, es decir, las que llevan menos de 10 años funcionando, se mostraron más optimistas sobre futuras contrataciones y mayores inversiones que las empresas que llevan más de 11 años funcionando.
En medio del aumento de las quiebras, las empresas han despedido a cientos de miles de trabajadores en 2024. En lo que va de año, las empresas estadounidenses anunciaron planes para recortar 434,645 puestos de trabajo, según la empresa de recolocación Challenger, Gray & Christmas, Inc.
Las empresas de tecnología fueron las que más despidos anunciaron, seguidas de la industria de la educación, el sector del transporte y las empresas de productos de consumo.
La primera razón citada por las empresas para despedir trabajadores fue la «reducción de costos», seguida de las «condiciones económicas/de mercado».
Reorganizaciones y tasas de interés
Según S&P Global, la mayoría de las quiebras de empresas estadounidenses registradas en el primer semestre del año se clasificaron como reorganizaciones, es decir, reestructuraciones de empresas en dificultades con el objetivo de que vuelvan a ser rentables.
«El alza de las tasas de interés y los problemas de la cadena de suministro son algunos de los factores que dificultaron a las empresas mantener un flujo de caja suficiente para pagar el servicio de la deuda y evitar el impago de los préstamos», señaló S&P Global.
«Dado que es probable que falten meses para una reducción significativa de las tasas, las empresas podrían estar recurriendo a la vía de la reorganización, que les da tiempo para encontrar una base financiera más firme».
La Reserva Federal de Estados Unidos ha mantenido las tasas de interés sin cambios en el 5.25-5.50 por ciento desde julio del año pasado. Los inversionistas esperaban que los recortes de las tasas comenzaran a principios de este año, pero eso no sucedió.
Mantener las tasas como están durante más tiempo significa que las empresas tienen que seguir pagando intereses más altos por los préstamos, lo que les crea dificultades financieras.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo recientemente a los legisladores en el Capitolio que las tasas de interés más altas durante un período más largo podrían «debilitar indebidamente la actividad económica y el empleo».
Una preocupación más acuciante para las empresas podría ser que las tasas subieran aún más. Los funcionarios de la Fed habían dicho durante la reunión de junio del organismo que esto era una posibilidad si la inflación seguía subiendo o se mantenía elevada.
La próxima reunión de la Fed está prevista para los días 30 y 31 de julio. Los operadores de tasas de interés no esperan ningún recorte de tasas para esta reunión, según los datos de la herramienta FedWatch de CME. Se esperan recortes de tasas en septiembre.
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