El representante republicano estatal de Florida, Matt Gaetz, advirtió este lunes que existe una amenaza «más significativa» para EE. UU. que una posible guerra por Ucrania y esa es el acercamiento de China con Argentina debido a la reciente adhesión del país a la Iniciativa la Franja y la Ruta (BRI) de China.
El legislador republicano dijo que «mientras la administración Biden, los medios de comunicación y muchos legisladores hacen sonar la alarma por una posible guerra por Ucrania, existe una amenaza mucho más significativa para nuestra nación que se acelera rápidamente cerca de casa, en la Argentina», en una sesión de la Cámara de Representantes de Florida, el 7 de febrero.
Gaetz agregó «Argentina, una nación y economía crítica en las Américas, acaba de unirse al Partido Comunista Chino al firmar la iniciativa One Belt, One Road (la Franja y la Ruta)», firmado un Memorándum de Entendimiento el 6 de febrero entre China y Argentina que implica una financiación de más de USD 23,700 millones por parte de Beijing destinados principalmente a proyectos de infraestructura en áreas críticas.
«El costo para China fue de 23,700 millones de dólares, tan solo una fracción comparada con el billón de dólares que nuestro país ha gastado para construir democracias con tierra y sangre en el Medio Oriente», agregó.
El legislador republicano dijo que la reciente adhesión de Argentina implica «la compra de influencia e infraestructura por parte de China» en el país «para así colaborar en el espacio y la energía nuclear» que significa «un desafío directo a la Doctrina Monroe, y es mucho más significativo para la seguridad estadounidense que nuestro último coqueteo con la OTAN en las llanuras de Europa del Este».
«China es una potencia en ascenso; Rusia es una potencia en declive», dijo y agregó que no se debe perder «nuestro enfoque» en este sentido.
Esto luego de que la semana pasada el presidente de Argentina, Alberto Fernández, iniciara una gira hacia Rusia y China—en el contexto de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022—y en medio de la intensificación de las tensiones con occidente por Ucrania, además del acercamiento e influencia cada vez mayor por parte del Kremlin y Beijing hacia América Latina.
Sin embargo, el legislador Gaetz no ha sido el único en hacer sonar la alarma respecto a la adhesión de Argentina a la iniciativa. En noviembre, China anunció una serie de acuerdos con el país latinoamericano en áreas estratégicas generando la preocupación de expertos, quienes en ese momento dijeron que era el preámbulo para que Argentina se convierta en el vigésimo país en Latinoamérica en este proyecto de trampa de deuda.
“Esta interacción con China es consistente con [otros ejemplos] como Hugo Chávez, Rafael Correa y Evo Morales–con el uso de dinero chino en condiciones tradicionales para dar más libertad a esos gobiernos izquierdistas-populistas de acabar con la democracia, transparencia, y en cierta forma entregar a su país a depender de China”, dijo Evan Ellis, experto en materia de las relaciones de China con América Latina en una declaración a The Epoch Times, en noviembre de 2021.
Durante años la BRI ha sido percibida como una «trampa de la deuda» por expertos, quienes señalan que aumenta el riesgo de dificultades económicas en los países prestatarios a través de niveles de préstamos insostenibles y contratos opacos, y la falta de transparencia de la iniciativa hace que los ciudadanos no sepan cuánto dinero se ha comprometido a devolver su gobierno ni bajo qué condiciones.
En ese sentido, el doctor y analista económico de China, Antonio Graceffo, en un artículo de opinión dijo que además de la falta de transparencia del BRI, «el flujo de ‘dinero gratis’ del PCCh favorece la corrupción y degrada la democracia, ya que los autócratas se enriquecen para garantizar su permanencia en el poder».
Con información de EFE y de Emel Akan, de Antonio Graceffo y de Nathan Su.
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