La presidenta de la Conferencia Republicana de la Cámara de Representantes, Liz Cheney (R-Wyo.), dijo el lunes que el líder de la minoría republicana del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), y el líder de la minoría de la Cámara, Kevin McCarthy (R-Calif.), son los líderes del Partido Republicano, oponiéndose a la idea de sus colegas de que el expresidente Donald Trump tiene una gran influencia en el partido.
Cheney se ha pronunciado duramente en contra de Trump y fue uno de los 10 miembros republicanos de la Cámara de Representantes que votaron para acusarlo después de la irrupción al Capitolio del 6 de enero. Su respuesta acerca del liderazgo republicano ocurrió cuando un periodista le preguntó qué papel le gustaría que asumiera el expresidente para que los republicanos recuperaran el control de la Cámara y el Senado en 2022.
“Creo que ahora mismo, el Partido Republicano está encabezado por Mitch McConnell y Kevin McCarthy en la Cámara. Creo que nuestros líderes electos son los que están a cargo del Partido Republicano”, dijo Cheney durante el retiro político de los republicanos de la Cámara de Representantes en Florida.
«Y creo que al mirar hacia el ’22 y el ’24, nos centraremos mucho en el fondo y en los problemas», dijo Cheney. “Y creo que ahí es donde se tiene que atraer de vuelta a los votantes que perdimos en 2020, al transmitirles que, de hecho, somos el partido en el que ellos pueden confiar. Somos el partido de la competencia y de los principios conservadores”.
Sin embargo, Trump aún conserva su influencia sobre el Partido Republicano, como muestra la encuesta más reciente del Instituto de Política de la Escuela Kennedy de Harvard (pdf).
A diferencia de Cheney, muchos legisladores republicanos consideran todavía que Trump tiene mucha influencia en el partido. El senador Lindsey Graham (R-S.C.) dijo recientemente en una entrevista de Axios que la influencia de Trump en el partido republicano podría hacerlo “más grande, él puede hacerlo más fuerte, él puede hacerlo más diverso. Y también podría destruirlo».
Cheney se ha expresado muchas veces en contra de lo que ella dice que es el papel de Trump en la irrupción del 6 de enero y Trump ha prometido hacer campaña contra la congresista en su estado natal para sacarla de su cargo.
Cheney dijo a los periodistas que quiere que la comisión, al estilo del 11 de septiembre, de la presidenta Nancy Pelosi (D-Calif.) comience rápidamente para averiguar qué sucedió el 6 de enero.
“Creo que es muy importante que tengamos una comisión (…) En mi opinión, es decir, los miembros de la comisión deberían estar retirados, no deberían ser funcionarios en activo que enfrenten presiones políticas en cualquier momento. Esto debe ser de naturaleza absolutamente bipartidista, y debe comenzar de inmediato, debería tener poder de citación, porque el pueblo estadounidense necesita saber cómo llegamos al 6 de enero. Qué sucedió el 6 de enero, y la gente debe rendir cuentas”, dijo Cheney.
Algunos republicanos, incluyendo a McConnell, han manifestado que la comisión no solo debería centrarse en el 6 de enero, sino que debería investigar otros disturbios violentos en curso que están ocurriendo en ciudades de EE. UU. desde el año pasado, sin embargo, Cheney no estuvo de acuerdo.
“Creo que lo que sucedió el 6 de enero no tiene precedentes en nuestra historia. Y creo que es muy importante que la comisión pueda centrarse en eso. Estoy muy preocupada, como todos mis compañeros, por la violencia que vimos, el BLM, la violencia de Antifa el verano pasado. Creo que es un conjunto diferente de problemas, un conjunto diferente de problemas y un conjunto diferente de soluciones”, agregó Cheney.
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