Los legisladores de Arkansas avanzaron el jueves una medida que prohibiría a las empresas exigir a los trabajadores que revelen su estado de vacunación contra COVID-19.
En una votación de 22 a 11, el Senado, de mayoría republicana, avanzó la legislación que otorgaría a los empleados y contratistas un «derecho a la privacidad», lo que significa que las empresas no podrán exigirles que revelen si han sido vacunados contra COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
Un panel de la Cámara de Representantes respaldó posteriormente el proyecto de ley, enviándolo al pleno para su votación final.
La propuesta es una de las varias medidas que limitan o prohíben los requisitos de vacunación que han dominado una sesión que pretendía centrarse en la redistribución de los distritos del Congreso. Un día antes, los legisladores enviaron al gobernador Asa Hutchinson una propuesta que permite a los trabajadores optar por no cumplir con los requisitos de la vacuna COVID-19 de sus empleadores.
Las medidas son principalmente en respuesta a la orden de vacunación contra COVID-19 anunciada por el presidente Joe Biden el mes pasado, que exige a las empresas con 100 empleados o más que exijan la vacunación contra COVID-19 o garanticen la realización de pruebas semanales.
«Tenemos que presionar en contra, y aquí es donde empieza», dijo la representante estatal republicana Mary Bentley, miembro del Comité de Salud Pública de la Cámara de Representantes, antes de que el panel respaldara la medida.
Si se promulga, la propuesta no entrará en vigor hasta principios del año que viene, ya que no ha conseguido el apoyo de dos tercios del Senado, necesario para que la legislación entre en vigor inmediatamente. Sin ese respaldo, entraría en vigor 90 días después de que se suspenda la legislatura.
No está claro si el gobernador republicano convertirá la medida en ley si llega a su mesa, aunque ya ha expresado su preocupación por otros intentos de la legislatura de impedir que las empresas exijan a sus empleados que se vacunen.
The Epoch Times se puso en contacto con la oficina de Hutchinson para pedirle comentarios.
A primera hora del miércoles, el gobernador dijo a los periodistas en una sesión informativa que no «cree en una orden federal sobre la vacunación», en referencia a la reciente orden del presidente a las empresas con 100 trabajadores o más.
«Pero tampoco creo en las órdenes estatales sobre los empleadores y en definir la relación empleador-empleado», añadió.
El presidente dijo la semana pasada que entre el 96 y el 98 por ciento de los estadounidenses deben ser vacunados contra COVID-19 antes de que la nación pueda «volver a la normalidad».
«Pero una cosa es segura: Una cuarta parte del país no puede estar sin vacunar y que no sigamos teniendo un problema», dijo Biden a los periodistas en la Casa Blanca el 27 de septiembre.
Con información de Associated Press.
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