Los legisladores republicanos de Mississippi, Carolina del Sur y Alabama están presionando a sus colegas republicanos en el Congreso de Estados Unidos para que bloqueen a los electores presidenciales de los estados en disputa durante el conteo de votos del Colegio Electoral el 6 de enero.
Un grupo de 30 representantes estatales de Carolina del Sur envió una carta a los senadores Lindsey Graham (R-S.C.) y Tim Scott (R-S.C.) pidiéndoles que se unan a una impugnación que está siendo planeada por el representante Mo Brooks (R-Ala.). El representante Stewart Jones compartió la carta en Facebook el 21 de diciembre, instando a los senadores a unirse a Brooks para «pedir una investigación completa del Congreso sobre las irregularidades en la votación y rechazar a los electores de los estados en disputa».
Un grupo de 29 representantes del estado de Mississipi envió una carta similar el 18 de diciembre a la senadora electa Cindy Hyde-Smith (R-Miss.), al senador Roger Wicker (R-Miss.) y a los tres representantes estatales de la Cámara.
«A estas alturas ya conocen la carta del Honorable Mo Brooks pidiendo un debate en el pleno sobre la presentación de los votos de los colegios electorales de varios estados, en la que el representante Brooks pidió una investigación exhaustiva sobre el extenso fraude electoral, la votación ilegal y el robo de las elecciones denunciados en las semanas posteriores a las elecciones del 3 de noviembre», dice la carta.
«Escribimos esta carta para expresar nuestro fuerte apoyo al llamado del representante Brooks para la investigación de las extensas irregularidades de la elección. Las elecciones justas, libres de interferencias extranjeras y externas, son fundamentales para la supervivencia de nuestra república, que existe basada en el consentimiento de los gobernados. Si no se puede confiar en nuestras elecciones, la república ya no disfrutará del consentimiento de los gobernados».
El representante del estado de Alabama, Andrew Sorrell (R), compartió un borrador de una carta similar en Facebook, instando a otros a firmar. El contenido de las tres cartas es idéntico, sugiriendo que el esfuerzo puede ser coordinado por el partido republicano a través de las líneas estatales.
El movimiento para impugnar a los electores el 6 de enero está ganando fuerza. Brooks y la representante electa, Marjorie Taylor Greene (R-Ga.), estuvieron en la Casa Blanca el lunes para discutir el plan con el equipo del presidente.
«Varios miembros del Congreso acaban de terminar una reunión en el Despacho Oval con el presidente [Donald Trump], preparándose para luchar contra la creciente evidencia de fraude electoral», escribió en Twitter el Jefe de Despacho de la Casa Blanca, Mark Meadows. «Manténganse en sintonía».
«[El presidente Trump] se merece su día en la corte y definitivamente le vamos a dar su día en el Congreso. Tenemos un grupo de miembros de la Cámara de Representantes y senadores que está creciendo rápidamente. La impugnación del 6 de enero está en marcha», escribió Greene en Twitter después de la reunión.
La impugnación de los votos electorales durante el conteo del 6 de enero requeriría la presencia de un miembro de la Cámara de Representantes y un senador. Aunque varios miembros de la Cámara se han comprometido a la impugnación, un puñado de senadores republicanos dijeron que están abiertos a la idea. Una vez que se presente la impugnación, la Cámara y el Senado tendrían que debatir y votar sobre el destino de la discutida lista de electores.
Brooks (R-Ala.), el primer congresista en decir que presentará una impugnación cuando se cuenten los votos, dijo a The Epoch Times que los ciudadanos individuales deben llamar a sus representantes para exigir que tomen una posición y apoyen los desafíos.
«Lo único que conseguirá que los congresistas y senadores hagan lo que es correcto para nuestro país en este asunto de fraude electoral y robo de elecciones es la participación activa de los ciudadanos estadounidenses que quieren elecciones honestas y exactas. Ahora, ¿pueden los ciudadanos estadounidenses participar activamente? Muy simplemente, tienen que llamar a sus congresistas y senadores y exigirles que apoyen este esfuerzo para proteger nuestro sistema electoral del fraude y la conducta ilegal», dijo Brooks a The Epoch Times el 21 de diciembre.
«La forma en que nuestros congresistas y senadores lo hacen es rechazando los votos del Colegio Electoral de aquellos estados que tienen sistemas electorales tan defectuosos que hacen que los resultados electorales reportados sean poco fiables e inexactos».
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