El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, advirtió este martes del «peligro de tener un narcogobierno de Venezuela», en una región donde operan los principales carteles de la droga a nivel hemisférico y global.
En un diálogo con periodistas denominado «De Frente con el Presidente», el mandatario hizo esas declaraciones al repasar junto con el ministro de Gobierno, Patricio Pazmiño, la gestión de su Ejecutivo en materia de seguridad.
Moreno acusó a Venezuela de dar «una completa permisividad al tráfico de drogas, es más, es muy probable que ellos se estén enriqueciendo al igual que malos elementos de las Fuerzas Armadas».
Al remarcar la cooperación antidrogas que lleva adelante Ecuador con Perú y Colombia, con el apoyo de Estados Unidos, el presidente ecuatoriano lamentó «el embate del narcotráfico principalmente de los grandes grupos organizados de México y Colombia».
Más de 18 toneladas confiscadas para consumo interno
Subrayó la captura el año pasado por parte de las fuerzas de seguridad ecuatorianas de más de 18 toneladas de cocaína para el consumo local, que consideró «significativa» para impedir que «los traficantes se lleven el futuro de nuestros niños y jóvenes».
En 2020, Ecuador registró una aprehensión total de 128.2 toneladas de sustancias estupefacientes sujetas a fiscalización, lo que representa un 56 % más que en 2019.
Además, 197 organizaciones de tráfico ilícito de drogas fueron desarticuladas el año pasado, un incremento del 18 % respecto al anterior, precisó la secretaria general de Comunicación de la Presidencia ecuatoriana, Caridad Vela.
Moreno resaltó que su país tiene uno de los indicadores más bajos de homicidios a nivel regional y del continente americano.
«Es uno de los países más seguros y con menos índices de homicidios de Latinoamérica», afirmó antes de atribuir esos datos a la labor de la Policía Nacional.
El jefe de Gobierno indicó que Ecuador registró en 2019 un total de 6.9 homicidios por cada 100,000 habitantes, mientras que Colombia tuvo 25.4, México 27, Honduras 41 y Venezuela 60, siendo Chile el país con la tasa más baja, 2.6.
Sin embargo, reconoció que durante la pandemia se ha producido un «ligero incremento de más de 7 homicidios», cifra que sigue siendo baja en relación al promedio hemisférico de 24.
Respecto a la situación de seguridad en la frontera norte con Colombia, el mandatario lamentó no poder «detener el flujo de la droga hacia Ecuador», pese a los esfuerzos de «manera denodada» de las fuerzas de seguridad ecuatorianas.
El ministro de Gobierno aseguró que con base en las estadísticas compartidas con el Ejecutivo de Iván Duque, los índices demuestran que la conflictividad fronteriza ha bajado.
Pero alertó que los grupos armados ilegales «se han atomizado» del lado colombiano de la demarcación, por lo que «hay más grupos peleando por los recursos que genera el crimen», y donde se concentran los principales productores de cocaína del mundo.
Inseguridad ha bajado
En relación a la inseguridad ciudadana, Pazmiño descartó con base en los datos oficiales que sea producto de la inmigración venezolana, aunque reconoció que existe «una percepción en los ciudadanos» en ese sentido.
Constató que el año pasado se redujo la delincuencia el 31 %, con menos de 22,034 eventos, en relación con 2019, y aunque se tiene en cuenta que la propia pandemia haya limitado las denuncias, la comparación de estas con las cifras que reportó el sistema integrado de seguridad ECU911 apunta a una reducción y no a un aumento.
Concedió, no obstante, que el «accionar más evidente y violento de la delincuencia» pueda conducir a una «percepción de la realidad» de un crecimiento de la inseguridad, y que aunque aumentó el número de autores venezolanos, sigue siendo marginal respecto al de ecuatorianos.
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