Los líderes de Japón y la UE anunciaron una nueva asociación digital el 12 de abril, tras una cumbre en la que debatieron cómo hacer frente conjuntamente al creciente autoritarismo en medio de la invasión rusa de Ucrania, la intimidación nuclear de Corea del Norte y el aumento de la agresión del régimen comunista de China.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, se reunió con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la 28ª cumbre UE-Japón celebrada en Tokio, donde reafirmaron su compromiso de mantener las normas democráticas, el orden internacional basado en reglas y un Indo-Pacífico libre y abierto.
«Hoy hemos hablado de la profundización de la asociación estratégica y económica entre la Unión Europea y Japón», dijo Michel. «Hemos abordado nuestras relaciones bilaterales y los importantes retos regionales y mundiales, y la mejor manera de coordinar nuestras respuestas».
«La UE y Japón son socios verdaderamente afines. Juntos representamos una cuarta parte del PIB mundial. Tenemos una relación profunda y dinámica, unida por los valores fundamentales de la democracia y el Estado de Derecho. Japón es nuestro socio estratégico más cercano en la región Indo-Pacífica».
Michel destacó la gran relación de Japón con la UE, ya que ambos mantienen una asociación económica desde 2019, y Japón es la única nación asiática que aparece hasta ahora en la estrategia de la UE para reforzar la seguridad y la defensa europeas.
Para ello, Michel reconoció que Japón prestó «un importante apoyo humanitario, financiero y militar a Ucrania y a su pueblo», tras la invasión rusa, y subrayó el deseo de Japón y de la UE de reforzar ese compromiso compartido y de ampliar los diálogos sobre la mejor manera de manejar al cada vez más agresivo Partido Comunista Chino (PCCh).
«Nuestra cooperación en Ucrania es fundamental en Europa, pero también es importante en el Indo-Pacífico, y también queremos profundizar nuestras conversaciones sobre una China más asertiva», dijo Michel.
«Creemos que China debe defender el sistema multilateral del que se ha beneficiado para desarrollar su país».
Los comentarios de Miche coincidieron con las declaraciones realizadas por la secretaria de Estado adjunta estadounidense, Wendy Sherman, en abril, cuando señaló que, a pesar de todos sus intentos por socavar el orden internacional basado en normas, el PCCh era «uno de los mayores beneficiarios de ese orden internacional basado en normas durante el último medio siglo».
La sombra de China sobre el Indo-Pacífico
La cumbre se produce en medio de una creciente presión internacional en respuesta a una serie de actividades de China. Entre ellas se encuentran los intentos del PCCh de ampliar por la fuerza su territorio mediante la creación de islas artificiales, su compromiso declarado de unificar Taiwán con el continente incluso por la fuerza, su continua represión de los grupos religiosos y de las minorías étnicas, una amplia campaña de espionaje e intimidación, y sus esfuerzos de gran alcance para modernizar y ampliar su arsenal nuclear.
Ante esto, la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se refirió al Indo-Pacífico como un «escenario de tensiones», y dijo que la UE tendría que trabajar más con socios como Japón para proteger la paz y la estabilidad de la región.
«La Unión Europea quiere desempeñar un papel más activo en el Indo-Pacífico», dijo Leyen. «Queremos asumir más responsabilidad en una región que es tan vital para nuestra prosperidad».
Sin embargo, aparte de los comentarios de Michel, las referencias directas a China fueron escasas en la cumbre.
Pero sí se habló indirectamente de las amenazas del PCCh contra Taiwán, así como del comportamiento agresivo del régimen y del aumento de las maniobras militares en el mar de China Oriental y el mar de China Meridional.
«Seguimos seriamente preocupados por la situación en el mar de China Oriental, incluidas las aguas que rodean las islas Senkaku y el mar de China Meridional, y nos oponemos firmemente a cualquier intento unilateral de cambiar el statu quo y aumentar las tensiones que podrían socavar la estabilidad regional y el orden internacional basado en normas», dijeron los líderes en una declaración conjunta. «Expresamos nuestra grave preocupación por los reportes de militarización, coerción e intimidación en el mar de China Meridional».
«Subrayamos la importancia de la paz y la estabilidad a través del estrecho de Taiwán, y alentamos la resolución pacífica de las cuestiones a través del estrecho».
«Nos oponemos firmemente a cualquier intento unilateral de cambiar el statu quo por la fuerza, sea cual sea el lugar, como una grave amenaza para todo el orden internacional».
Para ello, los dirigentes anunciaron que Japón y la UE trabajarán conjuntamente para ampliar la cooperación práctica en varios ámbitos, como la seguridad marítima, la gestión de crisis, la ciberseguridad y la lucha contra la desinformación.
Tales esfuerzos, dijo Michel, son vitales para la continuación de un «Indo-Pacífico libre y abierto», y para apoyar la unidad y la centralidad de los 10 miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). Los comentarios pueden indicar un mayor alineamiento con Estados Unidos, que el 12 de mayo recibirá en Washington a ocho de los 10 líderes nacionales de la ASEAN, en su intento de alejar a la región de los crecientes lazos con el PCCh.
«Mejoraremos la cooperación para un Indo-Pacífico libre y abierto, inclusivo y basado en el estado de derecho y los valores democráticos, así como sin restricciones de coerción, en base a nuestras estrategias respectivas y complementarias para la región del Indo-Pacífico», dijeron los líderes.
Este trabajo, añadieron los líderes, estaría «basado en intereses comunes y en los valores compartidos de libertad, respeto a los derechos humanos, democracia, estado de derecho, comercio abierto, libre y justo, multilateralismo efectivo y orden internacional basado en normas».
Una nueva asociación digital
Para lograr estos fines, los líderes anunciaron la adopción de una nueva asociación digital (pdf) que aumentará la colaboración entre Japón y la UE en algunos de los principales asuntos de seguridad del momento.
La nueva Asociación Digital Japón-UE es la primera de este tipo entre la UE y un país exterior. No crea obligaciones legales o fiscales entre los dos gobiernos, pero pretende establecer conjuntamente estructuras de colaboración en materia de desarrollo tecnológico, aplicación y política.
Las áreas de interés incluyen la privacidad, la resistencia de la cadena de suministro, el acceso a los semiconductores, el 5G, la Inteligencia Artificial, los flujos de datos y la posibilidad de alineación en relación con la regulación de las tecnologías blockchain.
La asociación ampliará las actuales asociaciones estratégicas y económicas mantenidas por la UE y Japón que, según los documentos de la UE (pdf), ya «constituyen juntas la mayor zona del mundo de flujos de datos seguros, permitiendo el flujo libre y fiable de datos personales».
Su creación estuvo guiada por «la visión de crear un auténtico mercado interior de datos, en el que éstos fluyan libremente entre sectores y países», según los dirigentes.
El anuncio se produce tras las advertencias de varios expertos de que las democracias de estilo occidental y los regímenes autoritarios se están disociando cada vez más, dividiendo el mundo en distintas «tecnoesferas» con sus propias normas, reglas y estándares tecnológicos.
Los vínculos entre Europa y Asia parecen estar creciendo, no retrocediendo, frente a las amenazas del PCCh, un punto que el primer ministro japonés Fumio Kishida se apresuró a destacar.
«La seguridad en Europa y en el Indo-Pacífico son inseparables», dijo Kishida.
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