Los demócratas entraron al receso por Acción de Gracias teniendo que reagruparse, ya que la audiencia disminuyó durante la segunda semana de testimonios sobre el impeachment contra el presidente Donald Trump y múltiples encuestas revelaron disminuciones del apoyo entre los independientes para destituir al presidente de su cargo.
Algunos expertos en campañas demócratas y marketing de medios temen que el receso se convierta en un período de enfriamiento, mientras que otros insisten en que el receso ayudará al esfuerzo de la destitución.
«Normalmente, diría que cualquier descanso perjudicaría, al generar una caída en el apoyo entre los ‘persuables’, el pequeño número de personas que no están encerradas de una manera u otra», dijo Spencer Critchley a The Epoch Times en 24 de noviembre. «Los anunciantes de televisión saben que en el momento en que un comercial sale del aire, su influencia comienza a disminuir».
Critchley es socio gerente de la agencia de marketing Boots Road Group con sede en California y exasesor de comunicaciones para las campañas del presidente Barack Obama.
Sin embargo, sus preocupaciones son equilibradas, con optimismo de que el receso verá a «la madre de todos los debates políticos de Acción de Gracias, que sucederá en las mesas de todo el país y mantendrá el tema muy vivo».
Critchley también espera que, al igual que con la publicidad televisiva, «a veces un descanso ayuda a aumentar el impacto del mensaje cuando vuelve al aire, por lo que bien podemos ver que eso suceda con el impeachment después de Acción de Gracias».
Otro veterano estratega de comunicaciones demócratas cree que el receso podría ayudar a los demócratas a determinar qué, si acaso, necesitan cambiar en sus tácticas.
“No, el descanso no perjudica los esfuerzos del juicio político. Por el contrario, millones de estadounidenses simplemente observaron y procesaron horas de testimonios convincentes, todos argumentando que el presidente violó la ley y violó la Constitución”, dijo Christy Setzer a The Epoch Times.
Setzer es presidente de New Heights Communications, con sede en Washington, y exestratega del vicepresidente Al Gore y de varios grupos electorales demócratas, incluidos AFL-CIO, Planned Parenthood y el Service Employees International Union (SEIU).
“Ahora estamos en la Etapa Dos: el Congreso se va a casa y habla con sus electores sobre lo que acaban de escuchar. Para aquellos en distritos de primera línea, los Miembros querrán saber cómo los votantes están tomando esta información. ¿Están entusiasmados? ¿O desconectados?»
Setzer dijo que lo que los demócratas escuchen durante la semana del receso «informará la próxima etapa del proceso de destitución, si la estrategia debe ser recalibrada o aumentada».
Del mismo modo, Max Burns, un estratega demócrata con sede en Nueva York, ve en el receso una oportunidad porque «cada vez que busca algo tan trascendental como un juicio político, es importante volver a sus electores y presentar el caso directamente».
Esto se debe a que «los estadounidenses escucharon mucho en las últimas dos semanas y un receso brinda a los legisladores una oportunidad muy necesaria para responder preguntas y dividir el caso contra Trump en algo más accesible para la gente común», dijo.
Los números que enfrentan los demócratas son realmente desalentadores. Una encuesta nacional de Emerson encontró que el apoyo entre los votantes independientes se revirtió de octubre a noviembre, pasando del 48 por ciento a favor y el 39 por ciento en contra del juicio político al 49 por ciento en contra y el 34 por ciento a favor.
Y una encuesta de Politico/Morning Consult encontró que el 42 por ciento aprueba cómo los demócratas están manejando el esfuerzo de juicio político, en comparación con el 46 por ciento que desaprobaba.
Un resultado particularmente preocupante para los demócratas se produjo en la encuesta del Siena College Research Institute de Nueva York, donde el 59 por ciento de los independientes entrevistados se oponen al impeachment, en comparación con el 37 por ciento que lo apoya. Más sorprendente, el 51 por ciento de los independientes dijo que el impeachment fue «un ataque partidista contra el presidente Trump».
Los números incluso llevaron a Ken Stern de Vanity Fair a liderar un análisis profundo de múltiples encuestas al declarar el 21 de noviembre que «los datos exclusivos de Vanity Fair muestran que el impeachment podría ser un problema perdido para los demócratas que esperan reclutar independientes en 2020».
Stern luego citó a un experto en ciencias políticas no identificado que le dijo que «hay muchas personas a las que no les gusta Trump que todavía están preparadas para votar por él».
Zach Friend, otro estratega demócrata con sede en California, dijo a The Epoch Times que cree que «nada en este momento cambiará la trayectoria de la investigación de juicio político. La opinión pública, especialmente la opinión partidista, ha sido notablemente estable, por lo que ni el tiempo ni la nueva información probablemente cambiarán el resultado».
Por su parte, los estrategas republicanos entrevistados por The Epoch Times ven el receso como un golpe significativo a la campaña de impeachment de los demócratas.
«Creo que duele, ya que detendrá el impulso que creen que acumularon y será difícil mantener esta historia en las noticias durante las vacaciones», dijo Matt Mackowiak, presidente del Grupo de Estrategia Potomac.
“Inicialmente, dijeron que querían terminar para el Día de Acción de Gracias. Ahora no está claro si pueden llegar a Navidad”, agregó Mackowiak.
Brian Darling, presidente de Liberty Government Affairs en la capital de la nación, señaló el hecho de que los demócratas no renunciaron al receso como un indicador de debilidad en su esfuerzo.
«Si los demócratas de la Cámara realmente pensaran que el presidente Donald J. Trump era una amenaza para la Constitución, no harían un receso de Acción de Gracias. La falta de urgencia es evidente y socava muchos de los argumentos histéricos presentados por los demócratas de la Cámara”, dijo Darling.
Sin embargo, Darling, exasesor del senador Rand Paul (R- Ky.), advirtió a los republicanos contra el exceso de confianza.
«Creo que más republicanos deben ser realistas y admitir que la decisión no fue ‘perfecta’, al tiempo que sostienen que el delito del presidente no se acercó ni siquiera a un ‘alto delito o delito menor removible'», dijo.
«Además, debe haber más discusión sobre los procedimientos inusuales utilizados por el Comité de Inteligencia de la Cámara, incluidas las audiencias secretas», dijo Darling.
El presidente de Americans for Tax Reform, Grover Norquist, dijo a The Epoch Times que «existe la sensación de que el impulso del ‘impeachment’ se está desacelerando. Las encuestas muestran una caída en el apoyo al impeachment entre los independientes, el grupo que desea y necesita.
«Tomar una semana libre después de un testimonio decepcionante puede permitir que esto se enfríe aún más (…) Los demócratas pueden hacer juicio político O hacer su trabajo como legisladores».
Norquist espera que los demócratas de la Cámara de Representantes empujen la impugnación a una votación en la Cámara, seguida de un juicio en el Senado, «porque el ala izquierda del Partido Demócrata no permitirá nada más».
Puede ponerse en contacto con Mark Tapscott, escribiendo a [email protected]
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