Los delegados de la Convención Nacional Demócrata votaron el 18 de agosto para nominar al exvicepresidente, Joe Biden, para la presidencia de los Estados Unidos.
El expresidente Bill Clinton, el senador demócrata de Nueva York, Charles Schumer, y la exfiscal general adjunta, Sally Yates, fueron algunos de los oradores que respaldaron a Biden antes del voto de la convención.
“Con el presidente Biden, la vicepresidenta Harris y una mayoría demócrata en el Senado, haremos que la atención médica sea asequible para todos; enmendaremos la cruel desigualdad de ingresos y riqueza que ha plagado a Estados Unidos durante demasiado tiempo; y tomaremos medidas contundentes y decisivas para combatir el cambio climático y salvar al planeta”, dijo Schumer.
La convención, aunque tiene su sede en Milwaukee, se está llevando a cabo virtualmente debido a la pandemia del COVID-19.
“Bueno, muchas, muchas gracias, desde el fondo de mi corazón, gracias a todos. Esto significa mucho para mí y para mi familia”, dijo Biden en su discurso de aceptación virtual junto a su esposa y familia. «Gracias, gracias, gracias».
Biden se enfrenta a los singulares desafíos logísticos para pronunciar sus discursos durante una convención totalmente virtual llevada a cabo esta semana en medio de la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino, comúnmente conocido como el nuevo coronavirus.
Las votaciones nominales se emitieron a través de videos pregrabados desde los 50 estados del país. La convención de cuatro días culminará el jueves, luego que Biden acepte su nominación dentro de un salón de convenciones casi vacío en Delaware. Y el miércoles, su compañera de fórmula, la senadora de California Kamala Harris, se convertirá en la primera mujer de color en aceptar la nominación a la vicepresidencia de un partido político importante.
Ninguno de los oradores ha tenido audiencia en vivo, y hasta ahora han pronunciado sus discursos de pie o sentados solos en la mayoría de videos pregrabados.
El equipo de Biden no dio el codiciado discurso de apertura de la noche, y prefirió en cambio llenar el espacio con más de una docena de demócratas en sus 20, 30 y 40 años. Entre los líderes más jóvenes estaban Stacey Abrams, el representante Conor Lamb (D-Pa.), y el presidente de la Nación Navajo, Jonathan Nez.
Clinton, un elemento fijo de las convenciones demócratas durante casi tres décadas, se dirigió a los votantes durante aproximadamente cinco minutos en un discurso grabado desde su casa en Chappaqua, Nueva York.
Además de criticar el liderazgo de Trump, Clinton llamó a Biden «un presidente de manos a la obra». Biden es “un hombre con una misión: asumir la responsabilidad, no desviar la culpa; concentrarse, no distraerse; unir, no dividir», agregó Clinton.
Aún queda por ver si la convención poco convencional le dará a Biden el impulso que está buscando.
Las estimaciones preliminares muestran que la audiencia televisiva de la primera noche de la convención virtual se redujo en comparación con la fiesta inaugural presencial de la nominación de Hillary Clinton hace cuatro años.
Se estima que 18,7 millones de personas vieron la cobertura entre las 10 y las 11 pm en ABC, CBS, NBC, CNN, Fox News Channel y MSNBC, dijo la compañía Nielsen. Hace cuatro años, la noche de apertura atrajo a poco menos de 26 millones de espectadores.
La campaña de Biden dijo que 10,2 millones de espectadores adicionales transmitieron la convención online el lunes por la noche.
«Estamos produciendo una convención digital y la gente está mirando», tuiteó el portavoz de Biden, T.J. Ducklo.
Mientras tanto, Trump continúa cortejando a los votantes de los estados considerados como «campos de batalla», en un esfuerzo por desviar la atención de la convención de Biden. Más temprano en el día, durante un evento en Arizona cerca a la frontera con México, el presidente republicano dijo que una presidencia de Biden desencadenaría «una avalancha de inmigración ilegal como el mundo nunca había visto antes».
The Associated Press contribuyó a este informe.
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