El secretario de Estado Antony Blinken dijo el 2 de marzo que los estadounidenses deberían abstenerse de viajar a Ucrania para ayudar en el conflicto de ese país con Rusia.
La advertencia de Blinken se produjo el mismo día en que Ucrania levantó temporalmente la exigencia de visado para la entrada de voluntarios extranjeros en el país. El 28 de febrero, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky anunció la formación de la «Legión Internacional de Defensa Territorial de Ucrania», llamando a los «ciudadanos del mundo» a unirse a la lucha contra la invasión rusa.
En una conferencia de prensa celebrada el 2 de marzo, Blinken dijo que la posición del Departamento de Estado al respecto no ha cambiado.
«Hemos sido muy claros durante algún tiempo en pedir a los estadounidenses que puedan haber residido en Ucrania que se vayan, y en dejar claro a los estadounidenses que puedan estar pensando en viajar allí que no vayan», dijo Blinken a los periodistas.
En lugar de unirse a la lucha en Ucrania, Blinken dijo que los estadounidenses pueden encontrar formas alternativas de ayudar a la nación devastada por la guerra.
«Para aquellos que quieran ayudar a Ucrania y ayudar a su pueblo, hay muchas maneras de hacerlo, incluyendo el apoyo y la ayuda a las muchas ONG que están trabajando para proporcionar asistencia humanitaria; proporcionando recursos ellos mismos a los grupos que están tratando de ayudar a Ucrania siendo defensores de Ucrania y de la resolución pacífica de esta crisis que fue creada por Rusia», dijo. «Ésas son las formas más efectivas en que la gente que quiere ayudar puede hacerlo».
El consejo de Blinken está en consonancia con el Departamento de Estado que emitió una advertencia de «Nivel 4: No viajar» para Ucrania el 24 de febrero.
A pesar de ello, los estadounidenses y otros occidentales se están uniendo a la causa ucraniana. Reuters reportó el 28 de febrero de que un veterano de las Fuerzas Aéreas estadounidenses es uno de esos voluntarios.
«Me siento culpable por no ir», dijo el hombre, que no quiso dar su nombre por razones de seguridad, según Reuters.
El canadiense Bryson Woolsey también renunció a su trabajo como cocinero tras ver la petición de Zelensky. Reuters dijo que Woolsey no tiene formación militar, pero planea comprar un boleto de avión a Polonia y cruzar a Ucrania para ofrecerse como voluntario para el combate.
La ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Melanie Joly, dijo el 28 de febrero que los canadienses pueden elegir si quieren unirse a la brigada internacional de Ucrania.
Los investigadores del terrorismo nacional han expresado en el pasado su preocupación por el hecho de que los estadounidenses viajen a Ucrania para entrenar con el infame Batallón Azov neonazi del país. Según el SITE Intelligence Group Enterprise, los grupos neonazis de Estados Unidos han ampliado los recientes llamados de Azov para conseguir voluntarios extranjeros.
«En la medida en que esto proporcione una oportunidad para que los individuos adquieran experiencia de combate y el potencial para radicalizarse, entonces se podría muy bien ver a esas personas regresando e integrando esos tipos de tácticas y herramientas en sus grupos extremistas domésticos existentes, o nuevos, aquí», dijo la profesora de la Universidad Bellarmine Abigail Hall, una investigadora sobre el extremismo y el militarismo.
Según el FBI, grupos extremistas estadounidenses han viajado a Ucrania para entrenar con Azov. El FBI lo dijo durante el procesamiento de los miembros del derechista Rise Above Movement (RAM) por presuntas agresiones a manifestantes en 2017.
«Se cree que el Batallón Azov (…) ha participado en el entrenamiento y radicalización de organizaciones de supremacía blanca con sede en Estados Unidos», según el FBI.
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