Una familia de cinco personas en Venezuela necesita 126 salarios mínimos mensuales para costear la cesta alimentaria, cuyo costo fue de 491 dólares en agosto, según estimaciones del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), difundidas este jueves.
El ente independiente explicó que, el mes pasado, cuando el salario mínimo -130 bolívares- equivalía a 3.98 dólares, una familia requirió 7.86 salarios más que en el mes de julio para adquirir una canasta calculada con precios de 60 productos básicos.
Los alimentos que más subieron fueron la leche, el queso y los huevos, con un alza de 10.93 %, seguido de las grasas y aceites, que aumentaron un 7.19 %, y las frutas y hortalizas, con una subida de 6.48 %.
El pasado 31 de agosto, el Cendas-FVM indicó que un maestro necesita ganar el equivalente a 19.24 veces su salario mensual para acceder a la canasta básica alimentaria.
El ente independiente indicó que el sueldo promedio del docente es de 26,09 dólares al mes, monto que representa «apenas el 5.2 %» del costo de los alimentos, lo que, a su vez, supone un «déficit del 94.8 %».
Desde marzo de 2022, el salario mínimo y las pensiones se mantienen en 130 bolívares, un monto que ha perdido poder de compra ante el alza de la cotización del dólar en el país, donde los comercios usan la divisa como referencia para fijar los precios.
Venezuela salió en diciembre de 2021 de una hiperinflación en la que entró en 2017 y que redujo el valor del bolívar, la moneda oficial, así como la confianza de los ciudadanos en ella, por lo que se acogieron al dólar en un intento de proteger sus ingresos.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.