NASHVILLE, Tennessee —Oraciones, abrazos, flores, lágrimas. Todo esto se dio el martes afuera de The Covenant School, la escuela primaria cristiana privada de Nashville, donde tres niños y tres adultos fueron asesinados el día anterior.
En la entrada de Covenant Presbyterian, que está conectada con la escuela, había carteles que anunciaban el próximo servicio de Pascua y un campamento de verano para niños.
Esos carteles, que promovían un tiempo de alegría para la comunidad de Covenant, están ahora rodeados de cinta amarilla y patrullas en la escena del crimen, aún activa, mientras la policía trabaja para reunir más detalles sobre cómo se desarrollaron los acontecimientos del lunes.
La gente entró y salió del lugar durante todo el día, depositando flores y otros objetos, como osos de peluche, para conmemorar a las víctimas.
«Lo hicieron todo bien»
Angie Hawn, asistente de enseñanza en una escuela cercana de Smyrna, en el condado de Rutherford, dijo que debía acudir a presentar sus respetos en la escuela de Nashville.
Hawn dijo que la noticia del tiroteo de ayer le llegó muy de cerca, ya que trabaja en un aula de tercer grado y tiene su propio hijo de ocho años, más o menos de la misma edad que las víctimas. Lo llevó con ella junto a su «hija de la iglesia» de su grupo juvenil.
«Ayer fue un día difícil», dijo Hawn. «Yo también estoy todo el día en una clase de tercer grado. Sólo tenía que estar aquí para formar parte de la comunidad porque sabía lo mucho que la comunidad estuvo ahí para mí cuando perdí a mi marido».
Hawn perdió a su marido en Irak y relató la importancia de la comunidad y de su fe cuando lo perdió.
Es líder de jóvenes en la iglesia Lifepoint de Smyrna. La menor que estaba con ella dijo que sintió que tenía que hacer algo, y eso fue ofrecer sus propias oraciones.
Hawn explicó que la escuela en la que trabaja está actualmente en vacaciones de primavera, pero la semana pasada antes de las vacaciones, realizaron su propio simulacro de tirador activo y encierro.
«Esta escuela hizo todo bien», dijo. «Nuestra escuela, al ser pública, tiene un oficial de recursos escolares, pero ellos también han tomado sus propias medidas de seguridad. Siempre estamos pensando en cómo proteger a los alumnos».
Hawn y los niños se dirigían a un campo de béisbol en el que jugaba la víctima William Kinney para colgar cintas rojas, el color de la camiseta de su equipo. Esos lazos rojos también se vieron el martes junto a la calle cerca de The Covenant School junto a carteles en los que se leía «Somos Covenant».
Vecindarios
Green Hills es un vecindario situado a unos 20 minutos del centro de Nashville, en la parte sur de la ciudad. En esta comunidad hay iglesias por todas partes, así como tiendas y restaurantes.
Los signos de la tragedia no sólo eran evidentes frente a la escuela el martes, sino que se extendían a todos los rincones del barrio y de la ciudad.
En varios lugares de la zona, las banderas ondeaban a media asta para conmemorar la tragedia del lunes.
El jefe de la policía metropolitana de Nashville, John Drake, declaró en varias ruedas de prensa que otros lugares de la zona también eran posibles objetivos.
Entre ellos, un posible atentado en un centro comercial y otras escuelas. A menos de una milla de Covenant y uno enfrente del otro se encuentran The Mall at Green Hills y Hillsboro High School.
Un cartel delante de la preparatoria Hillsboro decía: «Estamos con Covenant», mientras los estudiantes de esa escuela salían del edificio al final del día para dirigirse a casa con sus familias.
Vecindario de la tiradora
La casa de la autora del tiroteo, Audrey Hale, de 28 años, está en Brightwood Avenue, a unos 10 minutos de la escuela.
Según los registros del Asesor de la Propiedad de Nashville, los padres de Hale compraron la casa en 1994, por lo que es probable que pasara la mayor parte de su infancia, si no toda, en el vecindario.
El vecindario en sí era tranquilo y estaba bordeado por algunas casas grandes que podrían encontrarse en cualquier vecindario suburbano.
Los transeúntes, algunos periodistas y los residentes del vecindario que hacían ejercicio ofrecían una escena que contrastaba con la del día anterior, cuando la Policía Metropolitana, la Oficina Federal y de Investigación de Tennessee y los agentes de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos retiraron pruebas de la vivienda.
El martes por la tarde se colocó un trozo de madera contrachapada sobre la puerta principal, sin que hubiera señales de que los padres de Hale estuvieran en casa.
Aunque parece que Hale creció en un buen vecindario, todavía se está descubriendo el motivo que desencadenó la tragedia que emprendió ayer.
The Epoch Times está trabajando para obtener más información sobre la autora de los disparos, ya que la policía metropolitana aún no ha dado a conocer los detalles de su manifiesto ni sus posibles motivos.
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