Durante un acto chavista en Caracas, el dictador venezolano Nicolás Maduro retó «formalmente» al presidente encargado Juan Guaidó a convocar elecciones, a quien calificó de «señor fantoche».
En el mismo acto, declaró la ruptura de «todas las relaciones diplomáticas y políticas» con Colombia y dio un plazo de 24 horas al personal diplomático de Bogotá en Caracas para abandonar el país.
«He decidido romper todas las relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno fascista de Colombia y todos sus embajadores y cónsules deben salir en 24 horas de Venezuela ¡Fuera de aquí, oligarquía!», fueron sus palabras.
El presidente colombiano, Iván Duque, ha sido uno de los mandatarios que reconoció al diputado Juan Guaidó, quien asumió como presidente encargado de Venezuela siguiendo las indicaciones de la Constitución nacional para los casos en que no hay un presidente legítimo.
Entre otras cosas, el mandatario colombiano ha facilitado el territorio de su país para acopiar la ayuda humanitaria internacional que ha solicitado Guaidó; además permitió la realización de un concierto en la zona fronteriza con Venezuela para recaudar más recursos.
En el mismo acto, Maduro luego desafió a Guaidó: «¿Por qué no convocaron elecciones presidenciales en 30 días si tienen el poder?»
«Lo reto formalmente a convocar elecciones, ¡señor fantoche, títere del imperialismo norteamericano! Va a ver quién tiene votos y quién gana elecciones en este país», dijo.
La jornada del sábado se vive con mucha tensión por el ingreso de la ayuda humanitaria, con enfrentamientos y camiones de ayuda incendiados en varios puntos de la frontera entre Venezuela y Colombia.
Varios miembros del Ejército venezolano han desertado y comenzaron a asistir con la ayuda humanitaria, en vez de seguir las órdenes de Maduro de bloquear su ingreso y distribución.
Horas antes del acto chavista en que Maduro hizo las declaraciones, el presidente colombiano Iván Duque, acompañado de Juan Guaidó, anunció que «hemos visto actitudes cobardes y peligrosas por parte de la dictadura, que ha llevado colectivos a algunos lugares para generar disturbios y evitar que la ayuda humanitaria llegue a su territorio, cometiendo lo que podría convertirse en un grave delito de lesa humanidad».
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