Un demócrata clave en el Senado de Estados Unidos dijo el martes que Estados Unidos no incurrirá en impago antes de la votación de la cámara sobre un proyecto de ley que suspendería el techo de la deuda durante más de un año.
«No va a suceder», dijo el senador Joe Manchin (D-W.Va.) a los periodistas en Washington.
Estados Unidos está destinado a no poder cumplir con sus obligaciones financieras si los legisladores no aumentan o suspenden el límite de deuda antes del 18 de octubre.
Pero el proyecto de ley de suspensión, aprobado por la Cámara de Representantes siguiendo las líneas partidistas la semana pasada, prácticamente no tiene apoyo republicano en el Senado.
Los demócratas controlan la cámara 50-50, pero necesitan 60 votos para una moción de cierre antes de una votación final. El líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), ha dicho que es responsabilidad de los demócratas lidiar con el techo porque el partido ha estado operando sobre una «base partidista».
Una posibilidad es incluir una disposición en el paquete de reconciliación presupuestaria que los demócratas pretenden imponer al Congreso sin el apoyo de los republicanos.
Pero el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), dijo el martes que esa no es una opción.
“La reconciliación es un proceso prolongado, complicado y arriesgado con el incumplimiento de pagos y la degradación sobre nosotros”, dijo a los periodistas en el Capitolio de Estados Unidos.
Otra forma sería que los republicanos del Senado no usen el obstruccionismo, que inserta el requisito de 60 votos. Si el partido tomaba ese camino, los demócratas podrían aprobar el proyecto de ley de la Cámara con sus 50 votos y el voto de desempate que puede emitir la vicepresidenta Kamala Harris.
McConnell indicó que eso no sucedería en una conferencia de prensa separada en Capitol Hill.
«Eso requeriría obtener el consentimiento de todos los republicanos para bajar el umbral a 51. No puedo imaginar que eso suceda», dijo.
Algunos demócratas están considerando una forma de forzar el tema. Ellos podrían eliminar el obstruccionismo por mayoría de votos invocando la opción nuclear. Los demócratas utilizaron la opción en 2013 para reducir el umbral de 60 votos para todas las nominaciones judiciales, excepto las de la Corte Suprema, a una mayoría simple. Los republicanos lo invocaron cuatro años después para las nominaciones a la Corte Suprema.
Manchin y Schumer se negaron a responder directamente cuando se les preguntó sobre la opción, pero el senador Dick Durbin (D-Ill.), el segundo demócrata de rango en el Senado, dijo a un periodista que el partido debería discutirlo.
“Debemos arreglar las reglas rotas sobre el obstruccionismo”, agregó el senador Jeff Merkley (D-Ore.) en Twitter.
Si bien ni cerca de 10 republicanos se han comprometido a apoyar el aumento del techo de la deuda, la senadora Lisa Murkowski (R-Alaska), quien vota junto a demócratas, dijo a los periodistas que estaba pensando en ello.
Sin embargo, el senador Ted Cruz (R-Texas) dijo que Schumer no logrará su deseo.
«Lo que Schumer está tratando desesperadamente de conseguir es cobertura política de 10 republicanos que votan por los billones de dólares de deuda que los demócratas han acumulado irresponsablemente y los billones más que quieren acumular», dijo a los periodistas. «No va a tener éxito en eso».
La tensión sobre el techo de la deuda se produce cuando los demócratas intentan negociar un acuerdo sobre otros dos proyectos de ley, el paquete presupuestario y un proyecto de ley de infraestructura de USD 1.2 billones que el Senado aprobó en una votación bipartidista en agosto.
Los moderados esperaban aprobar la pieza de infraestructura el mes pasado, pero la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), incumplió la promesa de llevarla a pleno bajo la presión de los llamados progresistas para aprobar primero el paquete presupuestario, que fue fijado una vez en USD 3.5 billones.
Manchin es un obstáculo clave porque dice que el paquete es demasiado alto y ningún republicano lo apoya.
El presidente Joe Biden se reunió el lunes con 12 miembros del Caucus Progresista del Congreso, que está bloqueando el proyecto de ley de infraestructura. El martes se reunió con 11 moderados. Según un documento de la Casa Blanca, este último grupo «renovó su compromiso de aprobar cada proyecto de ley para que podamos hacer de la inversión en las familias el corazón de nuestra estrategia de crecimiento económico».
Los progresistas no han mostrado signos de ceder hasta ahora.
“Los progresistas lo han estado diciendo durante meses–estos proyectos de ley van JUNTOS. Ese fue el trato y así es como brindaremos un cambio transformador a los trabajadores, las familias y nuestras comunidades”, escribió la representante Pramila Jayapal (D-Wash.), presidenta del caucus progresista, en Twitter el martes.
Los funcionarios de la Casa Blanca dicen que están en comunicación tanto con Manchin como con la senadora Kyrsten Sinema (D-Ariz.), quien se opone al paquete presupuestario de USD 3.5 billones y Biden se negó a apoyar después de que fue registrada ilegalmente en un baño en su estado natal durante el fin de semana.
Mientras tanto, Biden dijo a los periodistas en Michigan que creía que Manchin está encaminándose hacia el apoyo de un paquete de más de USD 2.2 billones. También dijo que el paquete presupuestario final será de menos de USD 3.5 billones.
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