La atleta keniana Mary Keitany volvió a encabezar hoy el podio del maratón de Nueva York, sumando su cuarta victoria en el certamen y desatando los elogios de sus contrincantes, entre ellas la defensora del título del año pasado.
Keitany, de 36 años, aceleró en el kilómetro 30 del recorrido y amplió distancia con sus rivales en la última etapa hasta la meta, que selló en 2h 22:48, la segunda mejor marca de la historia de la carrera.
La cuádruple campeona del certamen encadenaba tres victorias consecutivas hasta 2017, cuando la desbancó la estadounidense Shalane Flanagan, que este domingo llegó 3 minutos y 33 segundos después a la línea de meta, clasificándose tercera.
Flanagan consideró en rueda de prensa que Keitany «será recordada como una de las mejores maratonianas de nuestra generación» por su «alto nivel» y por la manera en que «aplasta a su competencia» con su «consistente» ejecución del deporte.
«Es una atleta poco frecuente y debe ser celebrada» dijo Flanagan, haciéndose eco de otras dos estadounidenses, Molly Huddle y Des Linden, cuarta y sexta clasificadas, quienes destacaron que Keitany casi rompe el récord en la carrera y que con los años y la experiencia no ha hecho más que mejorar.
Por su parte, Keitany, ataviada con la corona de laurel y luciendo una enorme sonrisa, dedicó el triunfo a su familia tras una jornada en la que «no quería ir demasiado deprisa» pero marcó una gran diferencia con la anterior en la que quedó segunda.
Se centró en el recorrido y «no pensaba en ganar» porque el año pasado no le funcionó, dijo; pero una vez logrado el segundo mejor tiempo del populoso certamen, tras las 2h 22:31 de la keniana Margaret Okayo en 2003, reconoció: «Me han faltado 17 segundos».
«La familia es muy importante, sé que mis hijos están en la meta y saben lo que puede hacer su madre», explicó la campeona, que intentó dar lo mejor para hacerlos felices y cumplir con sus expectativas.
Keitany se impuso con una ventaja de 3 minutos y 13 segundos a su compatriota Vivian Cheruiyot de 35 años, que se anotó un tiempo de 2h 26:02 y adelantó por 20 segundos a Flanagan.
Cheruiyot, quien ganó este año el maratón de Londres -en la segunda vez que participaba- aún no ha decidido si participará en los campeonatos mundiales; también indicó que su familia la anima a «intentar lo mejor».
Por su parte, Flanagan de 37 años, remontó en los últimos kilómetros del curso hasta hacerse con el tercer lugar del podio, del que aseguró estar «orgullosa», y es la estadounidense más rápida de la jornada, con 2h 26:22.
La atleta estadounidense, que tras ganar el año pasado se había planteado finalizar su carrera deportiva, reconoció que durante esta prueba de larga distancia sufrió y pensó: «Podrías estar retirada y tomando algo».
«Me voy a tomar unas horas para relajarme y evaluar, no quiero tomar una decisión demasiado pronto», agregó, aunque sí dijo «sentir de corazón» que su dirección vital se va a acercar más a «ayudar a otros» que a sí misma.
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